Diferencia entre revisiones de «Trinidad Valenzuela, Taller de Amereida VII»

De Casiopea
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Ese rostro finalmente es sagrado, no tiene fin, es más que suficiente para que nuestra aventura permanezca como tal hasta el fin de los tiempos.
Ese rostro finalmente es sagrado, no tiene fin, es más que suficiente para que nuestra aventura permanezca como tal hasta el fin de los tiempos.


*'' Abrir los ojos, releer es volver a descubrir
*'' Abrir los ojos, releer es volver a descubrir''
Cuando uno escribe algo, ya sea un poema o un texto, el espacio entre el lápiz y el papel es intermitente. El aire entre una idea y el papel no existe por ende no podemos ver otras ideas, las oprimimos al escribir una palabra tras otra...  
''Cuando uno escribe algo, ya sea un poema o un texto, el espacio entre el lápiz y el papel es intermitente. El aire entre una idea y el papel no existe por ende no podemos ver otras ideas, las oprimimos al escribir una palabra tras otra...  
Con el tiempo, volvemos a leer. Eso que escribimos sigue ahí, sin embargo la lectura nos regala esa pausa para encontrar entre palabra y palabra lo que tiempo atrás no supimos decir.''
Con el tiempo, volvemos a leer. Eso que escribimos sigue ahí, sin embargo la lectura nos regala esa pausa para encontrar entre palabra y palabra lo que tiempo atrás no supimos decir.''



Revisión del 23:22 26 may 2014



TítuloTaller de Amereida VII, Trinidad Valenzuela
Tipo de ProyectoProyecto de Taller
AsignaturaTaller de Amereida,
Del CursoTaller de Amereida 2014,
CarrerasDiseño Gráfico"Diseño Gráfico" is not in the list (Arquitectura, Diseño, Magíster, Otra) of allowed values for the "Carreras Relacionadas" property.
Alumno(s)Trinidad Valenzuela
ProfesorManuel Sanfuentes, Carlos Covarrubias, Jaime Reyes


1

La gracia de vivir en el presente es vivir en un regalo

Si logramos vivir en el presente podremos dar testimonio de nuestra condición de americanos. Existen otros modos de ser americano, hay otras visiones e ideologías; pero nuestra invitación es a vivir en un modo poético. La poesía abre lo que es posible de ser fundado; abre lo original. Lo hace para que puedan crear... crear américa... desde ahí; el mundo. Esa creación equivale a construir. Se necesita algo que, por gracia, tenemos todos los seres humanos, la posibilidad de oír a la palabra. Es una cuestión de coraje, es decir, hay que tener corazón. Labor del poeta, hay que tener coraje para lo maravilloso, lo admirable, no es lo conocido, no se pueden medir ni catalogar. La tarea más profunda del poeta es a vérselas con lo asombroso; aquello que no tiene fin. Abril el oído para ver lo inmenso que hay para nosotros. Todo esto para provocar una inquietud. Agitar lo habitual para que abra lo infinito, esa es la tarea.


  • (...) que si antes de cada acción pudiésemos prever todas sus consecuencias, nos pusiésemos a pensar en ellas seriamente, primero en las consecuencias inmediatas, después las probables, más tarde las posibles, luego las imaginables, no llegaríamos siquiera a movernos de donde el primer pensamiento nos hubiera hecho detenernos. Los buenos y los malos resultados de nuestros dichos y obras se van distribuyendo, se supone que de forma bastante equilibrada y uniforme, por todos los días del futuro, incluyendo aquellos, infinitos, en los que ya no estaremos aquí para poder comprobarlo, para congratularnos o para pedir perdón, hay quien dice que eso es la inmortalidad de que tanto se habla (...)

-José Saramago, ensayo sobre la ceguera.

El presente es lo único que debemos vivir. El pasado se vivió. El futuro se vivirá. Si desperdiciamos nuestro tiempo en corregir nuestro pasado, olvidamos que estamos viviendo y no ponemos nuestra energía en el presente; y si prestamos nuestro tiempo al futuro nos dejamos llevar y nos volvemos ambiciosos con todo lo que podría llegar a pasar.

Todo lo que esperamos, espera por nosotros

2

Abrir los ojos

Admiración Alegría Asombro

América abierta en contraste por primera ve con una américa disponible a que nuestro corazón fuera donde quisiera. Nosotros debemos comprometernos a que este taller sea el umbral de lo abierto, que sea lo que tiene que ser. Abrir los ojos, los brazos... acentuar nos en la verdadera faz de américa. Ese rostro finalmente es sagrado, no tiene fin, es más que suficiente para que nuestra aventura permanezca como tal hasta el fin de los tiempos.

  • Abrir los ojos, releer es volver a descubrir

Cuando uno escribe algo, ya sea un poema o un texto, el espacio entre el lápiz y el papel es intermitente. El aire entre una idea y el papel no existe por ende no podemos ver otras ideas, las oprimimos al escribir una palabra tras otra... Con el tiempo, volvemos a leer. Eso que escribimos sigue ahí, sin embargo la lectura nos regala esa pausa para encontrar entre palabra y palabra lo que tiempo atrás no supimos decir.

3

4

Cambiar la vida no equivale a cambiar el mundo

“Somos máquinas de supervivencia, vehículos autómatas programados a ciegas para preservar las moléculas egoístas llamadas genes. Los genes, no los seres vivos, son las verdaderas unidades de selección natural. Empezaron siendo «replicadores», moléculas formadas accidentalmente en el caldo primigenio, con la insólita propiedad de hacer copias de sí mismas.”

Modelando a la ciudad se podía moldear a los ciudadanos... si somos determinados por las circunstancias, entonces cambiándolas podremos cambiar, en fin, al hombre. Se creía que a era posible modelas al hombre desde cero... más aún a los niños que son como páginas en blanco, mucho más fácil de cambiar sus destinos. El cerebro y su comportamiento no influenciable por los genes; sobrevivir y replicarse. La idea de que son los genes los principales autores responsables del comportamiento de cada cual, quiere decir que somos maravillosamente únicos y que hagan lo que hagan las ideologías totalitarias, la humanidad prevalecerá floreciendo en esa diferencia.

  • "Nos parece que la condición humana es poética,

vale decir que por ella el hombre vive libremente y sin cesar en la vigilia y el coraje de hacer un mundo" - Alberto cruz

"Con un poquito de buena voluntad, todo es posible" -Loro Coirón

Mi mamá va a su trabajo todas las mañanas, lo odia, porque no es para lo que ella estudió, pero aún así se levanta, cada mañana, cada día y cada mes desde hace ya 6 meses. A pesar de todo ella sigue, porque si ella no sigue, ¿entonces quién?... Es su condición humana lo que la hace libre de renunciar pero es su voluntad de madre, su coraje, la que la hace continuar... porque nunca sabremos lo que va a pasar, pero siempre tenemos la opción de pensar que algo bueno se encontrará con nosotros en el camino más adelante.

5

Los siete sentidos

Sentido de la inmensidad, tanto en lo grande como en lo pequeño. Sentido de la profundidad que nos permite entender los acontecimientos que nos rodean. Sentido del número, que descubra y aprecie en la multitud; que nos calme, nos proteja de esa innumerable cantidad de cosas que están vivas o en forma de materia. Sentido de la proporción, que establezca en lo posible la diferencia entre lo ínfimo y lo inmenso (estando en la proporción humana). Sentido de la novedad, de lo nuevo, capaz de distinguir en la naturaleza el sentido del movimiento, percibir el desarrollo... todo está en constante movimiento. Por último sentido de lo orgánico, que sea capa de descubrir las interrelaciones de todo nuestro universo. Siete sentidos que se agregan a los 5 sentidos (tacto, vista, olfato, oído, gusto) para que una persona joven sea moderna.

Oír al otro es dar cabida, es abrir, es permitir que lo distante entre en uno, es recibir lo nuevo

ÚNICA DELICADA SILENCIOSA Y POR AMOR AL OFICIO

6

Saber, saber, saber, que el camino no es el camino

Sólo podemos entender y oírnos en virtud del rumbo A propósito de lo abisal Abismo es el espesor entre los hombres insoldable e incomprensible. La travesía es una respuesta. La convención de los caminos no sirve para cruzar el abismo.

La Eneida de américa Eneas frente a su ciudad... pierde su patria y su ciudad, va en busca de un destino, no es cualquier andar. De alguna manera Eneas va en busca de el real lugar que le corresponde y va de aventura en aventura, de encrucijada en encrucijada... lleva dentro de sí una certeza: que ha de encontrar el lugar que le corresponda a su magnificencia como ser humano.

Es lo que nosotros balbuceamos como destino; ir por la vida con la certeza de que vamos a rimar con lo que nos corresponda. Esta piel guarda nuestro cuerpo, hay una piel legítimamente más extensa: Amereida no es más que atravesar a paso de paloma por el largo de la existencia con esa luminosidad que nos guía

las gentes desnudas entre sus dioses...

Tomar partido por lo desconocido, ir al fondo del abismo, la palabra que revela y explora su maravilla de ser palabra.

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