Mauro Colombo tarea 4 módulo de investigación t1 2016

De Casiopea



TítuloRelación del habitante y la ciudad con el cielo nocturno desde una extensión americana
AsignaturaModulo de investigación T1 2016
Del CursoModulo de investigación T1 2016
CarrerasArquitectura
4
Alumno(s)Mauro Colombo


Relación del habitante y la ciudad con el cielo nocturno desde una extensión americana

Archivo:UNIvacio PLAlleno.jpg
Representación propia del planeta en el universo y del universo en el planeta, refiriéndose así a los espacios de infinito en la ciudad contemporánea.
.


Nota previa

Mauro Colombo Santorsola, T1 Arquitectura

Isabel Reyes, Profesor guía.


El proyecto en un primero paso compara la multidimensionalidad de la observación con la de la matemática. Por un lado las dimensiones que trae a presencia la observación como el habitar con los sentidos y el contexto. En este estar observando se trae algo que acontece no siempre físicamente a la tercera dimensión (acto > forma > obra). Así mismo la matemática con sus modelos busca mostrarnos una manera de entender el universo que no podemos percibir desde nuestras tres dimensiones. De esta manera la matemática se adelanta y trae a presencia moléculas a la tercera dimensión por una resultante de los cálculos en sus modelos. De esta relación aparece el ser humano y su manera de encontrarse con el cielo nocturno y su multidimensionalidad. El proyecto de título busca el reencuentro del ojo desnudo con la noche y el cosmos.


Abstract

La relación del ser humano con el cielo nocturno a ojo desnudo remonta al origen del habitar. Desde la propia naturaleza del hombre se construía una asonancia con el cosmos que en muchos casos se veía directamente relacionada con el habitar tanto público como privado. A partir de un mismo universo las distintas civilizaciones tenían diferentes maneras de relacionarse con los astros. Así mismo existe una identidad propia a través de la cual América se antepone a lo abisal.


Hoy en día la ciudad Americana se independiza de su noche y promueve un habitar delimitado por una luz que no da espacio a una degradación hacia lo obscuro. Al observar la noche en su plenitud y habitar lo lúgubre se puede presenciar la inmensidad del vacío ilimitado en el espacio. En este gran contraste se comparte la carencia de luz de la proximidad con la máxima lejanía del entre de las estrellas. Este estar asomado al universo es el que permite desarrollar de mejor manera un entendimiento del mismo. A pesar de esta situación que se da con mayor facilidad en nuestro territorio, La luz artificial nocturna va seccionando e incluso desvaneciendo estas preciadas características. De esta manera la contaminación lumínica junto a un conjunto de otros factores van desplazando las aperturas al cielo nocturno y por ende dejando ajena a la ciudad y sus habitantes a este.

El crecimiento explosivo de las ciudades en América los últimos diez años ha provocado una desaparición paulatina de la magnitud visible en zonas rurales adyacentes a esta. A su vez el desarrollo de los centros rurales va extinguiendo la oscuridad entre ambos.

El ensayo busca mostrar el encuentro de la ciudad contemporánea con sus paisajes nocturnos mediante autores que hablan desde la teoría o de la noche como una experiencia. Crear una un relación entre lo más íntimo del individuo con lo mayor que lo rodea (su contexto y su cielo) para de esta manera poder nombrar las características que le dan la identidad a un espacio nocturno

¿Como dar cabida a la relación entre el habitar nocturno y la extensión abisal del ojo?


Palabras claves: Cielo nocturno, Ciudad nocturna, América, Origen, Extensión, Astronomía.


Origen

Las antiguas civilizaciones y etnias alrededor del mundo tenían en su origen una estrecha relación con el cosmos. Más que una relación pasaba a ser una afinidad con este ya que se diferencia de las visiones contemporáneas más populares y acertadas. Las estrellas, el Universo, esa infinidad de puntos que cuelgan sobre nuestras cabezas y que parecieran saludarnos con un parpadeo permanente, siempre han llamado la atención del hombre. Podemos decir que el proceso de observación nace en el mismo momento en que nace la Humanidad. Nuestros antepasados aquí en América, al igual que en Egipto, Babilonia, Grecia o China, asistían maravillados al espectáculo que noche a noche se presentaba a sus ojos y seguramente trataban de explicarse los fenómenos que veían. Sin duda la poca posibilidad de encontrar explicaciones lógicas llevan a desarrollar una fantasía que en muchos casos aún subsiste. Magia, supersticiones, el endiosamiento de algunos de los que hoy conocemos como planetas de nuestro sistema solar o constelaciones, y asignarles motivo y causa de fenómenos acaecidos en la Tierra aún hoy se mantiene. El volver los ojos hacia las estrellas y preguntarse cómo éstas influenciarían el destino de cada ser humano es algo que subsiste en muchas culturas, que no podríamos atrevernos a calificar de ignorantes o subdesarrolladas. Indudablemente, el mantener durante miles de años la creencia que colocaba a la Tierra como centro del Universo y en torno a la cual giraba el resto de las cosas que se veían, impidió tal vez un desarrollo más prematuro de la Astronomía como ciencia, pero, eso sí, hubo un apoyo de ésta al desarrollo de otras áreas, como la navegación, la agricultura o el ordenamiento de la vida cotidiana a través de un sistema de calendarización anual en diferentes pueblos de la Antigüedad, en estrecha relación con los ciclos lunares y la repetición con que aparecían ciertas estrellas o planetas.

En fin, el ser humano, más allá de considerar el Universo en su conjunto como algo de los dioses y para ellos, fue utilizando sus observaciones en un beneficioso desarrollo de la Humanidad. La visión que cada pueblo le dio a estas observaciones está en función directa con su contexto cultural y social, y refleja el medio ambiente físico e intelectual en el cual se encuentra. Independiente de nuestras creencias, solo a modo de ejemplo, todos algo sabemos de la Teoría del Big Bang o cómo se creó el Universo. Aún se discute sobre su validez, y es evidente que esta teoría se contrapone a las interpretaciones religiosas de la formación de la Tierra y todo lo que nos rodea. Los mapuches, si bien aceptan el concepto de algo superior que existía previamente, plantean que el Universo nace como una gran explosión o “Trufquen Ruca”, que podemos traducir como “el estallido de la casa de arriba”. Para ellos el Universo tenía el aspecto de cenizas dejadas por las brasas al irse quemando, y de ahí fueron surgiendo las galaxias. El pueblo mapuche reconoce la existencia de Venus o Guñelve, estrella blanca y solitaria de ocho puntas que aparece dibujada en el kultrún en lados opuestos, es decir, se reconoce que se le puede ver al anochecer y en la aurora. Esta estrella de ocho puntas encuentra su equivalente en la Tierra, en la flor del canelo (foye), árbol sagrado para este pueblo. (http://www.cultura.gob.cl/wp-content/uploads/2013/02/Gu%C3%ADa-mapuche-para- web.pdf)

Lo que hoy día conocemos como las Pléyades, los mapuches las llaman «montón de papas» o Gulpoñi, y su presencia en el firmamento les indicaba que era la época de comenzar a preparar la tierra para plantar el tubérculo originario de este lado del mundo. El término Vía Láctea, que adquiere su denominación actual en una traducción del latín, encuentra una similitud sorprendente en una leyenda mapuche que explica cómo se formó el «río de arriba» o «arroyo del cielo»: una diosa a la que le roban su hijo, amamanta a un bebé que había perdido a su madre; éste, una vez que sacia su hambre se duerme, pero la diosa se da cuenta de que sigue brotando mucha leche de sus pechos, pero también se da cuenta de que hay muchos niños en la Tierra que pueden tener hambre, al igual que el bebé que ella alimentó, por lo que comienza a hacer brotar de sus pechos el blanco líquido, que se transforma en un corredor de estrellas que titilan (gotas de leche) cada noche para satisfacer a los niños hambrientos en la Tierra.(http://www.saladehistoria.com/PSU/Preuniversitario/2013/GM807.pdf) Nuestra conocida Cruz del Sur, para los mapuches, representa la huella del ñandú o choike, uno de sus animales sagrados, y Alfa y Beta Centauri son las boleadoras para cazarlos. En una oportunidad un cazador erró con las boleadoras al tratar de cazar al ñandú, y eso quedó estampado en el firmamento para que los mapuches recordaran que ellos también se equivocan. A través de toda esta convivencia del ser humano con su noche nace un habitar que responde a su entorno. Esta vida cotidiana dicta su espacio privado y público mediante un orden mayor. Al igual que la ruca mapuche en otros pueblos originarios de América, la relación con el cosmos proponía ejes que orientaban su forma de habitar y permanecer.


¿No es acaso esta respuesta Natural del hombre frente a lo inmenso?


El humano no tan solo habitando su noche sino que con ella.


Habitante - Ciudad


“Con el fin de superar el terror original suscitado por cada retorno de la oscuridad, los hombres han tenido necesidad de comprender la noche para lograr habitarla. Este esfuerzo por interpretar el funcionamiento cósmico de la noche y sus implicaciones sobre la tierra la convierten en un espejo y, tal vez, incluso en una fuente de la historia del pensamiento humano, tanto en el ámbito matemático como en el ámbito filosófico y religioso. Esta importancia explica la persistencia y la fuerza de la metáfora nocturna en la historia reciente de la Humanidad, y sobre todo, su rol cultural. Tras convertirse en un reto de la representación artística, como en los jardines del Renacimiento, las ciudades de la luz del siglo XIX o las metrópolis orientadas a eventos del siglo XXI, la noche se ha convertido en un motivo para la creación de los paisajes nocturnos. ¿Será quizá para la humanizar definitivamente la noche?” (Armengaud.(2009). Nightscapes. Barcelona, España: Gustavo Gili. 28-29)

Filósofo, crítico, profesor asociado con escuelas de arquitectura de Paris Marc Armengaud, ha trabajado nuevas formas de espacios públicos, comunidades temporales y movilidad nocturna. Él plantea una pregunta que busca ser contemporánea mediante la historia. La noche es el momento de nuestras 24 horas en las que normalmente no estamos despiertos la mayor parte del tiempo. Cómo hacer parte de nuestro cotidiano a un vacío que queda ajeno a nuestros interiores?

“Pensar la noche significa huir de los criterios del pensamiento diurno y aceptar configurarse con vistas a afrontar 'otra' naturaleza perteneciente al mismo mundo. Por tanto, significa romper lo evidente. Ahora bien, si se trata de tomar distancia, ? de qué modo se puede conseguir que la noche sea un elemento englobado no, que incluya en su seno? ¿ Qué significa este esfuerzo? Hegel dio muy mala publicidad a los paisajes nocturnos con su célebre frase 'Por l anoche, todas las vacas son grises.' Ahora bien, este momento de indecisión es precisamente el que nos permite llegar a una idea más compleja de la identidad de su sombra, su negativo, y es el fundamento de la aventura dialéctica: si existe una realidad diurna y otra nocturna, el pensamiento debería inventar un modo de relacionar las para poder ir más allá del manifiesto y lo oculto. ” (Armengaud. (2009) . Nightscapes. Barcelona, España: Gustavo Gili. 44-45)

La noche contemporánea constituye un estado urbano que supera la capacidad de representación propia de los urbanistas o de los artistas: tan sólo las vistas desde los aviones permiten intuir fugazmente que existe otra realidad del mundo capaz de sustituir el paisaje durante las horas nocturnas. Como un conjunto de pasos. ­Observar y pensar a una escala metropolitana, que es el ámbito donde se dirime el destino de las ciudades contemporáneas.



iluminación y cabida a la observación


­Observar y pensar a través de la organización fundamental de dichos territorios: las infraestructuras. ­Pensar la contemplación no a partir del espacio y de los lugares, sino a partir del movimiento y de las relaciones entre los lugares: los paisajes nocturnos de la red. Existen imbricadas dos historias de la noche metropolitana: una historia oficial, la de las grandes iluminaciones, y otra historia secreta, que se propaga por las redes de infraestructuras en el espesor del territorio. Son dos maneras de hablar del potencial magnetismo nocturno de las ciudades actuales, con el fin de describir que la noche es un entorno muy complejo, un entorno multidimensional. En estos espacios inmensos de permanencia a gran escala se cierra a la mayor cantidad de astros. Sin embargo, se trata de paisajes auténticamente nocturnos, elaborados a partir de una infraestructura que aborda el habitar contemporáneo de la ciudad. ¿De qué manera entra en juego la apertura a lo abisal del espacio en un plano que se independiza del cosmos mediante su luminosidad? El territorio no es un lleno de ciudad, sino que al contrario, este es representado como un vacío con conjuntos de luces que van ubicándose en este. Dibujo propio del territorio nocturno, siendo representadas la ciudades como blanco en un plano que posteriormente siempre había sido negro.

“El deterioro en la observación del paisaje se ha hecho más evidente con el desplazamiento masivo de la población desde áreas rurales hacia las urbanas generando 'la aparición de nuevas áreas residenciales /bloques de apartamentos, viviendas unifamiliares, chalés adosados) al lado de conjuntos urbanos de gran valor histórico­artístico o enclavados en parajes de elevada calidad paisajística' , generando un contraste que provoca graves deterioros paisajísticos (Tandy, 1982, citado por Cáncer)5 esta situación es propia tanto de ciudades como de núcleos rurales que han crecido anárquicamente.”

(Y anina N. Buchiniz1 , Maria Gabriela Torre1 , Hector S. Lepez. (0000). El valor del recurso cielo - paisaje nocturno y la contaminación lumínica. 0000, de Universidad Nacional de San Juan Sitio web :ht tp://www.turismoenconservacion.org/pdf/publicaciones/dadb1a_Paisaje_Nocturno _contaminaci%C3%83%C2%B3n_lum%C3%83 %C2%ADnica_Buchiniz-Torre-Lepez_201 0.pdf . 12)


En mucha de las regiones contemporáneas americanas existe esta proximidad relativa entre las ciudades de mayor impacto lumínico. Creando así un traslape de contaminación lumínica. Al ya ser los niveles de luz en las ciudades extremos, este se expande hasta el contexto urbano de la ciudad. Estos contextos (afueras de la ciudad, leve habitación) aún así cuentan con una intensidad de luz acusada y en algunos casos al alejarse paulatinamente alcanza un nivel leve. Pero al momento de que existe este traslape de contaminación, los lugares adyacentes a la ciudad, no reciben solo luz de la ciudad sino también de asentamientos o ciudades más pequeñas. “En una noche despejada sin contaminación lumínica podemos observar en el cielo hasta lo que en astronomía se conoce como magnitud 6 e incluso 6,5. En esta situación ideal podemos observar alrededor de 3400 estrellas en un hemisferio celeste. En la actualidad en la mayoría de nuestras ciudades y pueblos sufrimos una contaminación acusada o muy alta y el número de estrellas visibles está entre 80 y 300; vemos menos del 10% de las estrellas que podríamos ver" (vease cuadro 1)” (Zuza, K.. (2009). ¿Se puede conseguir que los estudiantes se aficionen a la astronomía si no pueden disfrutar del cielo nocturno?. 0000,



'Siendo un punto de materia en lo ilimitado del universo'


'Traer a presencia un punto de lo ilimitado del universo a nuestra materia.'

Consideraciones finales

El ensayo muestra una relación entre nuestro origen del habitar con el cielo nocturno y una de las visiones contemporáneas respecto al factor cielo nocturno y la observación del espacio a ojo desnudo. En un inicio lo primero de nuestra naturaleza y específicamente de los mapuches que trata como su relación pública/ privada de su habitar se relaciona recíprocamente con el cielo nocturno a modo de experiencia. Dando un segundo paso se trata la característica multidimensional de la ciudad y como esta con su luz se independiza del cielo nocturno pero no de la noche. ¿Pero no es en realidad esta relación con la penumbra y los astros atemporal? Esta afinidad siempre presente va transformándose junto al habitar del ser humano . Como se hablo anteriormente sobre la contemplación a partir de la movilidad y no del espacio. Se urbaniza de cierta manera un total mayor que la ciudad que abarca todas las escalas de permanencia (ciudades, pueblos, asentamientos) y de esta manera se “actualiza” nuevamente la forma de relacionarse del ser con el cosmos. La ciudad incapaz de abrirse al espacio en su totalidad, se hace de su urbanidad y contempla más allá de su mera superficie abarcando un territorio con su contexto. Generando así un orden que da cabida a los espacios de infinito. Estos paisajes secretos en la extensión del terreno urbano traen a presencia el universo con todo su esplendor.


'¿como se abre una o más ventanas de observación que no compartan la luminosidad de la ciudad en el territorio sin separarlos de esta misma?'

Descontextualizarse del orden del día y ser capaz de vivir con algo mayor. Una vuelta del planeta en el que vivimos, una extensión de nuestro habitar. tomar el día y la noche como un todo y que así mismo se oriente la ciudad y su contexto. características que aplicaríamos a estos paisajes nocturnos para dar cabida a la extensión abisal del ojo. La degradación de lo urbano tendría que ir en conjunto con la degradación lumínica. Esto no implica que esta sea concéntrica sino al contrario, la ciudad en el mejor de los casos debería rodear estos espacios de infinito y que estos pasen a ser el centro del territorio a la larga (desarrollo de las ciudades). Que exista un perímetro que guarde el nivel leve para proteger el nivel nulo en el centro de este territorio. Orden del crecimiento de la ciudad en vías de respetar un espacio de penumbra nivel nulo para poder alcanzar la magnitud 6 a ojo desnudo.


Bibliografía

1. anónimo. (1965). Amereida. Santiago, Chile: editorial cooperativa lambda.

2. Armengaud. (2009). Nightscapes. Barcelona, España: Gustavo Gili.

3. Delgado, M.. (2008 JUL-AGO; ). Bajo el mismo cielo nocturno. UCM, 0000, 203.

4. Manquilepe, G.. (2012). Decreto supremo sobre contaminación lumínica. Valparaíso, Chile: PUCV.

5. Melchor, C.. (0000). New formulae for the equivalent night sky emissivity. 0000, de Elsevier Ltd. Sitio web:http://www.sciencedirect.com/science/article/pii/0038092X82903206

6. Rimbaud, A. (1990). Seher Briefe. Frankfurt: DVB.

7. Roger, A.. (2007). Breve tratado del paisaje. Madrid: Editorial biblioteca nueva.

8. Rojas, G.. (0000). la oscuridad hermosa. 0000: 0000.

9. Schultz, M. Ruiz, M.. (2009). Voces del Universo. Santiago, Chile: Ocho libros editores.

10. Soledad, A. Laneri, G. Toledo, M.. (2013). VENTANA DEL ASOMBRO e.[ad] Pontificia Universidad Catolica de Valparaiso Aproximando la extensión de las estrellas. Valparaíso, Chile: Pontificia Universidad Catolica de Valparaiso.

11.Yanina N. Buchiniz1 , Maria Gabriela Torre1 , Hector S. Lepez. (0000). EL VALOR DEL RECURSO CIELO – PAISAJE NOCTURNO Y LA CONTAMINACION LUMINICA . 0000, de Universidad Nacional de San Juan Sitio web:http://www.turismoenconservacion.org/pdf/publicaciones/dadb1a_Paisaje_Nocturno _contaminaci%C3%83%C2%B3n_lum%C3%83%C2%ADnica_Buchiniz-Torre-Lepez_201 0.pdf

12. Zuza, K.. (2009). ¿Se puede conseguir que los estudiantes se aficionen a la astronomía si no pueden disfrutar del cielo nocturno?. 0000, de UPV - EHU Sitio web: http://www.celfosc.org/biblio/general/alduncin-zuza2009b.pdf

Web:

13.http://www.cultura.gob.cl/wp-content/uploads/2013/02/Gu%C3%ADa-mapuche-para- web.pdf

14. http://www.saladehistoria.com/PSU/Preuniversitario/2013/GM807.pdf

15. www.wikipedia.cl

Anexo: fichas de lectura

Ficha 1: Paisaje nocturno como experiencia.

Autor: Marc Armengaud, Matthias Armengaud, Alessandra Cianchetta.

Título: Land&ScapesSeries: Nightscapes

Datos editoriales: Editorial Gustavo Gili, SL, Barcelona, España.

Tipo de publicación: Libro

Palabras clave: Paisaje, Nocturno, territorio, experiencia.

autor: Filósofo, crítico, profesor asociado con escuelas de arquitectura de Paris Marc Armengaud, ha trabajado nuevas formas de espacios públicos, comunidades temporales y movilidad nocturna.


Nota: El libro abarca la noche en muchas de sus aristas. Explica conceptos tanto generales como específicos sobre el cielo nocturno como una experiencia, la infraestructura de la noche y las ciudades nocturnas contemporáneas. Crea una diferencia entre el habitar con el cielo nocturno y con la luz nocturna.


Origen del pensamiento humano (página 28-29) Con el fin de superar el terror original suscitado por cada retorno de la oscuridad, los hombres han tenido necesidad de comprender la noche para lograr habitarla. Este esfuerzo por interpretar el funcionamiento cósmico de la noche y sus implicaciones sobre la tierra la convierten en un espejo y, tal vez, incluso en una fuente de la historia del pensamiento humano, tanto en el ámbito matemático como en el ámbito filosófico y religioso. Esta importancia explica la persistencia y la fuerza de la metáfora nocturna en la historia reciente de la Humanidad, y sobre todo, su rol cultural. Tras convertirse en un reto de la representación artística, como en los jardines del Renacimiento, las ciudades de la luz del siglo XIX o las metrópolis orientadas a eventos del siglo XXI, la noche se ha convertido en un motivo para la creación de los paisajes nocturnos. ¿Será quizá para la humanizar definitivamente la noche?


Habitar lo opuesto (página 31-31) Pensar la noche significa huir de los criterios del pensamiento diurno y aceptar configurarse con vistas a afrontar “otra” naturaleza perteneciente al mismo mundo. Por tanto, significa romper lo evidente. Ahora bien, si se trata de tomar distancia, ? de qué modo se puede conseguir que la noche sea un elemento englobado , que nos incluya en su seno? ¿ Qué significa este esfuerzo? Hegel dio muy mala publicidad a los paisajes nocturnos con su célebre frase “Por l anoche, todas las vacas son grises.” Ahora bien, este momento de indecisión es precisamente el que nos permite llegar a una idea más compleja de la identidad de su sombra, su negativo, y es el fundamento de la aventura dialéctica: si existe una realidad diurna y otra nocturna, el pensamiento debería inventar un modo de relacionarlas para poder ir más allá de lo manifiesto y lo oculto.


Infraestructura de la noche (página 66-67) La noche contemporánea constituye un estado urbano que supera la capacidad de representación propia de los urbanistas o de los artistas: tan sólo las vistas desde los aviones permiten intuir fugazmente que existe otra realidad del mundo capaz de sustituir el paisaje durante las horas nocturnas. Como un conjunto: una hiper-desterritorialización. La primera tarea consiste en investigar los parámetros de evaluación de estos paisajes: -Observar y pensar a una escala metropolitana, que es el ámbito donde se dirime el destino de las ciudades contemporáneas. -Observar y pensar a través de la organización fundamental de dichos territorios: las infraestructuras. -Pensar la contemplación no a partir del espacio y de los lugares, sino a partir del movimiento y de las relaciones entre los lugares: los paisajes nocturnos de la red. Existen imbricadas dos historias de la noche metropolitana: una historia oficial, la de las grandes iluminaciones, y otra historia secreta, que se propaga por las redes de infraestructuras en el espesor del territorio (...)




Ficha 2: Estudios sobre contaminación lumínica.

Autor: Kristina Zuza, Juan Antonio Adunein

Título: Se puede conseguir que los estudiantes se aficionen a la astronomía si no pueden disfrutar del cielo nocturno?

Datos editoriales: Sociedad de ciencias Arasandi

Tipo de publicación: Monografía

Palabras clave: Contaminación lumínica, magnitud observable, ciudad.


Nota: El texto habla de un estudio de estudiantes de astronomía sobre los espectros de luz artificial en ciudades/espacios abiertos y cómo mejorar la situación.


límite natural y artificial del ojo humano (página 66) En una noche despejada sin contaminación lumínica podemos observar en el cielo hasta lo que en astronomía se conoce como magnitud 6 e incluso 6,5. En esta situación ideal podemos observar al rededor de 3400 estrellas en un hemisferio celeste. En la actualidad en la mayoría de nuestras ciudades y pueblos sufrimos una contaminacción acusada o muy alta y el número de estrellas visibles está entre 80 y 300; vemos menos del 10% de las estrellas que podríamos ver (vease cuadro 1)


Archivo:M.C.S tabla.png
texto alternativo






Ficha 3: transformaciones ciudad-cielo.

Autor: Kyanina N. Buchiniz , Maria Gabriela Torre , Hector S. Lepez

Título: El valor del recurso cielo- paisaje nocturno y la contaminación lumínica.

Datos editoriales: Universidad Nacional de San Juan

Tipo de publicación: Monografía

Palabras clave: Cielo nocturno, ciudad y territorio.


Nota: Medidas en relación al cielo nocturno, relaciones entre la ciudad y el espectro lumínico.


Ciudad - Cielo (página 13) El deterioro en la observación del paisaje se ha hecho más evidente con el desplazamiento masivo de la población desde áreas rurales hacia las urbanas generando “la aparición de nuevas áreas residenciales /bloques de apartamentos, viviendas unifamiliares, chalés adosados) al lado de conjuntos urbanos de gran valor histórico-artístico o enclavados en parajes de elevada calidad paisajística” , generando un contraste que provoca graves deterioros paisajísticos (Tandy, 1982, citado por Cáncer)5 esta situación es propia tanto de ciudades como de núcleos rurales que han crecido anárquicamente como conscecuencia del turismo. (...)


Archivo:M.C.S tablo.png
texto alternativo









Ficha 4: Paisaje (nocturno)

Autor: Alain Roger

Título: Breve tratado del paisaje

Datos editoriales: Ediciones Gallimard

Tipo de publicación: Libro

Año de publicación: 1997

Palabras clave: Paisaje, criterio,

autor: Alain Roger es un filósofo y escritor francés, nacido en 1936. Fue profesor de estética en el Departamento de Filosofía de la Pascal Blaise Universidad de Clermont-Ferrand. Su zona favorita es el paisaje . Fue profesor en el Maestro 'jardines, paisajes, territorios "de la escuela de arquitectura de La Villette a partir de 1991 a la de 2001 , fue miembro del Consejo Científico del Ministerio de Ecología, Desarrollo y Ordenación sostenible y director de la colección "País / Paisajes" por las ediciones Champ Vallon .

Nota: Que es realmente un paisaje, que es lo que define paisaje que lo diferencia de otras categorías?


diferenciar paisaje y ecológico (página 145) Me he convencido que la mayoría de los problemas ligados al medio ambiente, con su cortejo de malentendidos y de diálogos sordos, podrían resolverse más fácilmente si no se mezclara todo y si hiciera un esfuerzo por distinguir cuidadosamente los valores ecológicos y los valores paisajísticos. (...) No se trata de “preservar”, “proteger”, “salvaguardar”, etc. Está claro, que sencillamente, se han transferido al paisaje los valores ecológicos, que no son los suyos ¿Porque habría que preservar los paisajes a todo precio? ¿cuales? ¿según qué criterios? Eso no está nunca precisado, ni siquiera se aborda. (...)


Apreciación del paisaje (página 112) No se trata de una diferencia de grado sino de una oposición de naturaleza. El campo es bello “placentero”, el océano es sublime, “terrorífico” . Una llanura muy lisa y de vasta extensión no es seguramente una representación mediocre; la perspectiva se puede extender tan lejos como el océano; pero ¿llenará el alma de una idea tan imponente? De las numerosas causas de esta grandeza, el terror que inspira el océano es la más importante. El terror es, en efecto, en todos los casos posibles, de manera más o menos manifiesta o implícita , el principio de lo sublime. Observaciones de lo bello y lo sublime, Immanuel Kant (1764).


Archivo:M.C.S cerro.jpg
texto alternativo








Ficha 6:

Autor: Rojas, G

Título: La oscuridad hermosa

Tipo de publicación: Poema

Palabras clave: Noche, sentidos


Nota: La inmensidad de la noche, como ella nos habita y cambia nuestra percepción de las cosas y espacios.


OSCURIDAD HERMOSA


Anoche te he tocado y te he sentido sin que mi mano huyera más allá de mi mano, sin que mi cuerpo huyera, ni mi oído: de un modo casi humano te he sentido.


Palpitante, no sé si como sangre o como nube errante, por mi casa,en puntillas, oscuridad que sube, oscuridad que baja, corriste,centelleante.


Corriste por mi casa de madera sus ventanas abriste y te sentí latir la noche entera, hija de los abismos, silenciosa, guerrera, tan terrible,tan hermosa que todo cuanto existe, para mí, sin tu llama, no existiera.




Ficha 7: Chile y su característica observadora

Autor: Arturo Aldunate

Título: Chile mira hacia las estrellas

Datos editoriales: Editora nacional Gabriela mistral

Tipo de publicación: Libro

Año de publicación: 1975

Palabras clave: Astronomía, origen, problemática.


Nota: Libro que trata una línea temporal de la astronomía en chile incluyendo sus orígenes y problemáticas contemporáneas de ese entonces.

Arturo Aldunate Phillips, ingeniero civil, catedrático, individuo de número de la Academia Chilena y Correspondiente de la Real Academia Española, miembro de la asociación internacional de escritores científicos, ha realizado una valiosa labor de humanismo y divulgación científica.


Ver y mirar (página 119) Junto con tal fundamental fenómeno de mutación, la precisión erguida acentuó la posición frontal de los ojos y su capacidad estereoscópica, y permitió al hombre en cierne no sólo "ver", sino "mirar", ejerciendo así, con la intervención del cerebro, una función nunca realizada antes por ningún ser vivo: mirar hacia arriba, mirar las estrellas y tomar conciencia de su existencia. Al decir de algunos etimologistas, la palabra griega anthropos: hombre, tendría su raíz en un vocablo con el significado de 'el que mira hacia arriba', lo cual, además de señalar esta particular actitud, encierra un símbolo de profunda belleza y contenido.(...)

nota: El autor intenta dejar claro la diferencia de estar con un contexto de cielo nocturno y el acto propio de observar el cielo nocturno.


caso Chileno (página 239) Como es ya bien sabido, los observatorios de Chile han alcanzado una jerarquía muy significativa en la astronomía mundial, que nos obliga a ser prevenidos y a no repetir las imprevisiones tecnológicas y el desastroso 'aquí no pasará nada' que tantos problemas estan significando a la Humanidad. Desde el Observatorio del Tololo, ubicado en el Norte Chico, se divisan las luces de algunas ciudades como La Serena, Vicuña, Ovalle y aun del pequeño centro minero Andacollo, por lo cual el natural crecimiento de estos centros poblados y el desarrollo de la minería de la zona podrían producir sorpresas en el aumento del uso de luces exteriores en las zonas ajenas a los observatorios, lo que obliga a preocuparnos a tiempo de este serio asunto. Los alcaldes de las ciudades mencionadas y, en general, los centros poblados vecinos a los observatorios, están muy orgullosos de ellos, y naturalmente les corresponder tomar las debidas preocupaciones para no arruinarlos. De los estudios efectuados por los grupos científicos y tecnológicos de la astronomía chilena, se ha llegado a la conclusión de que es inaplazable efectuar los debidos estudios para evitar el eventual desastre señalado. (...)

¿tiene solución el problema?

Frente a lo expuesto surgen las preguntas: ¿Existe una solución capaz de resolver este problema, aparentemente tan conflictivo? ¿Pueden satisfacerse, cabalmente, las primordiales necesidades de iluminación exterior de los grupos poblacionales modernos y, al mismo tiempo, resguardarse la eficacia de los observatorios astronómicos situados en sus cercanías; o, al menos, reducir un mínimo los riesgos de impedir o reducir la profundidad de sis investigaciones estelares? Para responder estas preguntas cumple formular y responder, previamente, otras dos.

1. ¿Se han diseñado, o son susceptibles de diseñarse, pantallas reflectores y dispositivos de iluminación exterior capaces de evitar dispersión de luz hacia el cielo, que, obviamente, no interesa iluminar?

2.¿Todas las ondas electromagnéticas emitidas por los espectros de iluminación (rayos ultravioletas, luminosos, infrarrojos, etc.) son útiles o necesarios al hombre para "ver" los accidentes del camino o los objetos que le interesan?

De las respuestas a estas preguntas han surgido dos caminos que , al parecer, llevarían a la solución del problema. Primero, si no se han construido, pueden construirse dispositivos para proyectar la luz exclusivamente hacia el suelo o pavimento y hacia los objetos o accidentes que, de manera específica se desea destacar; y segundo, es técnicamente posible restringir zona útil para la visión humana, situada alrededor del color amarillo, suprimiendo, con el consiguiente ahorro de energía, aquellas ondas cuyo único efecto consiste en deteriorar las observaciones astronómicas.

Corresponde entonces a las autoridades vecinales y nacionales preocuparse de dictar una estricta reglamentación para el uso de la luz exterior en las ciudades, poblados e instalaciones cercanas a centros científicos amenazados.


Nota: se crea un orden de posibilidades a las soluciones sin eliminar la posible existencia de otras.




Ficha 8: Land - Territorio, ciudad, campo

Autor: Friedrich Hölderling, traducción por Godofredo Iommi

Título: Der Gang aufs Land, "Ida al campo"

Datos editoriales: Escuela de arquitectura y diseño.

Tipo de publicación: Poema

Año de publicación: 1978

Palabras clave: Territorio, paisaje, exterior.

autor: Filósofo y literario también tradujo varias tragedias griegas al Alemán.

Nota: El poema es escrito aproximadamente en los años 1770 y la manera de describir el paisaje como territorio y a su vez como experiencia deja clara la característica contemporánea del tema siendo que se encuentra en un contexto histórico totalmente distinto al de hoy en día. En el idioma en el que se hizo (Alemán), la palabra "Land" abarca varios significados, entre estos, Tierra, Territorio, Campo y Ciudad. El poema abarca una dimensión de cuidad territorio junto a la experiencia del exterior, incluyendo en varias posibilidades el revés del día, la noche.


Ven! A lo abierto, amigo! Cierto, lo brillante restado, hoy, bajo y estrecho, nos encierra el cielo, ni los cerros están ni aun abiertas de los bosques las cumbres, al deseo y vacío descansa de canciones el aire.

Nublado está hoy, dormitan callejuelas y calles y casi quiere aparecérseme, sea, como la plomiza edad. Sin embargo logrado el deseo, no por una hora el recto creyente desespera. Y al gozo queda consagrado el día.

Pues, no menos alegra, lo que recibimos del cielo, cuando él se resiste y protege a los niños al cabo solo que semejante palabra, así mismo el paso y el ánimo, merezcan el fruto pleno y veraz sea el deleite.

Por eso espero, aun, y si lo deseado comenzamos, y, antes, nuestra lengua, decidimos y hallada la palabra y abierto esté el corazón, de frentes ebrias brotarán las más altas reflexiones y con las nuestras, junto, comenzará el apogeo del cielo y a la abierta mirada lo luminoso se abrirá.

Pues no es grandioso, mas a la vida pertenece lo que deseamos y aparece, a la vez digno y espontáneo así también vienen las golondrinas, portadoras de prosperidad siempre, tantas, prematuras del verano, al país.

De igual modo, arriba, para consagrar con la mejor palabra el suelo donde la casa de huéspedes construye el discreto anfitrión, así ellos catan y ven la hermosura y plenitud del país y que, como el corazón lo anhela, franco y abierto, al espíritu conforme banquete y danza y cantos, el jubilo de Stuttgart sea coronado. Por eso, hoy, deseosos nosotros ascendemos la colina puedan, aun mejor que la afable luz de mayo, de ello hablar los huéspedes y de lo mismo la imagen dilucidar.

Bien de otro modo, como algunos prefieren, pues antigua es la costumbre y se ve luego sonreir los dioses sobre nosotros, pudiese el carpintero en la cumbre del techo cumplir el adagio.

Nosotros, bien que se cumpla, lo nuestro habremos hecho.

Pero bello es el lugar cuando en las fiestas de la primavera el valle se abre, cuando a lo largo del Neckar los sauces enverdecen, el bosque, los árboles temblando, sucesivos, blancos, ondulantes en el aire mecedor y cobijada por una nube en la roja colina, la vid amanece y crece y entibia bajo el asoleado aroma