Maria Jesus Oliva Tarea 3 - Módulo investigación T1 2017

De Casiopea



TítuloMaria Jesus Oliva Tarea 3 - Módulo investigación T1 2017
AsignaturaMódulo Investigación T1 2017
Del CursoMódulo Investigación T1 2017
CarrerasDiseño Industrial"Diseño Industrial" is not in the list (Arquitectura, Diseño, Magíster, Otra) of allowed values for the "Carreras Relacionadas" property.
3
Alumno(s)Maria Jesus Oliva Palma

Abstract

Discusión de autores

Conclusión

Bibliografía

Anexo fichas de lectura

Ficha 1

Tipo: Libro

Titulo: Experiencia y Educación

Autor(es): John Dewey, traducido por Lorenzo Luzuriaga

Año: 1939

Editorial: Biblioteca Nueva

Capítulo(s): Introducción; Saénz, J.

Nota: Se explica lo que plantea John Dewey en su libro “Experiencia y Educación”, viéndolo de una manera más global, desde el contexto de la educación, relacionando lo que se explica con conceptos de publicaciones anteriores que desarrolló Dewey.


Dewey y el conflicto entre conservadores y reformistas en educación

  • “De acuerdo con Kliebard (1987, págs. 4-9), en la última década del s.XIX el statuo quo en Pedagogía en los Estados Unidos la constituían la doctrina de la «disciplina mental» y sus defensores. Esta Pedagogía se fundamentaba en la noción de que ciertas materias de estudio tenían la capacidad de fortalecer las diferentes facultades en las que pensaban que estaba dividida la mente. Esta creencia de que la mente funcionaba como un músculo había conducido a un régimen escolar de ejercicios mecánicos, memorización y disciplina severa, así como la insistencia de la enseñanza del latín” (págs. 28-29)


  • “Tanto los cambios sociales y la exigencias de una sociedad industrial, como los nuevos desarrollos de la Psicología científica de Estados Unidos, produjeron una nueva concepción de lo que constituía el conocimiento útil, con lo que esta Pedagogía de la disciplina mental se fue debilitando un factor importante para esta transformación fue el influjo masivo, hacia 1890, de nuevos estudiantes a las escuelas secundarias” (p.29)
  • “Para 1894 (Kliebard, 1987, págs 34-49), el campo pedagógico reformistas en los Estados Unidos estaba dividido entre dos gruposcon concepciones radicalmente divergentes sobre lo que debía ser el futuro de la educación. El grupo de los «humanistas», con William Torrey Harris a la cabeza, y el grupo de los «desarrollistas», liderado por Granville Stanley Hall. El conflicto central entre ellos residía en el énfasis de los primeros en una educación que desarrollara la racionalidad del niño por medio del ejercicio de la voluntad; y de los segundos en una educación basada en su naturaleza psicológica. Para los humanistas, la Pedagogía debía centrarse en el currículo y su presentación de la tradición histórica de la civilización occidental; concebían el papel del plan de estudios y del maestro como el de dirección de los alumnos. Por su parte los desarrollistas consideraban que de los datos de las investigaciones científicas sobre la infancia se podían hacer inferencias directas sobre cómo educar. Consideraban, de otra parte, que las escuelas existentes ignoraban las necesidades fundamentales de los niños hacia la actividad al imponerles un plan de estudios que iba en contra de sus tendencias y preferencias naturales. En términos del plan de estudios los desrrollistas enfatizaban los estudios de la naturaleza, el juego y la dimensión moral de la literatura.” (p.29)


La crítica a la educación tradicional y a la pregunta

  • “Dewey critíca a la educación progresista que comete errores análogos a la tradicional” (p.35)
  • “(…) experiencia para Dewey no es, a la manera de los espiritas británicos, simplemente es percibido por los sentidos, como tampoco tendría la acepción que se le da en el lenguaje común de «todo aquello que nos sucede». Para Dewey, la experiencia constituye la totalidad de las relaciones del individuo con su ambiente. No es primordialmente un evento cognitivo, aunque la cognición puede hacer parte de la experiencia, en la medida en que se aprehende su sentido. Tiene un aspecto activo y otro pasivo, puesto que es simultáneamente una acción, esto es un ensayo sobre el mundo; y es algo que le sucede al individuo: el individuo actúa sobre el mundo y este a su vez actúa sobre el individuo. Pero la experiencia no sólo transforma al mundo y al individuo, también transforma la experiencia pasada y la futura: constituye una reconstrucción de la experiencia pasada y modifica la cualidad de las experiencias posteriores. Por tanto, la experiencia, mas que un evento aislado, sería una relación –un momento dentro de la «continuidad» característica de la vida– entre el presente y el futuro, y una transacción entre el Yo y el medio, a través de la cual ambos se transforman.” (p.37)
  • “Para Dewey, lo que se requiere es la formulación de una teoría coherente de la experiencia, pues su ausencia no permite elaborar una Pedagogía que opere en la práctica, como tampoco valorar empíricamente los efectos de distintas prácticas” (p.38)
  • “Lo que propone pues, es una forma reflexiva de valoración de estas prácticas, no por ser de test y mediciones psicométricas –a la manera de los eficientistas–, sino por la observación y reflexión permanente del maestro, la cual premiar ir modificando las condiciones objetivas de la Pedagogía para la producción de experiencias educativas. La suya, pues, no es una Pedagogía acabada, para siempre; es la puesta en juego de una serie de conceptos para orientar la práctica pedagógica y valorar sus efectos, de forma que ésta se vaya reformulando y reconstruyendo permanentemente: la Pedagogía como una experimentación constante. ¿Cómo saber entonces, si una experiencia es educativa o no lo es? La respues es típicamente pragmática: por la observación cuidadosa del tipo de alumnos que está produciendo. Y esta observación de los cambios en el carácter o las actitudes de los alumnos, y la observación de la «cualidad» de sus experiencias en la escuela.” (p.38)
  • “(…) las experiencias «antieducativas». Se trataría de experiencias que reducen la sensibilidad del alumno, que conducen a la formación de actitudes de pereza y descuido, que lo dispersan mentalmente, que tienen un efecto disociador sobre la personalidad.” (págs. 38-39)
  • “(…) experiencias genuinamente educativas tendrían el efecto de incitar la curiosidad, de fortalecer la iniciativa y de generar deseos y propósitos lo suficientemente intensos como para permitirle abordar exitosamente en el el futuro lo obstáculos y problemas propios de cualquier experiencia. La experiencia haría más asequibles, más significativas y más controlables las experiencias posteriores.” (p.39)
  • “Lo fundamental no reside en sus efectos en el presente, sino sus efectos en el tiempo.” (p.39)
  • “Para valorar si una experiencia es educativa, el maestro debe fijarse en las dos dimensiones centrales de toda experiencia: su continuidad y su carácter interactivo.” (p.39)
  • “En relación con la continuidad, la experiencia es educativa cuando el alumno crece, esto es, cuando se desarrolla física, intelectual y moralmente, y cuando este desarrollo genera las condiciones para un crecimiento futuro en muchas direcciones.” (p.39)
  • “La concepción de la educación como interacción es la forma en que Dewey resuelve la disputa entre tradicionalistas y progresistas sobre si en a Pedagogía deben primar los factores objetivos o los internos. Considera que éste es un falso dilema: se le debe dar igual importancia a ambos factores; debe haber un un juego recíproco, una interacción (…)” (p.40)
  • “En la práctica, una experiencia es educativa en la medida en que es social, esto es, en tanto se reconoce que se hace parte de una situación específica y se intensifican las interacciones del alumno con el medio y con los demás.” (p.40)


Experiencia educativa y método experimental

  • “El problema central del método para su Pedagogía no es –como lo había sido para la Pedagogía desde el s. XVI y hasta Pestalozzi– cómo debe enseñar el maestro, sino cómo el alumno debe aprender.” (p.40)
  • “Lo que importa no es lo que debe aprender el alumno sino la forma en que debe aprender.” (p.40)
  • “En relación con la organización de las materias de estudio, Dewey parte del principio clásico de las pedagogas centradas en el niño: lo que enseña debe caer «dentro del campo de la experiencia vital ordinaria» de los alumnos (p.111). Pero considera que esto es insuficiente, es sólo el primer paso. El segundo paso es que esta experiencia inicial se reconstruya, enriqueciéndose y organizándose progresivamente por medio de otras experiencias, en dirección a la organización del conocimiento propia de las disciplinas académicas. El maestro debe seleccionar conocimientos proveniente de las materias de estudio que sean de utilidad para el abordaje de los problemas surgidos dentro de la experiencia actual de los alumnos, y que a su vez estimulen nuevas formas de indagación.” (p.41)
  • “(…) «el método científico es el único medio auténtico a nuestra disposición para descubrir la significación de nuestras experiencias diarias en el mundo en que vivimos» (p. 123).” (p.42)
  • “La gran diferencia con la Pedagogía tradicional reside en que las ideas no son concebidas como verdades a ser asimiladas sumisamente, sino como hipótesis a prueba.” (p.42)
  • “La verdad para Dewey no es algo trascendental, no está por fuera del tiempo y el espacio, está inscrita en la vida misma y es tan falible y finita como ella: la verdad es un evento que se renueva permanentemente.” (p.42)


El retorno del maestro

  • “«Está fuera de la cuestión establecer un solo programa de estudios para todas las escuelas nuevas: esto significaría abandonar el principio fundamental de la conexión con la experiencia vital» (p.115)” (p.43)
  • “Por tanto, sus sugerencias a los maestros en relación con la organización del plan de estudios, así como sobre el diseño de las condiciones del aula, constituyen una hipótesis general sobre cuáles serían las características genéricas de una Pedagogía que conduciría a experiencias educativas.” (p.43)

Ficha 2

Ficha 3