Ensayo de presentación, Tomás Vergara

Título	Ensayo de Presentación
Asignatura	Presentación a la Epistemología en el Diseño 2019
Del Curso	Presentación a la Epistemología en el Diseño 2019
Carreras	Diseño
Alumno(s)	Tomás Vergara
PDF	Archivo:Ensayo, Tomás Vergara.pdf

¿Cómo nace el “ser” de una observación, como es este “ser” y como logramos desvelarlo?

Abstract

Hablando desde la observación, es algo que enfrentamos día a día cuando miramos elementos, la naturaleza, el mundo, la ciudad, estamos mirando más allá de lo que se ve en la superficialidad, pero esa observación, como un fenómeno que articulamos sobre lo que “observamos”, no es algo que nos preguntemos sobre el “ser “mismo de la observación, como desvelamos ese “ser”, o si es que este “ser” es algo que se da en acto y el acto le otorga una forma, sin embargo todas estas preguntas sobre la observación, no es algo que se genere sobre la cosa que se está observando o no es algo el cual ocurre por voluntad del que observa, sino que ocurre en medida que haya un “ser” que produzca la interacción con el “ser” observación y la persona en su forma de contemplación del “ser” oculto en un elemento, el cómo se manifiesta ese “ser” y el como yo lo capto, ese “me llama la atención”. Las preguntas sobre la observación, se irán respondiendo a partir de un primer momento desde donde se comienza en el “estado de contemplación” en el cual, se coloca en disposición de la observación, luego se comenzarán a responder sobre las preguntas que ofrece la observación una vez que se conforma como un “ser” que se aparece en la realidad, tomando en cuenta las realidades desde donde este “ser” aparece y el como aparece al “observador”.

Palabras claves: observador, ente, ser, ser observación

El termino de observación, no podemos emplearlo hasta que exista la medida en el cual “es”, en nuestra materia hablaremos desde la observación como un aparecer de su “ser” ante un eventual “observador” que se coloca en el estado para desvelar y aparecer de la observación, las personas que pasan por una plaza no toman la misma posición sobre los elementos de su alrededor como para afirmar algo acerca de la observación, esto ocurre porque no se colocan en materia de estar en disposición de ese “ser” de la observación, es algo que sucede en casos muy particulares, único para cada persona que mantiene el estado contemplativo de “observador”, una diferencia obvia pero no menos importante es, las personas que (como se dijo en un comienzo) pasan por una plaza por ejemplo mantienen un rumbo y dirección, se mantienen al paso salvo para descansar (sentados en una banca por ejemplo), hago esta diferencia para dejar en claro la magnitud que comprende el colocarse en el estado contemplación, contemplación proviene del latín contemplari que dice, mirar atentamente a un espacio delimitado, ya no se trata de una “simple” manera de mirar a primeras un determinado espacio, es un estado donde se mantiene una actitud de “observador” hacia un espacio común para todas las personas como lo es una plaza, este “observador contemplador” es algo que se desprende del “ser” persona para disponerse en un estado extraordinario sobre ese espacio donde se está observando, en un primer momento este estado, ya se coloca en disposición de un espacio, pero hay que hacer la acotación sobre este espacio que es igualmente desprendido del espacio común como algo que se presenta de la misma forma a las personas que no están en ese estado de observación, pues es un espacio que se dispone de igual forma frente a ese observador, es una relación donde en medida que exista “observador”, aparece el “espacio del observador” (acudiré a este término durante el ensayo) donde se comienza a aparecer el fenómeno del “ser” de la observación del que hablaremos.

Como primer paso, hay que entender que para lograr detectar el “ser” de la observación, hay que colocarse en el estado de “observador contemplador” de modo que surja el “espacio del observador” donde entraremos a contemplar a ese “ser”, en este espacio es donde ocurre una arje de la observación, este arje ocurre en el espacio específico que está observando esa persona, esa arje de la observación aparece de diferentes formas a los observadores, “una arje es una historia primigenia. Alguna vez un numen llevo a cabo por primera ocasión una acción determinada, y desde entonces este acontecimiento se repite constantemente de manera idéntica. Esta observación vale sobre todo para los fenómenos naturales” (Hubner Kurt, La verdad del Mito, capitulo 6), este acontecimiento es lo que ocurre como el “ser” de la observación que aparece de diferentes formas a los diferentes observadores. Hay que tener claro que también en ese espacio del observador es donde aparece el ser de la observación, pero aparece en medida que hay un observador, este aparecer no es algo que debe ser forzado puesto que debe haber una actitud de dejar a la observación que sea sobre sí misma sin interrumpir este proceso, así mismo, este ser aparece primero que la misma observación, por esto es que me refiero al “ser” de la observación. Este ser es algo que aparece en medida que la persona pueda observarlo, es un ente que se mantiene en el espacio del observador, este ser se mantiene oculto hasta que se desvela, pero este desvelar es un proceso que se produce en acto desde las dos partes, es un acto del aparecer mientras el observador lo captura en un momento determinado, acá es donde el observador comienza a estar en alerta para ver dónde está la observación y en qué momento se atrapa, hare una diferenciación en base a momentos de la observación desde lo mencionado al principio de la conversación (los momentos que nombrare no es una forma de metodología para la observación).

Existe un momento cero donde la persona antes de salir a observar, se pone a disposición del ser de la observación, muchos dirán sobre que aún no existe aquello ser que se da en la observación puesto que aún no se ha manifestado, voy a llamarlo momento cero porque en el instante donde ocurre esta disposición, nuestros sentidos y nuestra mente comienzan a sensibilizarse respecto del entorno, a esto lo llamo ponerse a disposición de ese ser observación, cuando comenzamos a estar en esa actitud de “salir a observar”, el ser de la observación comienza a aparecer como un “ente” que aún no se ha manifestado de alguna forma, se mantiene en el entorno siempre y cuando estemos en esa disposición como un primer estado de observador, es una correlación entre el ser y el observador pues uno depende del otro para poder aparecer en principio como un ente, “Estas denominaciones no son nombres arbitrarios, porque en ellas habla lo que aquí ya no se puede mostrar: la experiencia fundamental griega del ser de lo ente en el sentido de la presencia..” (Martin Heidegger, “El origen de la obra de Arte”, año…).

Teniendo presente lo anterior, podemos proceder al momento uno, en este momento es cuando se delimita el espacio donde el ente de la observación va a empezar a moverse, este espacio es el que nombramos como espacio del observador, en este punto la persona ya se encuentra en su calidad de observador contemplador del ente de la observación, nace desde el momento que delimita el espacio en el cual se comenzara a buscar y a manifestarse el ente como un ser de la observación, todos estos factores dependen entre si pues no aparecen por sí mismos, aparecen en medida que haya un tercero (observador contemplador) que esté a disposición del ente de la observación que se manifiesta en el espacio del observador como un ser que en principio no tiene forma sino que depende de donde se manifieste. Es importante tener claro este último punto porque este ente se manifiesta de diferentes formas para cada persona, cada observador capta de diferentes formas la observación y en diferentes lugares, así como el ente se comporta de diferentes formas en cada elemento que forma parte del espacio del observador y se va manifestando de diferentes formas, pero insisto en este último punto, estas diferentes formas dependen de como el observador consiga capturar ese ser especifico que se aparece. Lo que pasare a exponer ahora tiene directa relación con lo nombrado al final del párrafo anterior, partiendo desde el punto donde la persona (en su calidad de observador contemplador) se encuentra mirando al ente en el espacio del observador, en esta interdependencia entre la persona y el ente, aun no aparece el ser puesto a que aún se encuentra el ente moviéndose por los elementos que se encuentran en el espacio, tomare el ejemplo de la plaza como se dijo en un principio, el ente se mantiene constantemente en movimiento en la plaza, esta podemos recorrerla en detención, mirarla desde diferentes ángulos, rodearla, etc., lo que está pasando no es un simple contemplar de la plaza, es una búsqueda del ente en los elementos de la plaza, ya no es el simple árbol o la pileta, ya no es solo una banca, cada uno constituye un medio donde el ente puede manifestarse, es un a través, donde el ente penetra y se manifiesta, o sea es el observador el que está en la disposición de buscar donde se posa el ente para luego tomar forma, aquí es donde el observador toma el protagonismo de ver donde se posa el ente y capturar ese momento, no es un capturar literal debido a que ocurre en el interior de la persona pero aquí aun no nace el ser sino que es más bien un acercamiento hacia lo que va a ser, es como en la noche cuando se ve a alguien pasar, uno puede observar la silueta de la persona pero no puede decir con exactitud quien es, así mismo lo que en principio se está capturando es a la silueta del ser, es un acto realizado por la persona de capturar el momento exacto donde el ente se posa, esto constituye a un tercer momento donde el ser aún se mantiene como tal puesto que aún no es.

El protagonismo que juega el observador en este punto es desde el momento donde se posa el ente, es un acto que debe ocurrir para que el ente pueda ser, como se dijo, aun no puede ser puesto que sigue siendo una silueta que está en un medio, este medio puede ser un elemento de la plaza, el observador debe ejercer un esfuerzo para desvelar a este ser que en principio está en forma de ente, este desvelar comienza a ocurrir desde el momento en que el ente se posa en el elemento o mejor dicho desde que el observador logra contemplar el posar del ente como un acto, desde aquí ya comienza un aparecer de la silueta del ser, el arje comienza a presentarse ante los ojos del observador pero un observador activo, para desvelar el ser de la observación es necesario hacer un proceso posterior a la captura del ente. Hay que tener en cuenta que el atrapar no es un gesto que se pueda ver, sino que es un gesto que se registra, y aquí es cuando es necesario el croquis como una forma de dejar registrado al ente de la observación, mediante el croquis se puede exponer en principio el ente de la observación aquí es donde el observador plasma el momento donde el ente se posa y donde comienza a desvelar el ser de la observación, desde este punto es una búsqueda del observador estudiando las particularidades que este ente tiene para que después pueda llegar a ser. Esta búsqueda de particularidades es un proceso de estudio que tiene el observador donde comienza a caracterizar al ente, identificando las propiedades y a la vez el acto mismo que tiene el ente, ahora cabe mencionar que este ente no se mantiene estático, pues es algo que va a ser en un determinado acto, cuando el observador logra capturar el ente, este no es algo que se mantiene quieto, siempre es un ente en acto, por eso es que se logra capturar, o sea en principio, es un ente que se mantiene moviendo dentro del espacio hasta que logra posarse, como dije en un comienzo, los elementos de la plaza funcionan como medios para el ente, desde aquí es como se manifiesta de diferentes maneras, en diferentes actos, ya no es solo el observar del ente, sino que es el observar del actuar del ente, en este actuar ya es cuando la silueta del ser comienza a desvelarse pero sucede solo cuando el observador puede ver el acto, que está haciendo el ente, por eso sobre la primera pregunta de la observación, que es lo que se está observando, aquí es donde el observador comienza a nombrar al ser como un alguien que está realizando determinada acción, esta acción a su vez es dependiente el donde se manifiesta y como lo hace, cuando me refiero al ser de la observación, hablo de cuando este ente llega a ser a través de una acción, pero es un ser que depende del observador puesto que no es sino hasta que el observador pueda decir que es lo que es y que está haciendo, por esta misma razón es por qué el ser se manifiesta de diferentes formas a cada persona, porque este ente aparece en diferentes elementos y situaciones donde está siendo en acto, pero este siendo viene (de nuevo repito) del estado de cada persona en su calidad de observador contemplador, es un juego que depende del otro, no hay observación sin observador, así como no hay un ente que es sin una persona que pueda decir lo que es y como está en acto, por esto también es que llamo a esta ocasión un momento extraordinario, es una ocasión donde el ser de la observación se mantiene oculto y es el ente lo que en principio se mantiene moviéndose hasta el punto donde se desvela como el ser en acto, pero no es algo que se da a primeras puesto que es necesario estar en ese estado de observador contemplador.