Diferencia entre revisiones de «Elizabeth Bustos - Tarea 3 - DHC»

De Casiopea
Línea 5: Línea 5:
|Alumnos=Elizabeth Bustos
|Alumnos=Elizabeth Bustos
}}
}}
=El Encuentro: la posibilidad de crecer en ese habitar=
=El Encuentro: la posibilidad de crecer en el habitar=





Revisión del 11:17 27 may 2021




TítuloElizabeth Bustos - Tarea 3 - DHC
Del CursoEl Dibujo como Herramienta de Conocimiento 2S 2018
1
Alumno(s)Elizabeth Bustos

El Encuentro: la posibilidad de crecer en el habitar

INTRODUCCIÓN

Comenzando el estudio sobre el habitar, se comienza esta investigación desde la observación, abriendo la incógnita por el acto de estar en esta superficie, dirigido a un espacio donde esta toma parte: la mesa, como objeto en función del espacio y la forma. El acto del cuerpo observado, nos va abriendo camino en esta investigación, donde surge el vacío tomando parte en el habitar del espacio, por la recomposición en la sutil distancia producida al cambiar de gesto el cuerpo con relación a la mesa, dando lugar a los diferentes modos de habitarla: comer, trabajar y permanecer, proponiendo una nueva superficie que logre tanto la composición y descomposición de los diferentes modos según su uso. Esta propuesta nos da paso avanzar y continuar con el estudio del cuerpo y su forma, dirigido a nuestro propio cuerpo, reconociéndolo como unidad para detenernos en las acciones que hacemos cotidianamente donde el cuerpo aborda los objetos y el espacio desde lo gestual y métrico.

Después de esta primera etapa introductoria se logra guiar el estudio para el futuro proyecto enfocado en los espacios mínimos, comienza con la investigación de este tema, donde el sentido es poder ver la habitabilidad de espacios, la relación del cuerpo con el elemento, que gesto se produce, donde se busca reducir el espacio guiándolo hacia la habitabilidad, queriendo lograr la optimación de un espacio determinado, obtenido de un proyecto anteriormente ubicado en cuidad abierta, proponiendo un espacio acondicionado para ser habitado por una persona con lo esencial y mínimo para generar acciones cotidianas.

El espacio siendo el lugar físico estudiado en este caso en una casa (mesa) abre paso a lo habitable, y consiguiente a la construcción de esta superficie (objeto), que nos da lugar al encuentro, "Coincidencia o reunión de dos o más personas o cosas en un mismo lugar"(Encuentro, Real Academia Española).“[1] , ese reunir, el poder habitar en comunidad que recoge los diferentes modos de habitarla, donde en américa y el resto del mundo tienen muchas formas diferentes de generar este encuentro. Surgiendo la pregunta, si en cada lugar tienen una forma particular de generar encuentro en torno a la mesa ¿Qué nos entrega ese encuentro? ¿Es diferente para el ser americano que al resto del mundo? ¿Qué particularidad tiene?


DESARROLLO

El espacio nos da esa libertad al cuerpo de poder trabajar en ella, donde gracias al espacio se logra producir el encuentro que muchas veces, pudiendo observar que si no fuera por el espacio el encuentro no se podría lograr, para generar el habitar donde los cuerpos interactúen. En este camino el gesto aparece como factor fundamental, donde cada persona responde al encuentro con diferentes gestos, ya que las variables como por ejemplo el tiempo, la distancia, la temperatura, ect… hacen que el cuerpo responda de diferente forma, generando un ambiente lúdico y único, que aunque se pretenda recrear la misma escena nunca más podrá lograr ese encuentro donde todos los factores sean iguales, ya que nunca todo vuelve a pasar de la misma forma.

En el pensar de cómo se construye este modo de habitar particular para el ser americano del resto del mundo, donde nuestra meta es poder analizar ese encuentro. Surge una palabra muy nombrada en la escuela, que es la hospitalidad, ese acoger hacia los visitantes. Personalmente creo que una forma muy concreta de construir la hospitalidad está en el habitar de un lugar, donde se puede pensar que es lo mismo que el encuentro, pero no es así, ya que el encuentro es como el paso antes de llegar a esta hospitalidad. Si lo pensamos estos estos puntos se observan cuando tenemos la posibilidad de ir a Ciudad Abierta, se logran palpar en ese encuentro que tenemos entre todos nosotros y la hospitalidad con la que nos recibe ese lugar.

“El poema Amereida (1967), propone un continente no ha sido descubierto sino hallado. América no fue descubierta, sino que fue un hallazgo y en este sentido es un regalo. De ahí su permanente posibilidad de ser original, puro presente, y poseer pasado y destino propios. Un poema que es en sí mismo una visión nueva y creativa acerca de lo que América ha sido y es, del sentido que tiene, para todos nuestros oficios, ser americanos.“[2]

Caemos en la cuenta que no es el lugar o el espacio concretamente la que genera el encuentro, sino que es “un medio para”, un medio importante, pero sino estuvieran las personas jamás pasaría nada con ese espacio. Las personas son las que logran generar esa diferencia y que pase ese encuentro, teniendo en cuenta que cada factor es importante para que todo ocurra, tanto en espacio como las personas en él. “Aquel acto que el hombre realiza a partir de un encuentro. Así como lo primero de un encuentro entre dos personas, es saludarse, cruce de palabra y gesto que crea lugar.” ”[3].

Llegar a ver lo desconocido, a un momento nuevo entorno a la mesa, ese encuentro hace ser un momento único aquí o en cualquier parte del mundo. Pero siendo americano tenemos arraigadas ciertos modos, como así también cada persona de las diferentes partes, donde muchas veces florece en nosotros este modo sin darnos cuenta. En experiencia personal hace un año me fui de Intercambio (España) donde pude palpar un poco esta realidad, donde la forma de encuentro es totalmente diferente que en américa empezando por ese saludo un poco más distante de la mayoría de las personas que en primer momento, que a un americano lo descoloca haciendo nuestro modo que tenemos de saludar más cercano desaparezca y recoger ese nuevo modo, acomodándose al lugar del mundo que nos encontremos, muchas veces eso pasa dentro de américa, por esta razón más allá que hablar del ser americano, me gusta referirme a la persona, una unidad, ya que cada uno de nosotros es un mundo que tenemos cosas muy parecidas pero no iguales. Cayendo en la cuenta y reconocer las diferencias culturales, ayudando al encuentro de la gente pueda ser más natural, poder generar esa hospitalidad que muchas veces en tierras lejanas es un poco difícil de encontrar, donde muchos factores externos influyen también como lo social, el sexo y la preferencia individual, por ejemplo.

Muchas veces armamos relaciones en el habitar, generadas por el encuentro y en el ser humano ese habitar está determinado por esa bilateralidad. Una de las cosas que explican las personas hoy es que la forma explica la función, pero eso está perdiendo cada vez más fuerza porque las relaciones sociales que se establecen desde los distanciamientos, ejemplo: la mesa, cumple su función que sirve para comer, pero hay otra cosa más profunda que son los distanciamientos que ella provoca, si bien tenemos distancias corporales, también tenemos distancias sociales. La relación: humano/espacio, no es solo razón, se percibe con el cuerpo, pero no necesariamente con el puro cerebro, ahí es donde esta los distanciamientos en el encuentro, relacionado directamente con lo social.

La interacción social integra el comportamiento espacial, sin embargo, existe diferentes tipos de espacio. El espacio físico que cedemos a una persona dependiendo de la situación en la que nos encontremos, la persona en cuestión, así como el lugar. Si alguien traspasa el espacio físico, conversacional, establecemos mecanismos para restablecerlo y el encuentro va tomando un dinamismo en las personas, generando muchas veces factores influyentes que hacen que la interacción valla fluyendo. Por otro lado, el espacio que nos rodea se conoce como espacio personal o informal y acompaña a todos los individuos. El territorio que lo delimita, su expansión o contratación, también es importante en el encuentro.

"Quien es acogido nunca viene con “las manos vacías”. El que pide posada –de cualquier tipo que sea- nos regala la posibilidad de desarrollar nuestra humanidad. Acoger ayuda a crecer al posadero. Escuchar ayuda a humanizarse al que escucha. Mirar bien sana la vista del que mira. Aliviar al prójimo ennoblece al galeno. Cuidar nos hace humanos. Y esta oportunidad la da el huésped que, con su vulnerabilidad, se hace fuerte ante la aparente fuerza del posadero. Somos todos sanadores heridos que, en el encuentro, tenemos la posibilidad de crecer." "[4].

En la cita anterior de José Bermejo, comparto su pensamiento de que la hospitalidad nos da esa posibilidad de crecer, ya que hablando del encuentro produce muchos sucesos que dan camino a poder aprender y así también formarnos, el mirar, escuchar, haciéndonos humanos y así como tenemos la posibilidad de ayudar, también esta la posibilidad de que nos ayuden. Formando este crecer que habla Bermejo, producido en el encuentro dando lugar a que todo esto valla fluyendo, siendo un factor esencial para cada persona.

También en el poema de Amereida se habla del encuentro, más específicamente del lugar de encuentro, nombrando lo esencial, cuando el lugar no es más que encuentro del mismo, donde si lo llevamos hacia nuestro tema, cuando cualquier tipo de encuentro en cualquier tipo de lugar, lo generan las personas, que dan paso al primer encuentro, ese saludo, otorgando paso una cadena de cosas, como el conocimiento, el crecimiento, la libertad, lo nuevo, la posibilidad de crecer.

   
"El Lugar (arriesga la respuesta) Lugar de ENCUEN-
TRO, dicho de otro modo el Lugar es allí donde
hay-Encuentro. Cualquier encuentro. “Bon jour
Monsieur Courbet” es un Lugar.
Por lo tanto la esencia del lugar depende de la
esencia del encuentro: y hay una historia del lu-
gar. El fin de la historia del lugar es cuando
el Lugar ya no es más que encuentro de sí mismo,
dicho de otro modo cuando el Lugar ya no es más
que encuentro . . . del lugar“

[5].


CONCLUSIÓN

Rescatando lo nombrado, cuando hablamos del encuentro, no dimensionamos todo lo que con lleva esto, por eso siento que nos encasillarnos en decir que el ser americano es de cierta forma a comparación con el resto del mundo y es verdad en cierto punto, tenemos diferencias culturales que están arraigadas en nosotros, pero si lo pensamos un poco más, todos nosotros como personas independiente de donde seamos, estamos en un continuo desarrollo que nos trae una transformación que se ve reflejada en cada gesto de la persona. “Si la hospitalidad se produce, ambos protagonistas se expresan con libertad y el encuentro resultante altera positivamente la identidad de ambos.“ [6].

Existiendo un dialogo entre cuerpos, espacios, por eso es importante que al llegar al encuentro, podamos ser receptivos en todo sentido, abriendo a esa posibilidad de crecer, abrirse a lo desconocido. Muchas veces creemos que el crecer esta solo en lo nuevo, acciones, lugares o momentos que no hacemos habitualmente, pero no nos damos cuenta que cada acción que hagamos, aunque sea todos los días la misma acción, se puede lograr un crecimiento tanto mental, físico, etc… de cualquier índole, generando un flujo en las personas, ese flujo en el encuentro con ellas. Los objetos ayudan a este flujo con la interacción del cuerpo en el espacio, donde la interacción del cuerpo y los objetos o entre cuerpos va generando ese crecimiento.

El dialogo generado entre, por ejemplo, Ciudad Abierta y las personas, es el mejor ejemplo donde se ve el encuentro de forma clara, este espacio accesible para todos, nos da esa posibilidad del encuentro en su máximo esplendor, cuando cada miércoles se lograba generar ese espacio de reunión tanto en los deportes como a través de la palabra con Amereida, donde la hospitalidad logra habitar también otorgándonos esa posibilidad de aprender, crecer.


Las personas se sientas agrupadas en las arenas, generando un encuentro, estamos en la espera, (Croquis Clase Amereida, 2018)




Referencias

  1. Encuentro, Real Academia Española. https://dle.rae.es/encuentro
  2. Reyes, J. (2015). El Pueblo de las Mesas. Ensayo, Escuela de Arquitectura y Diseño, PUCV. https://wiki.ead.pucv.cl/El_Pueblo_de_las_Mesas
  3. Caráves, P. (2007). La Ciudad Abierta de Amereida. Arquitectura desde la Hospitalidad. Tesis Doctoral, Departamento de Proyectos Arquitectónicos Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Barcelona, Universidad Politécnica de Cataluña https://upcommons.upc.edu/bitstream/handle/2117/94120/01Pcs01de14.pdf
  4. Bermejo J.C.,Hospitalidad,2011. https://www.josecarlosbermejo.es/hospitalidad/
  5. Pagina 86 (1986). Amereida II. Libro, Taller de Investigaciones Gráficas, Escuela de Arquitectura UCV. https://wiki.ead.pucv.cl/Amereida_II
  6. Bermejo J.C., Acompañamiento espiritual en cuidados paliativos, Sal Terrae, Santander 2009.