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El Barroco es una consecuencia de la lucha religiosa que hubo en Europa entre la Reforma y la Contrarreforma, entre 1545 y 1563, tuvo lugar la disputa entre la Iglesia Católica Romana y las Religiones consideradas Protestantes, la Iglesia Católica por su parte trataba de enfrentar las nuevas ideas, que con el humanismo de la época ponían en riesgo a sus seguidores. Esta amenaza es llamada la Reforma, y la respuesta a este movimiento tratando de que no llevara a una separación del catolicismo es llamada la Contrarreforma. Luego de la disputa que irremediablemente termino en la separación del cristianismo nace un nuevo estilo de arte, que trata de repopularisar los iconos del catolicismo y sus iglesias, es el Barroco que consiste en una técnica de persuasión y de emociones religiosas por el arte, que ahora se enfoca en atraer y mantener a los fieles, a las masas y no solo a la elite como antes. Es entonces como esta Contrarreforma genera un populismo o una popularización del arte, esta nueva tendencia artística comienza con fuerza a principios del S. XVII en Italia situándose [[Archivo:Dpq8.jpg|thumb|125px|left|G. Lorenzo Bernini, Escultura de un Alma Condenada]] 
entre el Renacimiento y el Neoclásico. Es desde aquí que comienza a expandirse hacia la mayor parte de Europa por un largo tiempo. Esta nueva tendencia produce nuevos estilos en occidente abarcando ámbitos como la literatura, la danza, la música, la escultura, la pintura y la arquitectura. El termino ¨Barroco¨ proviene de la palabra portuguesa ¨Barru¨ que quiere decir en portugués de manera peyorativa ¨perla de forma irregular¨ o ¨joya falsa¨, este término fue empleado por críticos posteriores más que por los de la época. En Italia se consideran tres periodos del barroco, el primero como una época de transición entre el manierismo (1600-1625), el segundo como el barroco pleno o alto barroco (1625-1675) Los exponentes más importantes de este periodo son Jean Lorenzo Bernini y Francesco Borromini, y el tercer periodo (1675-1750) llamado barroco tardío o Rococó. [[Archivo:pdq9.jpg|thumb|200px|left|Baldaquino de San Pedro]]
Una manera de entender el estilo arquitectónico de la época es considerar la intención de los arquitectos de la época por complacer las necesidades de los personajes importantes que encargaban estas obras, tratando de magnificar y sorprender con el detalle de cada obra y mostrar la emoción que caracteriza al catolicismo, esto lleva una condición de satisfacer (LLENO) y la manera como la llevaban a cabo fue mediante una estilización que consideraba el adorno, el contraste, el detalle y la tramoya. Esto como una manera de magnificar la obra y complacer a los mecenas. Usando lo escultórico, la arquitectura barroca logra mostrar un nivel de magnificencia a través de la imponencia del detalle que contrasta con lo macizo (muros, columnas, etc.) y logra el trampantojo que crea lo escénico y la tramoya de esta arquitectura [[Archivo:Pdq7.jpg|thumb|300px|left|Intención Barroco]]en particular queriendo traer esta particularidad al espacio construido. Este contraste se lleva a cabo en las uniones de los elementos macizos y continuos con ondas y curvas concéntricas que rematan cada detalle de las obras, sumando a esto el carácter escultórico muy importante que hace que este periodo sea tan trabajado, pulido y detallado. Es el en detalle, la repetición de curvas y adornos. Lo escultórico, las imágenes e iconos plasmados. Y lo contrastado, la sucesión de planos destacados con la luz donde aparece la dimensión teatral de la arquitectura del barroco, logrando plasmar el pensamiento cristiano de la época en lo habitable, generando una ilusión en las dimensiones del espacio, son los contrastes y el lleno, lo que crea el cambio en la concepción espacial, ya que el barroco trabaja en espacios relativamente reducidos en comparación a las tendencias anteriores como el renacimiento. que habían desarrollado su estilo en espacios mucho más grandes, es en este movimiento reaccionario donde se fijan proyectos de cierta manera menores pero más trabajados, este trabajo que satura lo habitable con adornos, detalles y contrastes logra cambiar la percepción de las dimensiones reales del espacio, haciendo que este se vea más grande de lo que en realidad es, similar a cuando una habitación llena de muebles aparenta ser amplia en cambio cuando está completamente vacía tiende a parecer menor, es la saturación la que crea este trampantojo que hace parecer las dimensiones mayores a lo que realmente son.
Entonces llegamos a la pregunta ¿Es el lleno lo que hace parecer los espacios más amplios? El cambio en la magnitud de los espacios construidos se ve disminuido en esta nueva tendencia, y en el afán de magnificar la emocionalidad por el catolicismo se llega a exagerar y saturar la obra arquitectónica, generando teatralidad a través de los contrastes y la iconografía de los personajes bíblicos, es este lleno, que contiene todas estas dimensiones de contrastes, juego de luces, escultura, detalles y adornos lo que hace que el espacio habitable tuviera una mayor profundidad o extensión de la que realmente hay.


=Caso Europeo=


[[Archivo:pdq1.jpg|thumb|200px|right|Croquis Interior San Carlo alle Quattro Fontane]]Tomamos ahora como caso referencial la Iglesia San Carlo alle Quattro Fontane, una iglesia relativamente modesta en cuanto a sus dimensiones, no contiene las medidas de una catedral, pero en cuanto a su acto arquitectónico posee una intención de catedral, y por algo esta obra de Borromini es un icono del barroco italiano, presenta tal nivel de detalle y saturación, que muestra la intención de la época de satisfacer la necesidad de la iglesia por mantener sus fieles y mostrar la teatralidad del cristianismo. En esta iglesia la fachada presenta esculturas y ondas que generan capas de contrastes, la fachada se vuelve un elemento tridimensional que contrasta la escultura en un fondo de sombra con un marco de columnas y cornisas que hacen aparecer la tridimensionalidad, y teatralidad de presentar las imágenes, es este detalle, este lleno lo que hace que los muros entreguen la dimensión de profundidad de muro. Ya en su interior sucede lo mismo, la profundidad de los muros y la cúpula, que muestran uno tras otro los contrastes de cada elemento que conforma el muro, generando el trampantojo que llamamos profundidad de muro, y lo definimos como una sucesión de contrastes hechos por los elementos que configuran la arquitectura barroca, como columnas, cornisas, esculturas, detalles, adornos y sombras, que se suman entre si y generan este cambio en la percepción de las dimensiones interiores de las obras, haciéndolas parecer más amplias de lo que[[Archivo:pdq2.jpg|thumb|300px|right|Croquis Interior San Carlo alle Quattro Fontane]] verdaderamente son. Ahora considerando que cada elemento como un muro para generar este juego de tridimensionalidad necesita aumentar al doble o al triple su espesor, ya que debe mantener muchos planos de profundidad, esto reduce la superficie habitable, pero la manera de hacerlo más grande no es con el espacio, sino que es el ojo lo que lo hace parecer grande, de cierta forma se habita en estos espacios más con la visión que con el cuerpo, ya que por su uso no se habita como cualquier otro edificio. Entonces podemos decir que en estos espacios interiores al habitarse mas con la vista que con el cuerpo, se da cabida a este trampantojo que acabamos de llamar profundidad de muro, que trabaja con la tridimensionalidad del muro utilizando una gran cantidad de contraste de planos y es esto lo que provoca la alteración de la dimensión en este tipo de edificios.


=Caso Americano=


Ahora como caso americano, tomamos la Capilla del Rosario, en Puebla, México.
En este caso el barroco se torna más sombrío, la obra apela a una emoción aún más oscura que el barroco europeo, y se utiliza en exceso el dorado, como un recurso para obtener lo majestuoso, que en el caso anterior lo generaba el blanco y la finesa de su construcción, las ondas y los elementos unitarios perfectamente trabajados funcionaban generando un único blanco, aquí se trata de llegar al mismo objetivo pero al carecer de técnicas y maestros, como en el barroco italiano se empieza a perder lo escultórico de la arquitectura,[[Archivo:Pdq11.jpg|thumb|300px|right|Croquis Interior Capilla del Rosario, Puebla ]]
 se mantienen las columnas y elementos básicos de la construcción de la época, pero se pierde la escultura que va con la obra y funciona como un todo. Aquí se empieza a dividir la obra. Por un lado está la arquitectura, que son los muros, las columnas, las cornisas, y por otro lado está el detalle, el adorno que decora pero de una manera distinta, ya no se trabaja con la piedra y lo liso, se pierde la tridimensionalidad de muro, ya que se reducen los contrastes, pero se agrega textura al muro, una rugosidad que con el dorado logra generar un contraste pero se disminuye el número de planos que existía en la[[Archivo:Pdq10.jpg|thumb|300px|right|Croquis Interior Capilla del Rosario, Puebla ]] obra anterior, pero ahora los elementos que adornan sobre salen del muro, a diferencia de los muros europeos que da la impresión de que son esculpidos como una sola pieza con esculturas y todo, como si se fuera entrando en el muro, el barroco americano parece ser hecho al contrario, haciendo el muro y luego agregando los detalles, el lleno. Es por esto que el dorado se ve superpuesto, y los elementos ahora con más textura van saliendo del muro, a diferencia de San Carlo que los elementos van entrando en el muro. Estas diferencias en cuanto al trampantojo que llamamos la profundidad del muro, mantienen su característica. La iglesia del Rosario también genera un cambio en la percepción del espacio, a pesar de que es más grande que San Carlo, también provoca el trampantojo de parecer que el espacio es aún más grande de lo que realmente es, a pesar de que en esta obra se reduce el número de planos que presenta el interior, sigue generando el cambio en la visión espacial de la iglesia, y es eso lo que caracteriza el interior de las iglesias del barroco.




[[Archivo:pdq5.jpg|thumb|Fachada San Carlo alle Quattro Fontane]]