Diferencia entre revisiones de «EAD 3210 Mia-Sue Carrere»

De Casiopea
 
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Inaugurada por Iommi, establece un nuevo modo de hacer poesía, que opera a través del juego poético. En sus inicios estos encuentros convocaron a filósofos, poetas y artistas e incluso se mantuvo abierto a recibir otros participantes. “Se trataba de la creación de un nuevo espacio poético que juntaba la poesía con hechos plásticos y que se abría a que cualquier persona, sea cual fuere su actividad u oficio, pudiera participar en él.”<ref>Méndez, F. (2015).De la grandeza: lo sublime en la naturaleza</ref> (Méndez, 2015). Si bien La Phalene se trataría de una ronda, esta establecería roles donde “los poetas improvisaran o leyeran poemas y los artistas plásticos crearan hechos plásticos”<ref>Méndez, F. (1998). La Phalene : Una acción poética. D.G. Ana María Castellón.</ref>(Méndez, 1998). La Phalène  Una acción poética , donde los hechos plásticos corresponden a elementos u objetos que deriven de la plástica. La phaléne a través de su juego poético construía en ronda la palabra hecha por todos.  
Inaugurada por Iommi, establece un nuevo modo de hacer poesía, que opera a través del juego poético. En sus inicios estos encuentros convocaron a filósofos, poetas y artistas e incluso se mantuvo abierto a recibir otros participantes. “Se trataba de la creación de un nuevo espacio poético que juntaba la poesía con hechos plásticos y que se abría a que cualquier persona, sea cual fuere su actividad u oficio, pudiera participar en él.”<ref>Méndez, F. (2015).De la grandeza: lo sublime en la naturaleza</ref> (Méndez, 2015). Si bien La Phalene se trataría de una ronda, esta establecería roles donde “los poetas improvisaran o leyeran poemas y los artistas plásticos crearan hechos plásticos”<ref>Méndez, F. (1998). La Phalene : Una acción poética. D.G. Ana María Castellón.</ref>(Méndez, 1998). La Phalène  Una acción poética , donde los hechos plásticos corresponden a elementos u objetos que deriven de la plástica. La phaléne a través de su juego poético construía en ronda la palabra hecha por todos.  
   
   
2. Obra en común: el modo proyectivo
2. Obra en común: el modo proyectivo


Al surgir la necesidad de los fundadores por un lugar donde se pudiera converger ciudad-obra-estudio, se funda la Ciudad Abierta. En este espacio la poesía y los oficios se complementarían para construir en ronda sus primeras obras. Estas obras comienzan con las Ágoras, Las Hospederías y los Talleres. Para la construcción de estas obras los poetas entregaban un atisbo sobre la dimensión espacial que la obra debería albergar. Acto seguido, los arquitectos y diseñadores (cada uno en sus roles competentes) comenzarían a trazar planimétricamente en verdadera magnitud, los elementos necesarios para recoger esa dimensión poética primera.  
Al surgir la necesidad de los fundadores por un lugar donde se pudiera converger ciudad-obra-estudio, se funda la Ciudad Abierta. En este espacio la poesía y los oficios se complementarían para construir en ronda sus primeras obras. Estas obras comienzan con las Ágoras, Las Hospederías y los Talleres. Para la construcción de estas obras los poetas entregaban un atisbo sobre la dimensión espacial que la obra debería albergar. Acto seguido, los arquitectos y diseñadores (cada uno en sus roles competentes) comenzarían a trazar planimétricamente en verdadera magnitud, los elementos necesarios para recoger esa dimensión poética primera.  
3. Ronda de Corrección: en lo académico  
3. Ronda de Corrección: en lo académico  
La ronda también se ha llevado a la corrección académica de los talleres de diseño y arquitectura de la Escuela. Profesores tanto de diseño como de arquitectura, se reúnen durante un día y en ronda se desplazan por los talleres de la Escuela, revisando las entregas finales de los estudiantes. En esta ronda se expone ante sus participantes los hallazgos que los alumnos han aportado con sus proyectos.
La ronda también se ha llevado a la corrección académica de los talleres de diseño y arquitectura de la Escuela. Profesores tanto de diseño como de arquitectura, se reúnen durante un día y en ronda se desplazan por los talleres de la Escuela, revisando las entregas finales de los estudiantes. En esta ronda se expone ante sus participantes los hallazgos que los alumnos han aportado con sus proyectos.



Revisión actual - 23:08 28 oct 2022





TítuloEAD 4210 Mia-Sue Carrère
Del CursoSeminario de América 2022 2S
Alumno(s)Mia-Sue Carrère

La Ronda: voluntad proyectiva para la materialización del Acto arquitectónico

En el año 1979, el poeta argentino Godofredo Iommi, relata en sus clases magistrales -pronunciadas dentro del contexto académico- aquellas aproximaciones que fundamentan los principios de la Escuela de Arquitectura de la Universidad Católica de Valparaíso. Estas sesiones registradas en formato de audio y hoy transcritas y tituladas “Hay que ser Absolutamente Moderno”, como en “Buscadores de lo desconocido”, en donde Iommi cita a otros autores para referenciar los fundamentos poéticos en los que se inscribe la Escuela y nos presenta nuevas dimensiones para concebir “ahora” la arquitectura.

El arquitecto y profesor de la Escuela Alberto Cruz , en palabras de Iommi, reinterpreta aquello que Rimbaud afirmaba, dándole nuevos significados a la misma sintaxis, estableciendo la siguiente correspondencia: “El ‘hay que’ se traduce en ‘sin dominio’; el ‘ser’ se traduce en ‘disputa’; ‘absolutamente’ en ‘destinación’ y ‘moderno’ en ‘ronda’”[1] (Iommi, 1979). El resultado es según Iommi un contracanto, afirmando entonces que la arquitectura era ahora en ronda. Esta declaración desencadena un nuevo modo para erigir una obra arquitectónica, que no pretendería pertenecer a una categoría estilística, muy por el contrario, inauguraría -a través de la observación detenida de los actos humanos- orientaciones y exigencias formales que presentarían y elogiarían el espacio de manera diferente cada vez.

Como se mencionó anteriormente, este nuevo modo de enfrentarse a la creación, aspiraba a dejar atrás concepciones ya aprehendidas universalmente o dadas por hecho en el diseño, como, por ejemplo, fueron los estilismos de catálogo a partir del pre-diseño. Esta práctica impulsada por los fundadores de la Escuela, estableció un punto de quiebre en lo que hasta ese entonces se contemplaba para el diseño de una obra, lo que resultaba en obras que respondían a la apreciación estética de los varios y donde la tendencia era crear obras originales, las cuales contemplarían la relación espacio-emplazamiento, arquitectura-diseño y dimensión poética-ordenes arquitectónicos.

De este modo, los fundadores acogen el concepto de Ronda como un modo de disponerse ante la etapa creativa de diferentes proyectos en los que se veían enfrentados tanto arquitectos, diseñadores y poetas.


Lo común

La ronda, como concepto según rae nos entrega diecisiete definiciones donde se repiten acepciones, tales como: juego y reunión. Y donde la definición mas conducente es: “Grupo de personas que andan rondando.” (RAE, 2022)[2]. En Chile y otros países latinoamericanos también se define como: “juego de corro”, entendiéndose por “corro” como “Juego infantil en el que los participantes forman un círculo cogiéndose las manos y cantan dando vueltas en derredor”. A partir de las definiciones otorgadas por RAE se conjetura que la Ronda a través de su forma permiten un juego, donde los jugadores están distanciados equitativamente, y por lo tanto, se encuentran en iguales condiciones para participar mediante la disposición circular en torno a un centro y por lo tanto, a un interior.

En consecuencia de estas afirmaciones, podríamos inferir que los fundadores asocian el esquema lúdico de la ronda como una posibilidad de extrapolarla a la generación de obras, donde la ronda como figura define las distancias entre los actores pero que al mismo tiempo, los vincula en torno a una creación colectiva entre los oficios.


¿Qué es la Ronda para la Escuela?

En relación a lo anteriormente expuesto, vale preguntarnos por el sentido de la Ronda en la Escuela. En una revisión bibliográfica de los textos fundamentales de la Escuela, específicamente en el libro “Amereida Palladio: carta a los arquitectos europeos”, Cruz define a la Ronda como aquellos quehaceres que se dan en lo común “Acaba de señalarse lo que llamamos la Ronda. Que es una labor en común. Una que desata, alimenta y unifica la relación lengua poética-lenguaje de los oficios” (Cruz, A. & Barla, B., 2004). Ese común, es entonces, un acuerdo de los varios, donde los varios son los discursos, ideas, intenciones y/o colaboradores que orientan la creación en común acuerdo.

La Ronda, compuesta entonces por la participación de los oficios, esta contemplada en dos momentos: el primero es el acto poético y el segundo es la construcción de la obra. “…un acto poético da comienzo a las obras de arquitectura. Ellas son generadas, tanto en su concepción como en su edificación, en Ronda.”[3] (Cruz, A. & Barla, B., 2004).

Según lo anteriormente expuesto la Ronda aparece como un modo voluntarioso para enfrentarse a la creación arquitectónica en diferentes situaciones a las que se ve enfrentado el cuerpo Escuela, como pueden ser tanto al interior de la academia como en los juegos poéticos y en la construcción de obras de arquitectura.


Momentos en Ronda:

Existen actualmente en la Escuela tres momentos declarados en los que se ha aplicado la Ronda. Estos momentos circulan entre el encuentro para el acto poético a través del juego, el modo proyectivo en el que se disponen los oficios y finalmente el modo de corrección en el ámbito académico.

1. La Phalène: modo poético

Inaugurada por Iommi, establece un nuevo modo de hacer poesía, que opera a través del juego poético. En sus inicios estos encuentros convocaron a filósofos, poetas y artistas e incluso se mantuvo abierto a recibir otros participantes. “Se trataba de la creación de un nuevo espacio poético que juntaba la poesía con hechos plásticos y que se abría a que cualquier persona, sea cual fuere su actividad u oficio, pudiera participar en él.”[4] (Méndez, 2015). Si bien La Phalene se trataría de una ronda, esta establecería roles donde “los poetas improvisaran o leyeran poemas y los artistas plásticos crearan hechos plásticos”[5](Méndez, 1998). La Phalène Una acción poética , donde los hechos plásticos corresponden a elementos u objetos que deriven de la plástica. La phaléne a través de su juego poético construía en ronda la palabra hecha por todos.


2. Obra en común: el modo proyectivo

Al surgir la necesidad de los fundadores por un lugar donde se pudiera converger ciudad-obra-estudio, se funda la Ciudad Abierta. En este espacio la poesía y los oficios se complementarían para construir en ronda sus primeras obras. Estas obras comienzan con las Ágoras, Las Hospederías y los Talleres. Para la construcción de estas obras los poetas entregaban un atisbo sobre la dimensión espacial que la obra debería albergar. Acto seguido, los arquitectos y diseñadores (cada uno en sus roles competentes) comenzarían a trazar planimétricamente en verdadera magnitud, los elementos necesarios para recoger esa dimensión poética primera.


3. Ronda de Corrección: en lo académico

La ronda también se ha llevado a la corrección académica de los talleres de diseño y arquitectura de la Escuela. Profesores tanto de diseño como de arquitectura, se reúnen durante un día y en ronda se desplazan por los talleres de la Escuela, revisando las entregas finales de los estudiantes. En esta ronda se expone ante sus participantes los hallazgos que los alumnos han aportado con sus proyectos.

Conclusiones

A modo de conclusión es posible asumir que la ronda se establece como un principio de disposición o voluntad que da la partida para concebir los actos arquitectónicos y espaciales con el objetivo de agrupar a sus participantes y colaboradores, convirtiéndose en un modo proyectivo que finaliza con la materialización de obras o actos.

La consolidación de este modo en el transcurso de los años hasta la actualidad han terminado por componer el espíritu del cuerpo de la Escuela que asume desde lo colectivo la creación de común acuerdo. Es en ronda donde aparece la libertad creativa y donde participan los otros, ellos son los oficios quienes desde las dimensiones que les competen y desde diferentes escalas de experimentación, diseñan y ejecutan aquello que se da en común acuerdo. En ronda se hace aparecer la voluntad inicial del acto poético. La ronda hace aparecer el momento presente, pues es en este estado de completa voluntad por el hacer, donde surge un diálogo entre los oficios. Y, es precisamente en el diálogo donde se accede a la comprensión de la dimensión del otro. Esta comprensión se materializa a través del actuar de los oficios.

La ronda hace aparecer el momento presente en tanto que se permanece en un trance para materializar el sentido original que motiva la obra. Así, Amereida nos señala que “éste es su origen – estar en trance estar en trance no de un antes a un después no de una barbarie a una civilización sino en trance presente presente sólo está lo que tiene un destino destino sólo es una fidelidad al origen” [6] (Varios autores, 1997). Por lo tanto, la ronda como planteamiento de acción, se presenta desde su inicio como un afán por posicionarse en el presente a través de lo común para concebir la obra a partir del acto poético, que si bien este último el cuerpo Escuela no lo declara como una ronda, si el modo de enfrentarse a él propone responde al axioma de Lautreamont “la poesía debe ser hecha por todos y no por uno" (Lautreamont, 1869).

  1. Iommi, G. (1979). Hay que ser absolutamente moderno. “Transcripción de la clase del poeta Godofredo Iommi M., del 18 de Mayo de 1979, para el Taller de América de la Escuela de Arquitectura y Diseño de la PUCV.”
  2. Real Academia Española (2022)
  3. Cruz, A. & Barla, B. (2004). Amereida-Palladio: carta a los arquitectos europeos (Ediciones Universitarias de Valparaíso, Vol. 1). https://www.ead.pucv.cl/app/uploads/2020/03/Amereida-Palladio-2004-Cruz-C.-Barla.pdf
  4. Méndez, F. (2015).De la grandeza: lo sublime en la naturaleza
  5. Méndez, F. (1998). La Phalene : Una acción poética. D.G. Ana María Castellón.
  6. Varios Autores (1967, p.163). Amereida. Chile. Cooperativa Lambda.