EAD3212-01. Poética General. Josefina Saintard. Tarea 2

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TítuloEAD3212-01. Poética General. Josefina Saintard. Tarea 2
AsignaturaPoetica General
Del CursoPoética General 2021 S1
CarrerasDiseño
2
Alumno(s)Josefina Saintard

La dualidad de la palabra y dibujo en el modo de acceder a la obra

PALABRAS CLAVES: palabra, dibujo, estudio, método.

ABSTRACT

El siguiente escrito busca explorar el campo de la palabra y su relación con la expresión visual, y las diferentes posibilidades de estos dos elementos. Observandolos en cuanto a sus facultades relacionadas al orden de aparición de cada uno y vinculados al pensamiento. De esta manera, se pretende indagar en las cualidades de la palabra y el dibujo, con el fin de reparar en la utilidad de ambos. Y así analizar, si la palabra únicamente constituye una guía hacia una expresión gráfica y luego de constituida esta última, la palabra se ve disminuida y se vuelve casi imperceptible ante la magnitud del dibujo, o bien el dibujo la potencia, incluso sin necesidad, de aparición de la palabra. Quizás la palabra no es más que eso, es la guía hacia la expresión gráfica. Por otro lado, en el caso del dibujo, quizás este es pasajero y solo es un medio para llegar a nombrar o decir algo. En este sentido, se pretende abordar la cualidad de lo permanente que pueden llegar a tener ambos elementos en una manera de estudio en pos de algo más.


Sobre la palabra

La palabra desde sus inicios se ha visto vinculada con lo visual, compone uno de los grandes misterios de la historia en cuanto a su relación con la imagen visual, ya que quizás para muchos, en lo que se refiere al campo creativo o al proceso de creación, la imagen se antepone a la palabra, pero esto no es más que una manera personal de ahondar en la imaginación y adentrarse en el conocimiento de una materia, ya que bien podría decirse que no es lo uno o lo otro en la búsqueda de adquirir conocimiento. Entonces quizás, el orden de estos dos elementos, la imagen y la palabra puede no alterar el resultado del conocimiento, pero para Albert Einstein, como bien destaca (Estañol, 2008)[1]: “primero estaba la imagen y después podrían venir las palabras y los símbolos matemáticos. “La imaginación es más importante que el conocimiento”, decía Einstein.” Las palabras han sido percibidas desde hace mucho ya de manera visual, en este sentido, la palabra, abre su condición de palabra en libertad, o en lo libre, pero solo hasta un cierto punto, puesto que se ven condicionadas por su etimología y significado, o como bien hace referencia (Fédier, 1965, pág 55)[2], en la Bitácora de Amereida, que no se pueden usar las palabras sin saber su origen. Sin embargo, las palabras se encuentran libres de uso al estar dispuestas y presentes. A menudo se utilizan de manera superficial, sin ahondar más allá en su significado e interpretación, debido a que inconscientemente, y en el marco de esa libertad, las utilizamos creyendo ya saber sus significados y no reparando tanto en ellos en un diálogo cotidiano, puesto que en labios, ellas tienen esa condición de la rapidez.

Entonces podríamos decir que la palabra es nuestro origen, corresponde a ‘lo primero’ tiene el potencial de dar inicio y ser guía de un diálogo, de una obra, del dibujo etc… Y queda inscrita en esa libertad de juego, tal como lo menciona (R.Fló, sin año )[3] diciendo que la palabra también juega, pero no necesariamente al definir un tema, sino como una manera de influir en la obra visual a la que acompaña, en donde las obras abstractas se hacen representativas a partir de un título, quedando definidas por este. Si tomamos el ámbito del dibujo y lo visual, quizás podríamos decir que es la palabra la que tiene lugar primero, es el origen de lo visual, juega el rol de guía en el perfilamiento del dibujo y es necesario que ella aparezca para otorgar así un entendimiento de lo que se observa, tal como lo menciona (R. Pérez, 2020)[4] al decir que la palabra es una potencia, es algo que indica un trayecto o camino, y adquiere un mayor significado al ir de la mano con el dibujo,(Cruz.C, B.Barla, 2004, pág 78)[5]:“Pero una vez configurada la palabra en dibujo ella retumba y quien la relee encuentra otro matiz de lo prolijo, por ejemplo” De esta manera, la palabra ya por sí sola constituye una potencia que ilumina o que guía hacia la expresión gráfica, que ya de por sí tiene un potencial abundante para el conocimiento, pero es cuando esta se encuentra con el dibujo que hace mayor sentido. No se trata de observar si es el dibujo sin la palabra o la palabra sin el dibujo, sino de reparar en el orden en que ambos elementos se dan, en el que existe una cierta dependencia, ya que posiblemente al disponer solo de uno pareciera que necesita de algo más o que la expresión visual no está enteramente constituida. Si utilizamos la palabra como método o guía hacia la construcción de una expresión gráfica podríamos decir que ella es originaria, o bien como recoge Godofredo Iommi (G.Iommi, 2016, pág. 2)[6] diciendo que las palabras cumplen una función primordial que es el elogio, en el fondo la vía o método de conocimiento es el elogio, por lo tanto la palabra es originaria e indicadora en su cualidad de elogiar, de develar, en su magnitud de palabra, el sentido hacia una expresión visual posterior quizás, pero esta no debe quedar delimitada por la palabra o su significado, por lo tanto, quizás se trata de la noción de palabra que se tiene, que como bien dice (Cruz.C, B.Barla, 2004, pág 55)[7]no se trata de bajarlas al ritmo nuestro, sino de que las palabras mismas ya no sean solo significados que indican, sino que respiren otro modo inalcanzable, o sea, palabras que sean cadenciadas con otros pies y que puedan, eventualmente, llevar a la expresión gráfica.

sobre el dibujo

Independiente de que la palabra, o las nociones de esta, puedan ser consideradas como originarias hacia la creación de algo, también se tiene la apertura hacia esta creación por medio del dibujo. Este compone una manera de expresar la realidad, ideas o bien emociones. Su importancia radica en que es una forma de expresión que ha sido practicada por el ser humano desde el comienzo de la historia. Inicialmente, los seres humanos buscaban representar con trazos la realidad de su entorno, como lo fue con las pinturas rupestres que suponen un recurso de investigación para antropólogos e investigadores porque dan una idea de cómo era la historia antigua. A medida que pasa el tiempo, las personas han ido desarrollado la capacidad de pensar y dominar las habilidades motoras y desarrollar lenguajes complejos que dan cuenta del dibujo y las obras de arte. En base a esto, el poder del dibujo se ha convertido en lo que conocemos hoy, en el que es posible utilizar una variedad de técnicas y conocimientos para poder realizarlo.

En este sentido, es quizás por medio de la observación de otro arte, o bien de otra expresión visual, que en la búsqueda de adquirir el conocimiento necesario para el desarrollo de esta, se utiliza como método de acercamiento hacia una nueva expresión gráfica, lo cual trata de un arte que mira, analiza y estudia por medio de los trazos con el fin de expresar el conocimiento adquirido de papel a papel, si fuera el caso. En este sentido, (Pérez, 2020)8 hace referencia, en la presentación del documental “Amereida, solo las huellas descubren el mar” a una frase que reúne las cualidades que se asemejan al argumento mencionado anteriormente, y es que se trata del juego de espejos, es un arte que mira a otro arte, que registra otro arte y que lo interpreta. Quizás alguien podría decir que viene de la copia, y sí, pero no en el sentido de plagio, sino como un estudio de lo ajeno que trae lo nuevo, lo original y lo propio como aporte a lo anterior. En un cuaderno de notas, recopiladas por Heidegger, sobre Paul Klee, este último hace mención a lo anterior diciendo (P.Klee, 2013, pág 181)[8]:

“En otros tiempos se pintaban cosas que se podían ver en la tierra, y que se veían o se hubiesen visto con agrado. Ahora se descubre la relatividad de las cosas visibles, y al mismo tiempo se expresa la creencia de cómo lo visible en relación a la totalidad del mundo es un ejemplo aislado y cómo otras verdades están latentes en su mayoría. Las cosas aparecen en un sentido más amplio y diverso, a menudo contradiciendo aparentemente la experiencia del pasado. Se pretende la esencialización de lo aleatorio”

El re-dibujar algo en el sentido de estudiarlo, tiene algo del azar, ya que en un primer momento puede que no se tenga certeza de lo que se quiere estudiar, o del objeto de estudio, definiendo como objeto de estudio, no la obra que se mira sino la materia que se busca abordar, ya que es por medio de los trazos que la materia aparece. En este sentido, (Arp, 2006)[9] se refiere a esto mencionando que había que confiar y dejarse llevar por la obra que está naciendo, ya que las formas van a llegar afables o extrañas, hostiles, inexplicables, mudas o adormecidas, porque estas nacen por sí mismas en el simple acto de desplazar las manos y abiertas a lo desconocido. Entonces, luego de que estas formas aparecen y teniendo ya la materia a estudiar, esta última se la puede seguir mirando, quizás en otras obras, con el fin de poder ahondar en el pensamiento de estudio adquirido en ese primer momento. En este caso, el dibujo es lo que viene primero, y que a su vez funciona como medio de comunicación para poder llegar posteriormente a la palabra.

Ambos métodos, suponen modos de acceder al estudio, ya sea de la palabra al dibujo o del dibujo a la palabra, y en este caso están vistos como medio de llegada hacia una expresión visual. Pero se cree que estos son válidos para cualquier circunstancia de diseño, ya que constituyen una primera manera de acercarse o de ser guiados hacia la obra y en este sentido al modo de pensar que puede tener un diseñador, pues son maneras de cómo este entra en obra. En esta dualidad del pensar para acercarse a esta última, pueden existir otras variantes e incluso otros métodos, si se los puede llamar así. Dicho esto, no se busca establecer maneras de pensar en el diseño en vista de estas dos dimensiones, sino que a través de ellas puedan, a ojos de otros, ser enriquecidas por ellos siendo llevadas a diferentes dimensiones con el fin de ahondar en el estudio, e incluso quizás ser vinculadas este en otras disciplinas y así que no solo se vean ligadas a el área del diseño.

Como se observa, cada uno de estos dos métodos fueron abordados de manera separada con la finalidad de poder dar claridad de su manera de aparecer, pero ambos tienen elementos indispensables que los condicionan, que son la palabra y el dibujo, ya que en esta dualidad de pensamiento se aprecia la aparición de ambos, pero en distinto orden, por lo cual uno podría tomarse la libertad de decir que la palabra no es nada sin el dibujo así como el dibujo no es nada sin la palabra, ya que ambos son totalmente dependientes entre sí. Lo anterior solo supone una opinión, ya que es más que claro que ambos elementos por sí solos suponen una gran importancia, pero es cuando se da el encuentro entre ellos que adquieren una potencia incluso mayor.

  1. Estañol, B. (2008, 1 mayo). De la imagen a la palabra. Letras Libres. https://www.letraslibres.com/mexico/la-imagen-la-palabra
  2. Escuela de Arquitectura UCV, Girola, C., & Iommi, G. (1986). Amereida: Bitácora de la Travesía (1a ed., Vol. 1) [Libro electrónico]. Escuela de Arquitectura UCV. https://wiki.ead.pucv.cl/Amereida:_Bitácora_de_la_Traves%C3%ADa
  3. Asociación Psicoanalítica del Uruguay, & Fló, R. (sin año). Las palabras en las artes visuales; como expresión poética o como expresión de poder institucional. (N.o 1). Asociación Psicoanalítica del Uruguay. https://www.apuruguay.org/sites/default/files/Rodrigo-Flo-Las-palabras-en-las-artes-visuales.pdf
  4. MNBACHILE. (2020, 12 agosto). Ciclo Arte y Documental | Amereida, sólo las huellas descubren el mar [Vídeo]. YouTube. https://www.youtube.com/watch?v=x1jFQh-UQjs
  5. Cruz, A., & Barla, B. (2004). Amereida-Palladio carta a los arquitectos europeos (1.a ed., Vol. 1) [Libro electrónico]. Ediciones Universitarias de Valparaíso. Pontificia Universidad Católica de Valparaíso. https://www.ead.pucv.cl/app/uploads/2020/03/Amereida-Palladio-2004-Cruz-C.-Barla.pdf
  6. Este texto pertenece al libro Cuatro talleres de América, con Alberto Cruz C., Claudio Girola y Francisco Méndez (Taller de Investigaciones Gráficas, Escuela de Arquitectura UCV, Viña del Mar 1982); clases dictadas en la Escuela de Arquitectura de la UCV durante el año académico 1979.
  7. Cruz, A., & Barla, B. (2004). Amereida-Palladio carta a los arquitectos europeos (1.a ed., Vol. 1) [Libro electrónico]. Ediciones Universitarias de Valparaíso. Pontificia Universidad Católica de Valparaíso. https://www.ead.pucv.cl/app/uploads/2020/03/Amereida-Palladio-2004-Cruz-C.-Barla.pdf
  8. Seubold, G. (s. f.). Las notas sobre Klee heredadas de Heidedder [Libro electrónico]. En Las notas sobre Klee heredadas de Heidedder (47.a ed., Vol. 1, pp. 177–187). Estud.filos. https://www.redalyc.org/pdf/3798/379837110009.pdf
  9. Arp, J., Fauchereau, S., & Círculo de Bellas Artes (Madrid, S. (2006). Jean Arp (3.a ed., Vol. 1) [Libro electrónico]. Círculo de Bellas Artes. http://www.circulobellasartes.com/fich_libro/arch_fich_libro_26.pdf