Diferencia entre revisiones de «Cecilia Mancilla»

De Casiopea
Línea 45: Línea 45:
Por lo tanto el barrio es con un perfil de ciudad, expresado en el horizonte del mar, en que un  pequeño fragmento de este, posiciona el barrio en la ciudad. Por tal,  tenemos que el barrio se proyecta mas allá de una medida tangible, ubicándose con respecto a la ciudad. Valiéndose del emplazamiento plegado que tienen los cerros hacia el interior de la ciudad, posicionándose ante lo abriente que trae la pendiente a medida que se sube.
Por lo tanto el barrio es con un perfil de ciudad, expresado en el horizonte del mar, en que un  pequeño fragmento de este, posiciona el barrio en la ciudad. Por tal,  tenemos que el barrio se proyecta mas allá de una medida tangible, ubicándose con respecto a la ciudad. Valiéndose del emplazamiento plegado que tienen los cerros hacia el interior de la ciudad, posicionándose ante lo abriente que trae la pendiente a medida que se sube.


Valparaíso es una ciudad que se acompaña a sí misma. Pues el manto en que se encuentra conformada se sucede en un conjunto de cerros plegados en '''una curva que  trae el giro leve de quien acompaña''', orientando a su vez, hacia '''la libertad propia que experimenta cualquier habitante al estar ante la extensión infinita que esconde el horizonte  del mar''', el cual se hace mas fuerte al contrastar con lo atestado de la rada. Su tridimensionalidad es equiparable con el horizonte de mar al cual se proyecta.
Valparaíso es una ciudad que se acompaña a sí misma. Pues el manto en que se encuentra conformada se sucede en un conjunto de cerros plegados en '''una curva que  trae el giro leve de quien acompaña''', orientando a su vez, hacia '''la libertad propia que experimenta cualquier habitante al estar ante la extensión infinita que esconde el horizonte  del mar''', el cual se hace mas fuerte al contrastar con lo atestado de la rada. Su tridimensionalidad es equiparable con el horizonte de mar al cual se proyecta.


En Valparaíso. ''El barrio se acompaña de la ciudad''.
En Valparaíso. ''El barrio se acompaña de la ciudad''.
El umbral del barrio se desarrolla con un trasfondo que encierra un perfil de ciudad, trayendo un contraste lumínico con la sombra cercana de la vegetación y la luz destellante del mar. '''Un doble umbral que trae a presencia barrio y ciudad. En una suerte de doble umbral en contraste lumínico'''.
El umbral del barrio se desarrolla con un trasfondo que encierra un perfil de ciudad, trayendo un contraste lumínico con la sombra cercana de la vegetación y la luz destellante del mar. '''Un doble umbral que trae a presencia barrio y ciudad. En una suerte de doble umbral en contraste lumínico'''.

Revisión del 21:33 15 abr 2010

Lo Apareciente-Imperceptible del Barrio

Como desarrollo de Umbral de Cerro, desde el Plan.



Los volumen de los block acotan y limitan la mirada en lo curvo de las calles, trayendo un un ritmo sinuoso.
La sombra le trae un marco a la llegada configurando un umbral que comienza en la sombra inestable de la vegetación Y termina en la rigurosidad del block. Conformando un tiempo de encuentro entre quien sale y llega bajo la sombra.
La escalera configura el orden de los blocks. Trae lo ascendente y lo variable entre un cerro y otro

Los umbrales se presentan como un espesor acotado que orienta el cuerpo y contiene la mirada. Este espesor en conjuntos habitacionales organizados en blocks y la masa voluminosa que los conforma, es recibido con impacto ante la gran sombra a contraluz que emite.

Entre los intersticios de los block, el cuerpo se orienta a medida que uno se adentra contenido por la altura de los blocks; advertido por la calma y ambiente distendido que caracteriza el barrio; en especial en los barrios de las alturas de los cerros de Valparaíso, que hacen de esta llegada al barrio casi imperceptible dado que las calles curvas, propias del cerros, van llevando al habitante, del plan al cerro, de manera continua a través de la curva, de forma apareciente. La diferencia se encuentra dada por la sombra a contraluz que emiten los blocks marcando un antes y un después; avisando o ya percatándonos de estar en otra expresión de ciudad.

El exterior del barrio, con su amplia magnitud impacta como una envolvente, al ir ascendiendo a través del barrio.


Entonces tenemos que el umbral se aparece en un estado continuo, trayendo lo imperceptible de la llegada, hasta la sombra de los blocks que impactan a contraluz, como la puerta del barrio. Un modo de Ir llegando de la continuidad del paso al impacto a contraluz del ojo, que recibe mostrando la totalidad del barrio en la nitidez visual de la sombra, con la primera imagen del total del barrio. El conjunto habitacional es aunado bajo la enormidad de su sombra.


De lo imperceptible a la curva, de la curva a lo continuo.





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Cómo lo infinito y libertad se manifiestan en los cerros de Valparaíso

Desde la intimidad urbana plegada en los cerros.


Ir a croquear los umbrales trae la dimensión del barrio, pues es aquí donde se despliega lo que podría decirse “el tiempo de la calle” ya que es en ella y en sus callejones, con variadas plazuelas espontaneas, lo que desata el encuentro entre sus habitantes, reubicándose estos, ante un área urbana propia, desplegada, sobretodo, con la detención de quien saluda y conversa alternando la mirada entre el vecino y el barrio.

Pero el barrio en Valparaíso hace acento en la ciudad. Donde su carácter marino es presenciado en el barrio, valiéndose de su ubicación en la pendiente. Por lo tanto el barrio es con un perfil de ciudad, expresado en el horizonte del mar, en que un pequeño fragmento de este, posiciona el barrio en la ciudad. Por tal, tenemos que el barrio se proyecta mas allá de una medida tangible, ubicándose con respecto a la ciudad. Valiéndose del emplazamiento plegado que tienen los cerros hacia el interior de la ciudad, posicionándose ante lo abriente que trae la pendiente a medida que se sube.

Valparaíso es una ciudad que se acompaña a sí misma. Pues el manto en que se encuentra conformada se sucede en un conjunto de cerros plegados en una curva que trae el giro leve de quien acompaña, orientando a su vez, hacia la libertad propia que experimenta cualquier habitante al estar ante la extensión infinita que esconde el horizonte del mar, el cual se hace mas fuerte al contrastar con lo atestado de la rada. Su tridimensionalidad es equiparable con el horizonte de mar al cual se proyecta.

En Valparaíso. El barrio se acompaña de la ciudad. El umbral del barrio se desarrolla con un trasfondo que encierra un perfil de ciudad, trayendo un contraste lumínico con la sombra cercana de la vegetación y la luz destellante del mar. Un doble umbral que trae a presencia barrio y ciudad. En una suerte de doble umbral en contraste lumínico.