Diferencia entre revisiones de «Aurora Fernández T4 - Módulo de Investigación T2 2015»

De Casiopea
Sin resumen de edición
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A pesar de la implementación de dichas medidas iniciales, estos espacios manifiestan cierto grado de vulnerabilidad en cuanto a su protección, debido a la existencia de un precario control de sus accesos y el estar en el lugar, como también la excesiva carga de ocupación, provocando con el paso del tiempo la degradación y/o destrucción de estos parajes. Lo anterior, nos revela el desconocimiento del valor de los recursos naturales y culturales que nos envuelven, y una cultura de conservación lentamente desarrollada.  
A pesar de la implementación de dichas medidas iniciales, estos espacios manifiestan cierto grado de vulnerabilidad en cuanto a su protección, debido a la existencia de un precario control de sus accesos y el estar en el lugar, como también la excesiva carga de ocupación, provocando con el paso del tiempo la degradación y/o destrucción de estos parajes. Lo anterior, nos revela el desconocimiento del valor de los recursos naturales y culturales que nos envuelven, y una cultura de conservación lentamente desarrollada.  


Al introducirnos en los términos de conservación, surge una iniciativa contemporánea de la puesta en valor de las áreas naturales, donde se expone que ''"el reconocimiento de una parte de nuestro entorno natural y artificial representa un legado valioso y que constituye, por ello, una herencia o patrimonio, forma parte de una actitud cultural de reciente calado en el pensamiento occidental, como ya señalaba D. Eversley"'' <ref>Ortega V., José. "El patrimonio territorial: El territorio como recurso cultural y económico." Ciudades 4 (1998): 33</ref>, vislumbrando aspectos iniciales de una cultura de la naturaleza, que reconoce éstos espacios y busca generar conciencia colectiva de su preservación. Este cambio ''"ocurre avanzado el siglo XX, manifestándose una concepción mucho más amplia del patrimonio, como legado de la experiencia y el esfuerzo de una comunidad, ya sea material o inmaterial, el patrimonio se interpreta como el lugar de la memoria. Deja por ello de reclutarse en recintos y ciudades privilegiadas y exige un reconocimiento vinculado al ámbito donde se ha producido, que refuerce su identidad. Se empieza a tomar conciencia de su valor como herencia de una sociedad y de su carácter indisoluble por tanto de la misma y de su territorio. Surgen con ello nuevas instituciones, instrumentos y conceptos, como los paisajes culturales."''<ref>Caporale, Marcela. "Revalorización del paisaje arqueológico del área protegida "Humedales del Santa Lucía": estrategias para la gestión del patrimonio cultural-arqueológico en territorios costeros." Identidades: Territorio, cultura, patrimonio 3 (2012): 121</ref>. Por consiguiente, se entiende la revalorización patrimonial de un espacio natural y sus vestigios como un todo, donde ningún factor debe desprenderse del otro.
Al introducirnos en los términos de conservación, surge una iniciativa contemporánea de la puesta en valor de las áreas naturales, donde se expone que ''"el reconocimiento de una parte de nuestro entorno natural y artificial representa un legado valioso y que constituye, por ello, una herencia o patrimonio, forma parte de una actitud cultural de reciente calado en el pensamiento occidental, como ya señalaba D. Eversley"'' <ref>Ortega V., José. "El patrimonio territorial: El territorio como recurso cultural y económico." Ciudades 4 (1998): 33.</ref>, vislumbrando aspectos iniciales de una cultura de la naturaleza, que reconoce éstos espacios y busca generar conciencia colectiva de su preservación. Este cambio ''"ocurre avanzado el siglo XX, manifestándose una concepción mucho más amplia del patrimonio, como legado de la experiencia y el esfuerzo de una comunidad, ya sea material o inmaterial, el patrimonio se interpreta como el lugar de la memoria. Deja por ello de reclutarse en recintos y ciudades privilegiadas y exige un reconocimiento vinculado al ámbito donde se ha producido, que refuerce su identidad. Se empieza a tomar conciencia de su valor como herencia de una sociedad y de su carácter indisoluble por tanto de la misma y de su territorio. Surgen con ello nuevas instituciones, instrumentos y conceptos, como los paisajes culturales."''<ref>Caporale, Marcela. "Revalorización del paisaje arqueológico del área protegida "Humedales del Santa Lucía": estrategias para la gestión del patrimonio cultural-arqueológico en territorios costeros." Identidades: Territorio, cultura, patrimonio 3 (2012): 121.</ref> Por consiguiente, se entiende la revalorización patrimonial de un espacio natural y sus vestigios como un todo, donde ningún factor debe desprenderse del otro.


Vinculadas a estas renovadas manifestaciones de conservación del patrimonio natural-cultural de una comunidad, surgen en Chile nuevas políticas gubernamentales y organizaciones de iniciativa privada, como Así conserva Chile, que traen a presencia un nuevo modo de abordar el cuidado de áreas de atractivo y valor innato a lo largo del país, poniendo hincapié en el modo de habitar de estas áreas junto a un arduo trabajo de investigación, lo cual declare de mejor manera los aspectos vitales para la preservación de áreas naturales protegidas.  
Vinculadas a estas renovadas manifestaciones de conservación del patrimonio natural-cultural de una comunidad, surgen en Chile nuevas políticas gubernamentales y organizaciones de iniciativa privada, como Así conserva Chile, que traen a presencia un nuevo modo de abordar el cuidado de áreas de atractivo y valor innato a lo largo del país, poniendo hincapié en el modo de habitar de estas áreas junto a un arduo trabajo de investigación, lo cual declare de mejor manera los aspectos vitales para la preservación de áreas naturales protegidas.  


Lo anterior, trae consigo el reconocimiento, re-ordenamiento e infraestructura necesaria para favorecer e incentivar este proceso de conservación, promoviendo una labor social, educativa y turística desde le punto de vista de la sostenibilidad, ''"proceso que permite el desarrollo sin degradar o agotar los recursos que hacen posible ese desarrollo."''<ref>Bringas, Olivia. "El turismo rural." Revista Universidad de Sonora 21 (2008): 42.  
Lo anterior, trae consigo el reconocimiento, re-ordenamiento e infraestructura necesaria para favorecer e incentivar este proceso de conservación, promoviendo una labor social, educativa y turística desde le punto de vista de la sostenibilidad, ''"proceso que permite el desarrollo sin degradar o agotar los recursos que hacen posible ese desarrollo."''<ref>Bringas, Olivia. "El turismo rural." Revista Universidad de Sonora 21 (2008): 42.</ref>
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===Consideraciones finales===
===Consideraciones finales===

Revisión del 01:19 21 ago 2015



Del CursoMódulo de Investigación T2 2015
CarrerasArquitectura
4
Alumno(s)Aurora Fernández


Título

Abstract

Palabras claves:

Desarrollo

Vivimos inmersos en el constante ritmo de la ciudad, vinculándonos directamente con su extensión y los modos de habitar que en ella se revelan, sin caer en cuenta de las áreas naturales y diversos paisajes que nos rodean, donde prevalecen inigualables ecosistemas y/o vestigios de nuestra historia. Algunos de estos espacios naturales se traducen, actualmente, en áreas denominadas Parques, Reservas o Monumentos Naturales, de carácter público y privado, los cuales se consagran en la búsqueda de preservar y conservar el bien tangible e intangible que su extensión trae a presencia, empleando distintas medidas de resguardo como, por ejemplo, la conformación de un acceso definido, senderos que guíen al visitante en el lugar o la creación de un área alejada donde se expongan los bienes, restringiendo así el acceso al lugar.

A pesar de la implementación de dichas medidas iniciales, estos espacios manifiestan cierto grado de vulnerabilidad en cuanto a su protección, debido a la existencia de un precario control de sus accesos y el estar en el lugar, como también la excesiva carga de ocupación, provocando con el paso del tiempo la degradación y/o destrucción de estos parajes. Lo anterior, nos revela el desconocimiento del valor de los recursos naturales y culturales que nos envuelven, y una cultura de conservación lentamente desarrollada.

Al introducirnos en los términos de conservación, surge una iniciativa contemporánea de la puesta en valor de las áreas naturales, donde se expone que "el reconocimiento de una parte de nuestro entorno natural y artificial representa un legado valioso y que constituye, por ello, una herencia o patrimonio, forma parte de una actitud cultural de reciente calado en el pensamiento occidental, como ya señalaba D. Eversley" [1], vislumbrando aspectos iniciales de una cultura de la naturaleza, que reconoce éstos espacios y busca generar conciencia colectiva de su preservación. Este cambio "ocurre avanzado el siglo XX, manifestándose una concepción mucho más amplia del patrimonio, como legado de la experiencia y el esfuerzo de una comunidad, ya sea material o inmaterial, el patrimonio se interpreta como el lugar de la memoria. Deja por ello de reclutarse en recintos y ciudades privilegiadas y exige un reconocimiento vinculado al ámbito donde se ha producido, que refuerce su identidad. Se empieza a tomar conciencia de su valor como herencia de una sociedad y de su carácter indisoluble por tanto de la misma y de su territorio. Surgen con ello nuevas instituciones, instrumentos y conceptos, como los paisajes culturales."[2] Por consiguiente, se entiende la revalorización patrimonial de un espacio natural y sus vestigios como un todo, donde ningún factor debe desprenderse del otro.

Vinculadas a estas renovadas manifestaciones de conservación del patrimonio natural-cultural de una comunidad, surgen en Chile nuevas políticas gubernamentales y organizaciones de iniciativa privada, como Así conserva Chile, que traen a presencia un nuevo modo de abordar el cuidado de áreas de atractivo y valor innato a lo largo del país, poniendo hincapié en el modo de habitar de estas áreas junto a un arduo trabajo de investigación, lo cual declare de mejor manera los aspectos vitales para la preservación de áreas naturales protegidas.

Lo anterior, trae consigo el reconocimiento, re-ordenamiento e infraestructura necesaria para favorecer e incentivar este proceso de conservación, promoviendo una labor social, educativa y turística desde le punto de vista de la sostenibilidad, "proceso que permite el desarrollo sin degradar o agotar los recursos que hacen posible ese desarrollo."[3]

Consideraciones finales

Citas Bibliográficas

  1. Ortega V., José. "El patrimonio territorial: El territorio como recurso cultural y económico." Ciudades 4 (1998): 33.
  2. Caporale, Marcela. "Revalorización del paisaje arqueológico del área protegida "Humedales del Santa Lucía": estrategias para la gestión del patrimonio cultural-arqueológico en territorios costeros." Identidades: Territorio, cultura, patrimonio 3 (2012): 121.
  3. Bringas, Olivia. "El turismo rural." Revista Universidad de Sonora 21 (2008): 42.

Bibliografía

- Barcaza S., Mónica. "Centro educacional para el desarrollo social: Educación Turismo - Revalorización de territorios aislados patagonia chilena: Competencias para consolidar el desarrollo del ecoturismo en el sector poniente del Lago General Carrera, Puerto Tranquilo, XI Región." Universidad de Chile, 2012.

- Bringas, Olivia. "El turismo rural." Revista Universidad de Sonora 21 (2008): 42.

- Caporale, Marcela. "Revalorización del paisaje arqueológico del área protegida "Humedales del Santa Lucía": estrategias para la gestión del patrimonio cultural-arqueológico en territorios costeros." Identidades: Territorio, cultura, patrimonio 3 (2012): 113-136.

- Fernández, Guillermina, y Guzmán R., Aldo. "Turismo, patrimonio natural y desarrollo sostenible" Revista Caminhos de geografia 3 (2002): 1-19. Acceso Julio 18, 2015.

- Morales M., Jorge. "¿Centro de Interpretación?." Carpeta informativa del centro nacional de educación ambiental (1994). Acceso Julio 18, 2015.

- Ortega V., José. "El patrimonio territorial: El territorio como recurso cultural y económico." Ciudades 4 (1998): 33-48.