Conjuntos habitacionales, OPTIMIZACIÓN DE RECURSOS

Al comenzar a abordar el tema de los conjuntos habitacionales aparece de inmediato un problema social: el déficit de viviendas en Chile. Así me encuentro con soluciones habitacionales tales como los campamentos, el bloc, y las viviendas sociales, diseñadas especialmente para llevarse a cabo con el mínimo de recursos.

Luego, sumado a la realidad socioeconómica, aparece el aprovechamiento de suelos debido a la abundante población que migra hacia las grandes urbes, sobre todo a la capital. Así, la inversión en construcciones verticales va en aumento, desplazando a la casa, posicionándose en proximidad a los centros urbanos.

Quebrando esas primeras miradas al conjunto habitacional como la solución a un problema, aparece el con-dominio, el cual en nuestro contexto y actualidad, donde se jerarquiza a la población según factores determinados por la economía, da cuenta de la posibilidad de acceder a una propiedad en conjunto con otros donde aparece una intención de asegurar el bienestar local.

Aún así, con pocos recursos, es posible encontrar inmuebles óptimos que poseen potentes rasgos arquitectónicos.

Relaciones directas con la ciudad

lugar geográfico: valor y aprovechamiento del suelo
accesibilidad
contexto sociocultural
contexto socioeconómico

UMBRALES, proximidades del llegar

Quebrada Márquez: EXTENDERSE ENTRE FRENTES.

<FRENTE Y ATRÁS DE INTIMIDAD COMPARTIDA> Frente de VIGILIA y atrás de lo EXPUESTO EN COMÚN.

Desde el Puerto, la plaza Echaurren y La Merced, hitos del PLAN, la llegada al conjunto no se da tras una reja. Llegar a Quebrada Márquez es encontrarse con BALCONES continuos, FRENTES de encuentro entre transeúntes y vecinos, que dan INTERIORIDAD a la calle haciéndola parte del recinto como una cavidad. Es este ELEMENTO ARQUITECTÓNICO, PARTE, lo que unifica el conjunto, TODO. Encontrarse con él es ENTRAR al lugar, estar entre VOLÚMENES que se enfrentan. Desde él, el vecino también puede reconocer a quien pasa, se da la VIGILIA.

Aquí también hay rejas. La INTIMIDAD COMPARTIDA posee LÍMITES PARA EL OJO Y LA MANO. Entre balcones, hay vecinos que determinan hasta donde se puede pasar. Y si bien me fue posible cruzar una reja que durante el día se encontraba entreabierta, hay un encuentro con 2 INTIMIDADES: ASOMARSE por el balcón, que si bien es lugar de paso también es parte de “la casa”; y la ROPA QUE SE TIENDE, la cual se extiende entre frentes traseros, vistos por quienes residen en cada edificio. Una intimidad que, si bien mantiene esa dimensión de lo compartido por el ojo, se restringe al ALCANCE de la mano del propietario.

Conjunto en 15 Norte, Viña del Mar

EXPLANARSE ENTRE LO VERTICAL

Este conjunto se encuentra sumido entre las verticales propias del plan de viña del mar. Las REFERENCIAS que orientan el LLEGAR son: EJES URBANOS (Av. Libertad y 15 norte) y el COMERCIO del Mall, el cual articula gran parte del FLUJO al ubicarse en un lugar de TRANSICIÓN clave entre comunas (desde Libertad, inicio de la ruta hacia Reñaca, Concón y Gomez Carreño); y en el paso entre Plan y los desapercibidos cerros que reaparecen como horizonte tras el horizonte vertical de los edificios. Así, este conjunto despliega un acto a escala de recinto y a escala urbana: EXPLANARSE, cobrar un sentido de suelo horizontal que se contrasta en el “llegar hacia” y en el “estar en” el conjunto. En contraste a Quebrada Márquez, el PATIO COMÚN se cuida como ENCUENTRO, espacio para el estacionamiento, al reunión y el juego de niños, desde el paso por la reja, al jardín interior, al umbral del edificio, se da el SALUDO ENTRE ACCESOS, en la explanada de encuentro que da suelo al residir en vertical.

dimensión de GRADUACIÓN, desde lo encimado a lo abierto

Acceder por Valparaíso desde el plan al cerro es, para el ojo, ABRIRSE PASO, desde encontrarse sumido entre lo vertical que encima, hasta las aperturas que ofrece esta ciudad mirador, pasando por una GRADUACIÓN en la que se hace presente la casa. Pero UNA CASA NO ES POR SÍ SOLA, es con un acceso, parte de un RECORRIDO, y con su PRESENCIA, la cual como forma, CONFORMA un exterior, PARTE de un TODO, el cual se reconoce en una CONTINUIDAD, ya sea por el espacio geográfico donde se INSCRIBEN, ó por la semejanza entre casa y casa, incluso por una vista o por la presencia de algún hito o rasgo urbano que aparece como REFERENCIA de aquel lugar, ya sea una FACHADA CONTINUA, sucesiones de ANTEJARDÍN, ESCALERAS, PENDIENTES, ESQUINAS, etc…

Ya sea levemente o evidentemente, va apareciendo una relación con las VISTAS, de un PAISAJE que es ESCENARIO COMÚN de un conjunto. He ahí la APERTURA, blanco de la ciudad, blanco del barrio, LUZ de la casa.

APERTURA QUE EN PENDIENTE CONFIGURA ESTACIONES, ENCUENTROS entre comercio y barrio, abastecimiento y sectores de consumo potencial próximos a abastecerse… No solo FORMA ARQUITECTÓNICA, sino también FORMA URBANA, explícitamente en conjuntos pensados como Quebrada Márquez, 7 hermanas, etc… o fortuitamente en barrios que comparten sedes, negocios, o un modo de LLEGAR, PASAR y ESTAR común.

EL OJO SE GUÍA POR LO ABIERTO

TIPOLOGÍAS

Conjuntos habitacionales en Valparaíso

Barrio Patrimonial Paseo Atkinson, Cerro Concepción

Se distingue como conjunto por la uniformidad entre casa y casa, vinculadas por una fachada continua y sucesiones de antejardines que en su cierre progresivo completan el paseo dando un frente a la proyección, siendo un lugar de casas, cafés, e improvisadas galerías de arte destinadas tanto al turista como al vecino. Forma y destinación del programa del barrio distinguen este paseo como un conjunto abierto al paso.