Sombra Lúdica, Opacidad en Transición al Borde Iluminado, Ciclo 1, 2019
Título | Sombra Lúdica, Opacidad en Transición al Borde Iluminado, Ciclo 1, 2019 |
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Tipo de Proyecto | Proyecto de Taller |
Palabras Clave | ciclo 1 |
Asignatura | Taller del Acto y el Vacío - Tamaño Arquitectónico del Interior: 1° Semestre 2019 |
Del Curso | Taller del Acto y el Vacío - Tamaño Arquitectónico del Interior: 1° Semestre 2019 |
Carreras | Arquitectura |
Alumno(s) | Catalina Aninat |
Profesor | Rodrigo Saavedra, Filippa Massa |
Título | Sombra Lúdica, Opacidad en Transición al Borde Iluminado, Ciclo 1, 2019 |
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Asignatura | Taller del Acto y el Vacío - Tamaño Arquitectónico del Interior: 1° Semestre 2019 |
Carreras | Arquitectura |
Nº | 1 |
Alumno(s) | Catalina Aninat |
Primera Sombra Lúdica (individual)
Opacidad en Transición al Borde Iluminado, Croquis XL
La Sombra del Follaje
La variación de las densidades de hojas en el follaje de los árboles (cuerpo, objeto con volumen) proyecta una sombra compuesta de diversas opacidades. Al centro del follaje (más denso) le corresponde la proyección de la sombra más opaca y central; a medida que se avanza hacia los extremos de las ramas, la densidad del follaje se va perdiendo, existiendo "perforaciones" de luz que se traducen en brillos sobre la sombra proyectada en el suelo y, por lo tanto, hacen que esta última vaya, progresivamente, perdiendo opacidad. Finalmente, cuando termina la zona de follaje, hay un traspaso completo de la luz; así, en el suelo, se origina un contraste entre la superficie iluminada y la sombreada, dándose lugar a un borde.
La superficie del espacio que resulta sombreada se convierte en un semi-interior. La sombra delimita un espacio que, al habitarse, adquiere un grado de pertenencia.
Se construye así un prisma triangular que contiene la sombra nombrada a partir de las observaciones anteriores
En una cara del prisma: pequeñas aberturas que logran conformar un entramado de traspaso y contención (a modo del follaje del liquidámbar). Estas aberturas son cortes alargados y el ángulo que rodean el elemento más grande de contención de luz (que correspondería al follaje de mayor densidad). En la proyección de la sombra, es este último el que proyecta la opacidad central. El traspaso de la luz a través de las aberturas genera brillos que son la transición hacia la superficie iluminada que es el perímetro de la sombra del prisma completo: el Borde Iluminado.
Segunda Sombra Lúdica (conciliar dos propuestas)
Opacidad entramada hacia el Borde
Dos propuestas de Sombras Lúdicas han debido ser conciliadas (Opacidad en Transición al Borde Iluminado (Catalina Aninat) y Sombra de Borde Definido (Fernando Aldea)) para la construcción de un prisma que iría calzado en el domo del HEPI en la Plaza "La Conquista", en Cerro Placeres. El elemento común es el borde, que es descrito como contraste en ambas propuestas. De ahí el fundamento de la conciliación. Se llegó al nombre de "Opacidad entramada hacia el borde", que hace referencia a la pérdida gradual de opacidad de la sombra hacia un borde definido por contraste entre plena sombra y plena luz. El entramado es la forma que tomará "lo gradual" en el prisma.
El prisma se construyó con dos tablas triangulares de madera, unidas por listones de madera, de manera que quedase un vació entre ellas. Se definieron perforaciones o cortes diferentes para ambas tablas de modo que, al momento de superponer, se formara un entramado. Los únicos cortes que calzan completamente corresponden a una esquina para dar el máximo traspaso lumínico al entramado, y al borde opuesto a esta esquina para generar el contraste necesario para la máxima definición del borde sombreado. Además de la sombra, se construyeron luces coloreadas agregando acrílicos de colores al prisma.
Las tablas de madera fueron pintadas según un fundamento de color: La tabla que quedaría expuesta (hacia afuera del domo) fue pintada de color azul oscuro. Fue este color elegido por ser cercano al negro y por tener, por lo tanto, la propiedad de absorber la luz (captación de la luz desde el exterior). La tabla que quedaría en el interior del domo fue pintada de blanco para reflejar y, así, rescatar la mayor luminosidad posible que ingresase. Entre ambas tablas y en los espacios superpuestos fueron agregados diversos colores (amarillo, rojo y azul claro), creando un juego de calce visual (la mirada busca calzar los cortes y los colores). Por último, los cantos fueron pintados del color adyacente para reflejar el traspaso lumínico.