M2: Encargo 1 TDH 2019 - Etapa de Especulación/ Alejandro Jiménez
| Título | M2: Encargo 1 TDH 2019 - Etapa de Especulación/ Alejandro Jiménez |
|---|---|
| Asignatura | Taller del Habitar |
| Del Curso | Taller del Habitar 2019 |
| Carreras | Diseño, Diseño Gráfico"Diseño Gráfico" is not in the list (Arquitectura, Diseño, Magíster, Otra) of allowed values for the "Carreras Relacionadas" property., Diseño Industrial"Diseño Industrial" is not in the list (Arquitectura, Diseño, Magíster, Otra) of allowed values for the "Carreras Relacionadas" property. |
| Nº | 4 |
| Alumno(s) | Alejandro Jiménez Amín |
Croquis y observaciones
- Gestualidad
-La conversación se inscribe en un vacío creado entre las personas. Las personas “bordean” el contorno creado por el vacío interior y construyen el diálogo a través de el. -No existe un plano primordial para la conversación. Estos planos son definidos por la altura de las cabezas. La variación del gesto al mirar otorga más movimiento al diálogo. -
El cuerpo logra “envolver” la conversación gracias a la gestualidad del torso, de esta manera la conversación torna una atmósfera más directa y de mayor intimidad. -Existe un constante ‘’ir y venir” en la conversación, esto involucra un ritmo de vaivén que permite el intercambio y la intervención de cada persona, como un efecto “rebote”. -
Existe una intención de frontalidad entre las dos personas para sobrellevar la conversación. Dispuesto a esto, se compromete el cuerpo para buscar la posición mejor direccionada sobre el mismo objeto, aunque esta no sea la posición sugerida.-
- Dimensión espacial
-Se realiza un recorrido puramente lineal , la vereda posee un pequeño espesor, el cual impide la movilidad y el dinamismo durante el trayecto. -Los árboles construyen una explanada lineal, que complementa el espesor de la vereda, se crea un borde sombreado y atravesable.-
La inclinación de la calle y sus acondicionamientos dictan un ritmo de pausas y reposo al caminar.
Fundamento
El diálogo entre dos o más personas se construye en un vacío espacial interior. Este vacío es creado por los mismos cuerpos que rodean dicho contorno del vacío con su gestualidad y postura, envolviendo así la oquedad naciente y logrando una mayor frontalidad e intimidad. El cuerpo se compromete a reunirse, se busca una posición y suele direccionarse con una postura sobre el mismo objeto, aunque no sea la sugerida y predispuesta por el artefacto, se moldea para lograr una atmósfera de enfrentamiento acogedor y mutuo. La aglomeración de personas posee un ritmo que dicta al diálogo. Dicho ritmo se materializa como un constante vaivén de intercambio, un “ir y venir” que le transmite un pulso específico a la conversación y le otorga un dinamismo a la escena. El sendero habitable se presenta como una configuración lineal y limitante para el tránsito a través de su espesor y su longitud. La restricción y la inclinación del horizonte provocan un ritmo de pausas sin una variación fluctuante. Igualmente, los árboles materializan un complemento sombreado para el borde atravesable, justificando un tránsito premeditado.
