La liberación individual a través de la escritura - Isidora Vargas Fuentes
| Título | Ensayo 1-2ºS 2020 |
|---|---|
| Asignatura | Presentación de las Vanguardias a la Contemporaneidad |
| Del Curso | Presentación de las Vanguardias a la Contemporaneidad 2020 - Andrés Garcés |
| Carreras | Arquitectura |
| Nº | 1 |
| Alumno(s) | Isidora Vargas |
La liberación individual a través de la escritura
La expresión del individuo a través de lo escrito
Las pre-vanguardias fueron el camino que posibilitó el origen de una época tan importante como las vanguardias. Esta puede ser ubicadas a finales del siglo XIX e inicio del siglo XX. Pero ¿qué sucedió en aquellos años para ser denominada el predecesor de las vanguardias?
Una nueva sociedad urbana aparece como consecuencia de la Revolución Industrial y la migración masiva del campo a las ciudades. La percepción del hombre como una máquina ante el trabajo industrializado da un fuerte golpe a la sociedad del siglo XIX, donde la revolución y levantamiento ante la identificación de las nuevas clases sociales revela la crueldad que antes se ocultaba bajo creencias y tradiciones que permitían un escape de esta realidad. Los avances científicos y la revelación de la realidad que se da en Europa ponen el hombre en un vacío que lo hacen replantearse lo establecido.
En este contexto, el ser humano se ve sofocado por su realidad y busca distintas formas donde poder externalizar lo que siente. Así es como una de esas expresiones fue la escritura, ya que es una forma de plasmar los pensamientos y exteriorizar las ideas, la cual comenzó a ser materializada en distintas formas como el ensayo, el periodismo y la literatura.
Manifestaciones de la escritura
A lo largo del siglo XIX, el individuo pudo manifestar su incomodidad con la realidad a través de distintas formas de escritura. El ensayo era una herramienta que se vinculaba a los problemas sociales y fue el vehículo de expresión de los debates ideológicos de la época. Especialmente la confrontación entre tradición y modernidad, condicionada por las luchas políticas. En este tipo de escritura se exponen libremente opiniones acerca de temas de interés, por lo que se centra en la perspectiva subjetiva del autor, pero siempre argumentada.
Lo acontecido en este siglo impulsa los primeros ápices del existencialismo, con pensadores como Kierkegaard y Nietzsche, los cuales plasmaban sus ideas a través de lo escrito, mediante cartas, ensayos, publicaciones o libros. Los filósofos existencialistas se centraron en el análisis de la condición humana, la libertad, la responsabilidad individual, las emociones y el significado de la vida, donde se pone duda lo tradicional. Sostenían que el pensamiento filosófico debe ser a través de experiencias subjetivas del individuo, donde lo moral y científico es insuficiente para entender la existencia humana, ya que no abarca en completitud su esencia, por lo que es necesario una nueva mirada hacia lo que acontece en el mundo, donde se deja de lado lo racional y establecido, y pasa a ser un quiebre donde lo puramente humano y auténtico toma protagonismo.
Aquí se centra el pensamiento de la creencia y creación propia, desde una perspectiva de responsabilidad individual que se aleja de cualquier sistema de creencias externo a él, haciendo una fuerte crítica a la religión, ya que, según Nietzsche, estas concepciones concebían un escape ante la vida y la realidad humana, creando refugios imaginarios que negaban lo que sucedía en la época.
“Fuera todo es agitación; el nacionalismo se desencadena por todas partes; todos hablan de sacrificar su vida y tal vez están dispuestos a hacerlo, pero con el poderoso apoyo de la opinión pública.” (Kierkegaard, 1848).[1]
En la anterior cita, puede interpretarse el concepto de “opinión pública” como el conjunto de personas que aprueban o rechazan una idea, y como el individuo se siente presionado a seguir a la masa para sobrevivir en la nueva sociedad industrializada, mientras deja de lado su individualidad y potencial propio, y por lo tanto, su propia humanidad.
Kierkegaard interpretó esta revolución social como una oportunidad para seguir en su lucha personal y hablar a cada individuo singular a través de sus discursos. Una posición totalmente vanguardista, tomando en cuenta que iba contra la corriente política y social que se esparcía en la época. Así trata de impulsar el descubrimiento del “yo” a través de la creación individual. Desde aquí se puede ver el génesis de las vanguardias, donde de a poco el individuo va formando sus propias obras sin seguir límites ni normas impuestas.
En esta época, además del propio autor, existía un público con las mismas inquietudes, al cual ya no le interesaba lo exótico y fantástico de las tendencias románticas de la época pasada, si no que buscaba una explicación a los problemas próximos y cotidianos que acontecían en la sociedad, lo cual se presentó constantemente a través del periodismo, y sobre todo, en su famosa época dorada. En ella se vio como la prensa escrita se convertía en una importante herramienta para la divulgación de información, gracias a la progresiva alfabetización de la sociedad y la posibilidad de que los obreros obtuvieran un espacio de propagación debido a la revolución industrial, que impulsó sucesos como la libertad política y religiosa, la soberanía popular, el sufragio universal y las reivindicaciones sociales, que fueron los motores que movilizaron en toda Europa a las masas de trabajadores para que participaran en los acontecimientos políticos, también fomentando su pensamiento crítico.
Así mismo, periodismo propició la difusión de la literatura, donde apareció con fuerza el género del realismo para reconstruir la forma de escribir, dejando atrás los estándares arcaicos y dejando la plena autonomía al escritor para narrar sus creaciones con libre expresión. Esto ayudaba a percibir la realidad que se ocultaba y formaba un pensamiento propio en cada una de las personas.
Sea como sea el tipo de expresión escrita, durante esta época se instalaron las bases para el origen del vanguardismo, incitando la libertad de creación, el ir contra los paradigmas establecidos y la invención de lo verdaderamente auténtico desde la singularidad de cada uno, para así encontrar un sentido a la existencia del ser humano que había perdido su individualidad y diferencia con el otro, el cual ya se había convertido en una masa que funcionaba en conjunto, pero no por separado.
Como afirmación final, se concluye que la libertad de expresión y la posibilidad de la creación de manera "solitaria", internalizandose en el propio "yo" para lograr la externalización del mismo, es primordial para el comienzo de las vanguardias, ya que le otorga la cuota de originalidad y autenticidad que se obtiene de un individuo.
Referencias
A., F. J. A. D. L. (2005). Vanguardias literarias: ¿una estética que nos sigue interpelando? Literatura y Linguística, 16. https://scielo.conicyt.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0716-58112005000100003
Lolas, E. R. (2012). NIETZSCHE Y LA CONCEPCIÓN DE LA NATURALEZA COMO CUERPO. ALPHA, 34. https://scielo.conicyt.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0718-22012012000100007
http://www.rinconcastellano.com/cont/ensayo_xix.html#
- ↑ Kierkegaard, Soren. Diario de vida,1848.
