La arquitectura como símbolo de la crisis pre-vanguardista - Diego Garmendia Fernández

De Casiopea



TítuloEnsayo 1-2°S 2022
AsignaturaPresentación de las Vanguardias a la Contemporaneidad
Del CursoPresentación de las Vanguardias a la Contemporaneidad 2022 - Andrés Garcés
CarrerasArquitectura
1
Alumno(s)Diego Garmendia

La arquitectura como símbolo de la crisis pre-vanguardista.

Introducción

Previamente a la época de las vanguardias, existe una transición fundamental en la temporalidad histórica del mundo y su civilización, esta fue el paso de la edad moderna a la edad contemporánea, la cual sigue vigente hasta la actualidad. Este gran paso, como es de suponer estuvo lleno de hitos y sucesos históricos, que abarcaron absolutamente todos los principales ámbitos de la humanidad, desencadenando grandes revueltas, transformaciones y reconfiguraciones que marcarían un antes y un después en la forma de pensar la vida y el mundo. La edad moderna se caracterizó por estar bajo el rigor de la corriente ideológica del humanismo, la cual surge en la sociedad burguesa italiana y se expande por Europa entre los siglos XV y XVI, trayendo consigo un pensamiento totalmente antropocentrista, el cual terminaría por desplazar al teocentrismo imperante de le edad media (Humanismo, 2019). La aparición de esta nueva perspectiva proponía desarrollar un pensamiento crítico, utilizando la razón y la experiencia, para el cuestionamiento del mismo ser humano y los sucesos que acontecían en el mundo (Humanismo, 2019). Dando origen así a grandes rebeliones en contra de la desigualdad social tan evidente que imperaba desde la edad media y que se considera como uno de los grandes factores que dieron origen a las vanguardias del siglo XX (Ramírez, 2016). Bajo esta primicia, el siguiente trabajo se cuestionará, si la arquitectura de la época fue un factor visible que acrecentó las desigualdades sociales, ayudando así a colmar el vaso de paciencia de la sociedad marginada y por consecuencia dar origen a las vanguardias. Para aquello, a continuación, se desarrollará el rol y simbolización que se adjudicaba, por ejemplo, el palacio de Versalles en la revolución francesa; contrastándose a la vez con las condiciones de vida y laborales que otorgaban las fábricas e industrias de la revolución industrial, entre otros aspectos.

Las fabricas en la revolución industrial

(Bonhomme, 1848)

Para comenzar, cabe recalcar que, si bien es cierto, la revolución industrial da comienzo en el año 1760, igualmente es contemporánea a la revolución francesa (1789-1799), ya que su término se define en el año 1840. Es sumamente importante conocer la simultaneidad que existió entre estos dos hitos considerados absolutamente fundamentales en la historia de la humanidad, ya que de esta manera se puede comparar y contrastar acordemente las condiciones de vida para los distintos sectores sociales y territorios de la época. Como se señaló en el párrafo anterior, a mediados del siglo XVIII daba comienzo en Gran Bretaña la revolución industrial, proceso el cual marca claramente un hito en la civilización mundial, ya que fue la responsable del paso de una economía agraria a una economía liderada por la industria, en la que la producción de bienes se realizaba de manera mecanizada (La Revolución Industrial ¿Fue tan importante?, 2020). A la par de esta gran transformación surge también el capitalismo, sistema económico que prevalece mayoritariamente hasta la actualidad y que, en aquellos años, empezaría a imponer sus convicciones y prioridades ante la sociedad. Sin embargo, nada de esto hubiese sido posible sin la llegada de las máquinas, el sistema fabril y por supuesto las fábricas. Precisamente son estas últimas la principal representación arquitectónica de la revolución industrial, caracterizadas por ser espacios techados de gran tamaño, donde se instalaban todas las maquinas, herramientas y materia prima necesarias para la producción a gran escala de algún elemento en específico (Baldo Lacomba, 1998). Sin embargo, estas edificaciones, fueron sinónimo de miseria y explotación, ya que las condiciones laborales e incluso de vida que podían llegar a otorgar eran mínimas; la ventilación y la higiene eran totalmente inexistentes, los trabajadores se encontraban hacinados a pesar del gran espacio que solían disponer ya que se amontonaban junto a maquinas mal instaladas, todo este panorama provocaba todo tipo de accidentes y malos hábitos, desde explosiones, inhalación de sustancias tóxicas, amputaciones, oscuridad, calor y suciedad extrema, lo cual, por consecuencia derivaba recurrentemente en diversas enfermedades, convirtiéndose así el trabajo en una tarea imposible que a pesar de todo lo anterior se llevaba a cabo sin criterio alguno (Nexogestion, 2016). Tras esto, inevitablemente, la vida y el trabajo comenzaron a ser un solo ámbito, la migración del campo a la ciudad era cada vez mayor, ocasionando inevitablemente un crecimiento exponencial de las ciudades entorno a las fábricas, creándose así los primeros barrios obreros, los cuales no se encontraban preparados para cubrir las necesidades de las personas, quienes tuvieron que verse resignados a aceptar tal calidad de vida para sobrevivir (Del, s/f). Mientras lo anterior sucedía con el proletariado, la burguesía liberal simultáneamente vivía una realidad totalmente distinta, la cual reflejaba su éxito y poder con lujosos palacetes edificados en amplias y ajardinadas zonas residenciales (Baldo Lacomba, 1998), que además mejoraban progresivamente toda su infraestructura (alcantarillado, pavimentado, luz eléctrica, agua potable, etc). El gran ejemplo de aquello fue la reforma urbanística del barón Haussmann en París, Francia; donde se crearon amplias avenidas, boulevares y galerías (Baldo Lacomba, 1998). Resaltando de esta forma la gran brecha social que ofrecía la arquitectura de la época según el sector al que se disponía.

Simbolismo arquitectónico en la revolución francesa

(Rigaud, 1794)

Como se señalo previamente, a la par de toda esta transformación industrial que vivía el mundo europeo, en Francia se desataba una gran crisis social, institucional y económica, producto de la gran influencia que empezaba a cobrar el humanismo (Humanismo, 2021). Paris y todo el territorio francés se encontraba gobernado bajo un régimen absolutista y dividido radicalmente en tres clases sociales, llamadas “estados”, donde claramente los principales favorecidos eran el clero y la nobleza quienes se excusaban de todo tipo de impuestos, relevando esta responsabilidad exclusivamente al tercer estado, compuesto en su mayoría por campesinos, artesanos y burgueses (Pigna, 2018). A este contexto totalmente desigual, se le suma para colmo, un mal periodo de cosechas, ocasionado por grandes heladas y sequías, que provocaron problemas de abastecimiento en el país, el cual poco a poco empezaba a caer inevitablemente en una gran crisis (Cabia, 2020). Sin embargo, aquella problemática, parecía solo perjudicar al sector marginal de la población, es decir, al tercer estado, ya que el primer y segundo estado mantenían sus privilegios, despilfarrando sin criterio alguno sus riquezas. En una primera etapa, el 5 de mayo de 1789 se convoca a los estados generales en el palacio de Versalles, con el fin de encontrar solución a la crisis emergente. Ante esto, se empieza a gestar un proceso constituyente, con la creación de la asamblea nacional que en un principio representaría a los tres estados generales del país, sin embargo, el rey Luis XVI vetaría el ingreso a la sala de reuniones en Versalles al tercer estado y además ordenaría la persecución de estos ante supuestos movimientos revolucionarios en su contra. Finalmente, la revolución se concretaría con la toma de la bastilla (antigua cárcel real) la cual fue totalmente arrasada por el pueblo parisino el 14 de julio de 1789, despojando de esta manera simbólica el poder absoluto de la monarquía (Pigna, 2018). Sin embargo, este no fue el único ataque a edificaciones relacionadas con la realeza, ya que unos meses después, el 5 y 6 de octubre de 1789, nuevamente, una muchedumbre de aproximadamente seis mil personas, liderados por la marcha de las mujeres, asaltarían por completo el palacio de Versalles, que en aquel entonces era la residencia real. El odio y la sensación de injusticia incentivó este hecho, que obligó inmediatamente al escape de Luis XVI y su familia real hacia el palacio de las Tullirías, ubicado en la capital. Nuevamente la toma de una edificación, la cual significaba una representación arquitectónica evidente del poderío y lujo de unos pocos, iba a simbolizar el despojo absoluto de la poca autoridad que le restaba al rey. Tanto fue así, que este hito se considera como el fin de la monarquía absoluta en Francia y da paso a la monarquía constitucional (Mark, 2022). En cuestión, los palacios eran grandes y lujosas edificaciones pertenecientes y dispuestas exclusivamente a la nobleza y reflejaban su ostentosidad, provocando en el pueblo francés un gran sentimiento de ira ante tal brecha cualitativa que existía en la vida de unos y de otros. Esta es la razón por la cual se desencadenan tomas y asaltos en contra de figuras tan representativas de la arquitectura elitista de la época.

Conclusión.

(Ricciarini, s/f)

Presentados todos estos hechos tan relevantes para la historia de la humanidad y su contexto actual, es que finalmente se logra afirmar como un factor crucial la influencia directa e indirecta que propició la arquitectura en términos de acrecentar la emergente sensación de desigualdad, injusticia y crisis social que caracterizó la transición entre la edad moderna (fin de la revolución francesa, 1799) y la edad contemporánea. Las fábricas y barrios obreros de la revolución industrial o los palacios y fortalezas de la realeza francesa, de cierto modo, fueron un símbolo de toda la problemática social, bajo el cual la población más vulnerable logró escudarse y contrastar sus condiciones de vida, desatando así las grandes revueltas que más adelante desembocarían, con la incidencia de nuevas revoluciones y grandes guerras a comienzos del siglo XX, en los movimientos vanguardistas, quienes buscarían dejar atrás todos los parámetros ya existentes y revelar todo tipo de expresión con total libertad.

Referencias

  • 1. (Baldo Lacomba, 1998)

Baldo Lacomba, M. (1998). La revolución industrial. síntesis Editorial.

  • 2. (Bonhomme, 1848)

Bonhomme, I. F. (1848). Factories at Le Creusot in 1848, 1855. https://www.bridgemanimages.com/en/bonhomme/factories-at-le-creusot-in-1848-1855-oil-on-paper-detail-see-164036/oil-on-paper/asset/157311}

  • 3. (Cabia, 2020)

Cabia, D. L. (2020, abril 15). Revolución francesa. Economipedia. https://economipedia.com/definiciones/historia/revolucion-francesa.html

  • 4. (Del, s/f)

Del, S. (s/f). La revolución industrial. La era de las máquinas. Juntadeandalucia.es.

  • 5. (Humanismo, 2019)

Humanismo. (2019, agosto 30). Enciclopedia de Historia. https://enciclopediadehistoria.com/humanismo/

  • 6. (Humanismo, 2021)

Humanismo. (2021, enero 18). Características. https://www.caracteristicas.co/humanismo/

  • 7. (La Revolución Industrial ¿Fue tan importante?, 2020)

La Revolución Industrial ¿Fue tan importante? (2020, junio 15). Eurotransis - Industria metalmecánica; Eurotransis. https://eurotransis.com/la-revolucion-industrial-fue-tan-importante/

  • 8. (Mark, 2022)

Mark, H. W. (2022). Marcha de las mujeres a Versalles. Enciclopedia de la Historia del Mundo. https://www.worldhistory.org/trans/es/1-20893/marcha-de-las-mujeres-a-versalles/

  • 9. (Nexogestion, 2016)

Nexogestion, P. (2016, enero 19). La Revolución Industrial y la prevención de riesgos laborales. El Blog de Nexo Gestión. https://nexogestion.wordpress.com/2016/01/19/la-revolucion-industrial-y-la-prevencion-de-riesgos-laborales/

  • 10. (Objetivo de las vanguardias, 2015)

Objetivo de las vanguardias. (2015, diciembre 20). Wikiteka.com. https://www.wikiteka.com/apuntes/objetivo-vanguardias/

  • 11. (Pigna, 2018)

Pigna, F. (2018, febrero 6). La Revolución Francesa I. El Historiador. https://www.elhistoriador.com.ar/la-revolucion-francesa-i/

  • 12. (Ricciarini, s/f)

Ricciarini, L. (s/f). March of the Women on Versailles, Paris, 5th October 1789. https://www.bridgemanimages.com/en/french-school/march-of-the-women-on-versailles-paris-5th-october-1789-engraving/nomedium/asset/4675432

  • (Rigaud, 1794)

Rigaud, J. (1794). View of the Palace of Versailles, 1794. https://www.bridgemanimages.com/en/rigaud/view-of-the-palace-of-versailles-1794-colour-engraving/colour-engraving/asset/415724