El cuerpo emerge para sumergirse, asomo visual que invierte la posición. Virtud del asomo.
La Observación de la Semana
Dibujo de complacencia. Una moto sobre un balde en un taller desordenado. Mientras voy dibujando caigo en la cuenta de dos miradas: la primera directa que mide y penetra, la segunda que lee y articula lo dibujado. Entre ellas no calzan. La mirada que avanza tejiendo con el trazo del lápiz, la mirada que mide y compara en un nuevo punto de vista abstracto en la hoja de papel. El dibujo se cristaliza entre las grietas de ese descalce.
"En el café un acto en-común es el enrostrarse —más allá del enfrentarse. Allí rostros llenan no sólo las mesas sino el salón"
Desde Cerro Castillo hacia Von Schroeder. <La fachada que guarda un interior representado hacia la calle, lo demora cuidando de él. Por el dorso, gracias a la pendiente, la exposición es tridimensional y aparece entonces lo que es pura presencia, la ropa tendida, que no demora lo íntimo más bien lo arroja.>
El pie llega en punta, fija al cuerpo entero en un punto y ajusta el peso hacia el apoyo de la espalda, la punta del pie detiene una relación del cuerpo con el tiempo.