Forma orgánica
Observación de distintos frutos para dilucidar el estudio de la forma orgánica.
Zanahoria
Imagen 1 - Lo semicortes que lo envuelven transversalmente le dan un aspecto áspero y de consistencia firme.
Imagen 2 - El corte muestra una serie de redondelas de distintos tamaños que nacen desde el centro.
Tomate
Imagen 3 - La textura lisa refleja los pliegues voluminosos que convergen en un centro.
Imagen 4 - Se deja entrever un interior más líquido contenido por un espesor blando.
Imagen 5 - El corte muestra la continuidad esférica del patrón interior.
Limón
Imagen 6 - El fruto muestra homogeneidad en la redondez de su forma y la textura porosa que lo envuelve.
Imagen 7 - Los gajos son contenidos por un interior que converge en un mismo centro.
Plátano
Imagen 8 - Conjunto que nace de un mismo punto. El mismo fruto se repite con variaciones mínimas de tamaño y forma.
Imagen 9 - Los pliegues alargados muestran continuidad en la unión de dos términos.
Imagen 10 - El corte revela la distinción entre cáscara e interior, pero siguiendo su forma exterior. Interior blando sigue la forma del molde.
Imagen 11 - Sección longitunidal revela que el patrón de la sección transversal se extiende a lo largo del fruto.
Palta
Imagen 12 - Exterior poroso y uniforme, se sostiene en su parte más voluminosa.
Imagen 13 - El interior contiene un espesor blando que rodea el cuesco duro y lo mantiene en su centro, adaptándose a su forma.
Imagen 14 - Su centro cóncavo y la forma del fruto se mantiene a pesar del corte. Firmeza.
Zapallo italiano
Imagen 15 - Textura con pliegues que recorren lo ovalado y alargado del fruto hasta converger en un extremo.
Imagen 16 - El corte revela un patrón formado en función de un centro.
Imagen 17 - El interior muestra una línea que cruza el fruto longitudinalmente y revela una simetría imperfecta.
Imagen 18 - Sección longitudinal muestra un patrón que se replica en el corte de ambos trozos. Su forma se mantiene por su consistencia firme.
Síntesis
Formas redondas, líneas extensas y delicadas, texturas porosas o lisas, muestran la continuidad del fruto de manera irregular. Todos poseen un extremo o centro donde lo demás se forma en función de este. Poseen una capa exterior que los contiene y un interior a veces duro, a veces blando, pero que revelan una simetría imperfecta que se replica en cada corte. Los cortes muestran la resistencia y firmeza de los frutos, los cuales no pierden su forma y son capaces de mantenerla por sí mismos.
