Injerencia escultórica en la arquitectura de la primera mitad del siglo XX - Karime Hasbún Lara

De Casiopea



TítuloEnsayo 2-2ºS 2021
AsignaturaPresentación de las Vanguardias a la Contemporaneidad
Del CursoPresentación de las Vanguardias a la Contemporaneidad 2021 - Andrés Garcés
CarrerasArquitectura
3
Alumno(s)Karime Hasbún Lara

Injerencia escultórica en la arquitectura de la primera mitad del siglo XX

Abstract

El proceso de industrialización se vio reflejado tanto en los cambios de la sociedad como en mejoras técnicas de las obras arquitectónicas: el uso del ladrillo, la piedra o la madera, se mantuvieron, pero estos materiales tradicionales comenzaron a ser utilizados de forma más personal y libre por los arquitectos. Los primeros artistas del periodo de Vanguardias concretaron actitudes frente a los movimientos basados en el nuevo papel social que debían cumplir como miembros de una sociedad cada vez más libre y moderna. Los artistas transformaron sus diseños de edificios en completas obras de arte que convirtieron en verdaderas esculturas arquitectónicas en su exterior e interior, buscando convertir las estructuras en verdaderos reflejos de la vida y pensamiento de cada uno. En este ensayo se determinará el cómo la escultura del periodo de las vanguardias interfiere en la arquitectura de la primera mitad del siglo XX. Palabras clave: escultura, arquitectura, transformación, identidad.

Introducción

La industrialización está vinculada a distintos avances técnicos, económicos y cambios sociales. Debido al aumento de la producción industrial y a la sobreexplotación de terrenos por parte de los propietarios, los habitantes vivían en condiciones de alojamiento insuficientes y a menudo poco higiénicas. La reacción a estas míseras condiciones de vida se denominó en un comienzo retorno a la naturaleza y la reforma de la vida se convirtió en un tema en boga en las conversaciones de todos los obreros e incluso de miembros de los sectores sociales dominantes que se sintieron superados por el surgimiento de la ciudad moderna. Debido al surgimiento de estas nuevas ciudades en las cuales el movimiento y flujo de personas era dinámico y a la construcción de nuevas infraestructuras públicas aumentó considerablemente gracias a la expansión, nacieron nuevos movimientos que buscaban conducir a la población a una era totalmente nueva con personas completamente nuevas.

El pensador, Auguste Rodin

A fines del siglo XIX, la escultura dio un giro radical en el cual las propuestas rupturistas abandonaron la imitación clásica de la naturaleza y el heroísmo para centrarse en el lenguaje de las formas y colores. Auguste Rodin fue un escultor francés considerado el padre de la escultura moderna debido a que fue precursor en la aplicación de los principios impresionistas a la escultura; sin embargo, la ruptura definitiva de las pautas de la Academia fue el Cubismo, movimiento que se caracteriza por buscar crear un nuevo lenguaje expresivo, una nueva imagen propia por parte de los artistas.

Desarrollo

Las características que definen a la escultura durante el siglo XX son principalmente el desprendimiento de la omnipresencia de la figura humana, debido a que predomina la abstracción, el espacio y el movimiento. El lenguaje de la escultura se vuelve expresionista debido a que se exacerba la visión de sentimientos del artista desde el espectador. Además de lo anterior, los artistas se interesaron en las innovaciones plásticas basadas en masa, deformación y las capacidades elásticas que presentaban los materiales. Los movimientos artísticos nacidos en el periodo de Vanguardias son al menos diez; sin embargo, en el ámbito de la escultura están bien definidos. El expresionismo trató de reflejar la soledad y la angustia del hombre del mundo moderno. El cubismo fue un movimiento que utilizó las formas de la naturaleza a través de figuras geométricas fragmentadas; así, se simplificaron los volúmenes para representar todas las partes de un objeto en un mismo plano y, por ende, se conceptualizó la forma y la composición. El dadaísmo era un modo de vida en el cual se creó el anti arte, es decir, una provocación al orden establecido. El surrealismo fue el movimiento que le atribuyó a los objetos el papel de generar sentidos en el espectador. El futurismo buscó romper con la tradición, el pasado y la convencionalidad del historicismo: sus dos temas principales fueron el movimiento y la industrialización. Por último, el constructivismo es el arte interpretado como un mecanismo de transmisión de ideologías, para poder ayudar en la evolución de la sociedad. La arquitectura de comienzos del siglo XX buscó dar pie a la creatividad y la experimentación de los arquitectos e ingenieros de la época, de modo que estos transformaran una obra de arquitectura en un reflejo del artista –quienes veían su obra como una escultura total. El conocimiento de la naturaleza fue uno de los principales temas trabajados por los artistas en ese entonces, quienes buscaban un escape al historicismo usando en su mayoría formas orgánicas. En España, el uso de estas formas se denominó modernismo, mientras que en Alemania lo definieron como Jugendstil, que hace alusión a la juventud y la novedad del pensamiento. En Suiza fue definido como Sezessionsstil porque trataba de una especie de ruptura en el concepto de arte y en Francia y Bélgica fue definido como Art Nouveau, concepto que se mantiene presente hasta el día de hoy.

Casa Tassel

El modernismo se caracteriza por la individualización del trabajo del artista y la expresión de su personalidad. Uno de los mejores ejemplos es Antonio Gaudí, quien está dentro de los pilares fundamentales del movimiento. Gaudí veía la obra como una escultura arquitectónica en la cual se descomponía el espacio interior y exterior para transformarlo en una obra de arte total. La arquitectura de esta época logró recuperar una dinámica que se reconocería hasta el presente por ser una tendencia a la fluidez, el movimiento, la gracilidad y la ligereza de sus obras. Como se mencionó anteriormente, los materiales no debían forzarse, sino que debía regir su naturaleza para lograr los efectos esperados por el artista. Uno de los materiales utilizados tanto en la escultura como en la arquitectura fue el hierro, debido a que las líneas fluidas se podían obtener de mejor forma por la naturaleza del material. El hierro se utilizó en el diseño tanto en la estructura constructiva del edificio que se dejaba a la vista como en el diseño de interiores y la decoración. Ejemplo de esto es la Casa Tassel, una de las primeras viviendas modernistas de Europa. Existieron algunos edificios con influencia cubista que presentaban cerramientos abovedados que permitían que las estructuras gozaran de cierto grado de abstracción y también algunos en los que sus formas prismáticas y la interrupción de los acristalamientos crean efectos ópticos de descomposición al caer el sol como lo es la Casa de la Madona Negra en Praga. Peter Behrens fue uno de los más destacados representantes de la idea de artista universal. Se convirtió en el pionero del concepto de identidad de empresa: diseñó desde el logo hasta los edificios de fabricación de la compañía eléctrica alemana AEG. Discípulos de Behrens fueron Ludwig Mies van der Rohe y Le Corbusier, quienes trabajaron y aprendieron en su oficina en 1910 y se convirtieron en los dos arquitectos más importantes del siglo XX. En 1914, Sant’Elia, arquitecto de origen italiano, publicó el Manifiesto futurista junto a Marinetti. En este se tematizaba la velocidad, el peligro y la violencia de la era industrial y en nombre del futurismo se dedicaron principalmente a las construcciones útiles, a la técnica y a la comunicación surgidas luego de la Revolución Industrial. Sant’Elia presentó La città nouva, una ciudad pensada para grandes aglomeraciones de gente en la cual el dinamismo fuera el objetivo de la creación y los edificios transitorios y efímeros fueran el fiel reflejo de la vida y sociedad moderna.

Casa de la Madona Negra

Por otro lado, en Rusia, el constructivismo se convirtió en el movimiento artístico dominante. Lo que tenía este movimiento en común con el futurismo era el entusiasmo generado por las aparentes posibilidades ilimitadas que ofrecían las nuevas técnicas arquitectónicas. En este movimiento, también influyó el cubismo y el suprematismo de Kasimir Malevitch, quien buscó superar la superficial del pensamiento espacial de la pintura y desarrollar el arte de la configuración espacial y constructiva. Uno de los proyectos más importantes del constructivismo es el Monumento a la III Internacional, que es una escultura arquitectónica móvil que debía servir como edificio de trabajo para el organismo comunista mundial.


Conclusión

Los movimientos que dieron origen a las esculturas del periodo de las Vanguardias están estrechamente relacionados con la creación de obras por parte de los arquitectos de la época. El concepto de arte total por parte de los arquitectos logró que sus obras se transformaran en esculturas que reflejaban aquello que su identidad permitía. Los edificios se volvieron el reflejo de la sociedad moderna y la visión del espectador se veía trabajada según los principios de un nuevo lenguaje expresivo.

Bibliografía

Gympel, J. (2005) Historia de la arquitectura, de la antigüedad a nuestros días. Barcelona: Tandem Verlag GmbH

https://www.um.es/documents/3239701/10301477/vanguardias.pdf/6e9cf8df-2ee3-410d-9055-d258b46f1ad7}

https://profeanacob.wordpress.com/2017/02/02/la-escultura-vanguardista-del-siglo-xx/

https://masdearte.com/especiales/arquitectura-de-vanguardia-construir-para-una-generacion/