Encargo 2: La ciudad amparada

De Casiopea



TítuloEncargo 2: La ciudad amparada
AsignaturaPresentación 2ºB ARQ 2015
Del Curso2ºB ARQ 2015
CarrerasArquitectura
2
Alumno(s)Enrique Rivadeneira Barrios

Encargo 2: La ciudad amparada

Anteriormente ya se había mencionado el carácter comercial que dio origen a las primeras ciudades medievales, y el que subsistió como la razón de ser de la ciudad. La aparición del trabajo artesanal encontró su lugar en el taller urbano, y dio origen a todo un ordenamiento social. Por un lado, en la organización de artesanos en gremios (a gran escala), y por otro lado, por la vida en talleres (a menor escala o unidades). Así, la ciudad se componía principalmente de hombres de oficio, que ofrecían sus productos por toda la urbe. De ahí también su densidad. Y en ese contexto irrumpe una holgura que pareciera ser casi excéntrica a él; la Catedral. El enorme empeño puesto en la construcción de las catedrales pareciera hablar, por una parte, de la consabida relevancia de la Iglesia, y lo religioso, para la sociedad. Esto es apreciable en el mero contraste entre el desorden urbano y el gran orden, cuidado y proporción encerrado en la Catedral. Es tanta la relevancia que es casi como si se pudieran distinguir las ciudades por las agujas de sus catedrales. Pero también pareciera que este avistamiento es una resultante de otro significado, más profundo, de la catedral para la ciudad. Esto pensando que el magno volumen daba cabida a todos los habitantes, pero también son los que deciden construir un espacio que alberga una lógica completamente diferente a la de la ciudad en la que vivían. La catedral plante una pausa y una contemplación en un contexto estrecho, en el que el imperativo es el intercambio y una especie de meta-movimiento. En ese sentido, la catedral era un lugar de refugio, un amparo para la ciudad, y de ahí su relevancia. A propósito de esto, Arthur B. Gallion señala que "... la posición destacada que ocupaba la catedral, (...) le dio singular unidad a la ciudad, unidad que se vio reforzada por el anillo formado por las fortificaciones"(6) Arthur B. Gallion, Urbanismo, planificación y diseño. Pag 56-58.

En la lejanía, la catedral es el centro indiscutido de la ciudad, casi como si estuviese siendo dibujada de lejos. Y también pareciera que dicho tamaño señala el camino para llegar a ella.
El pórtico no termina allí, sino que se interna en la ciudad, en una holgura provisoria para el acceder. La puerta de la ciudad controlaba la mercancía que entrara y saliera de la ciudad, y recibía al peregrino en su camino.
: A pesar del asombroso volumen que posee la catedral, la plaza evidencia lo construido de éste en relación al cuerpo. Dicho tamaño alberga -en la plaza-, al igual que el interior la catedral es tan imponente como la población de la ciudad, la que le da su medida.
A pesar de lo brusco de la aparición de la catedral, ésta siempre tiene una holgura que permite contemplarla, de manera que se tiene la catedral sin poder verla por completo.
La gran densidad de la ciudad es sólo comparable con la gran altura y tamaño de la catedral. Incluso parecieran relacionarse, tanto en el realce del tamaño por lo denso del contexto, como en una proporcionalidad directa entre el tamaño del edificio, y la densidad de la ciudad.
: El edificio se mezcla y se contracta en sus proporciones.