El Teatro de Delfos como un todo único de extensión Divina, Natural y Humana - Josefa Herreros Cárdenas

De Casiopea



TítuloEnsayo 1-2ºS 2021
AsignaturaTaller del Programa y Forma de la Edificación
Del CursoTaller del Programa y Forma de la Edificación 2º Semestre 2021
CarrerasArquitectura
8
Alumno(s)Josefa Herreros Cárdenas

El Teatro de Delfos como un todo único de extensión Divina, Natural y Humana

Resumen

En el presente ensayo, el teatro Griego de Delfos se considerará como un espacio articulador que le da cabida a la extensión a través de tres aspectos fundamentales para su obra: lo divino, lo natural y lo humano. Analizando el postulado desde el origen de este teatro para y en representación de lo divino a través de lo natural y cómo estos aspectos se interrelacionan y se los lleva a un plano enlazado para conformar sus espacios y obras teatrales. Todo lo anterior se orienta para develar la encrucijada del espacio escénico proyectándose en un espacio-tiempo determinado del universo teatral.

Desde esto, la investigación se divide en dos partes principales: la primera, dedicada al origen del Teatro y su nexo con lo sagrado; y la segunda, designada para analizar cómo este espacio constituía la red de relaciones que surgen de este origen, generando un total en extensión.

Palabras clave: Extensión, Origen teatral, Espacio articulador, Cuerpo comunicador.

Introducción

Desde los precedentes históricos, Grecia se posiciona como el lugar donde surge el teatro en el mundo, esto marca significativamente la configuración del Teatro de Delfos, ya que al ser uno de los primeros del mundo, se sitúa en un origen del ser del teatro. Ello lleva a distanciarse hacia un contexto completamente diferente, en el cual obliga a hacerse preguntas sobre qué cualidades y rasgos eran incidentes para conformar a Delfos como espacio de representación. Entendiendo estos no como aspectos polarizados o dicotómicos, sino que se cruzan entre sí y se les da forma para hacer una envolvente completa y lograr proyectar una obra que haga sentido al la/al espectador/a.

Por consiguiente, en este escrito, el Teatro de Delfos se considera como un espacio microcósmico que simboliza la conexión que existe con el cosmos que rodea la cultura teatral helena de los siglos IV y III [1], ya que este espacio escénico, como se demostrará, era considerado un cuerpo que congregaba y desde ello comunicaba a través de su red de conexiones unificadas. El Teatro de Delfos tensaba la relación humana/o-deidad-naturaleza llevándolo a su arquitectura y representaciones. Como dice Roche (2017): “Para los griegos, la búsqueda del orden social y cultural estuvo siempre asociada a la de la unidad, que se manifiesta tanto en el mundo natural como en el divino y en el humano” (p.523).

Así pues, el ensayo se configura en dos apartados:

Primero, El origen y representación de lo sagrado; que se subdivide en: El origen del Teatro de Delfos manifiesta la presencia de Diosas/es en la realidad helena y La naturaleza como expresión de lo sagrado.

Segundo, La extensión de lo divino, natural y humano; que se subdivide en: Espacio escénico teatral de Delfos como un microcosmos comunicacional.

Fig.1 Polígono de Relaciones Teatro de Delfos. Fuente: Elaboración propia.



El origen y representación de lo sagrado

El origen del Teatro de Delfos manifiesta la presencia de Diosas/es en la realidad helena

Fig.2 Gea, Diosa Madre Tierra, deidad original a la cual fue atribuído el Teatro de Delfos. Fuente: Dibujo de elaboración propia adaptado desde Feuerbach, A. F. (1875). Gea (Fresco del techo de la Academia de Bellas Artes de Viena).

El nacimiento de Delfos se posiciona en una condición mitológica en la cual se le otorga su pertenencia a Gea (Pausanias, 180) [2], Diosa primigenia que personifica a la Madre Tierra y de la cual nacen las/os otras/os Diosas/es de la mitología griega, para que luego, fruto de actividades belicosas entre las deidades, Apolo se apoderase del templo oracular de Gea y con ello la espacialidad escénica que le rodea [3]. Aquello se sustenta desde la etimología del nombre ‘Delfos’ (para las/os griegas/os ΔEΛΦՕI) que se relaciona con la palabra δελφος que significa matriz, útero; lo que enlaza al lugar con los mitos de la gran Diosa Madre Gea y su descendencia (Rodríguez, 2006), ya que desde ella emergen todas las deidades. Desde esta perspectiva, es interesante recalcar que desde las épocas helenas, en las sociedades ya sedentarias, la maternidad se convierte en una función sagrada, en la que mediante las/os hijas/os se genera una permanencia en el suelo que realiza una unidad cuya identidad persiste a través del tiempo (Beauvoir, 1949), por lo que el atribuirle el nombre a una matriz creadora, ya tiene una connotación mística en la cual se manifiesta la presencia de lo sobrenatural.


Como sostiene Simone de Beauvoir, aquí es cuando las Diosas hacen su aparición en la cultura mítico-religiosa:

Entonces aparecen las divinidades femeninas, a través de las cuales se adora la idea de la fecundidad. (...) Se manifiesta en las montañas, bosques, en el mar, en los manantiales. Crea la vida por doquier; si mata, también resucita, como la naturaleza misma (...), y entre los griegos es Gea, Rhea o Cibeles (Beauvoir, 1949, p.77)

Después de pertenecer a Gea, a través de otras múltiples historias que vinculan a sus hijas/os y conflictos entre estas/os, como la muerte de una de sus hijas, la serpiente Pitón, custodiadora del templo y enemiga de Leto, madre de Apolo, Dios quien mata a la serpiente y exige el oráculo para sí; desde entonces se conoce como Apolo Pitio y funda los juegos Píticos para celebrar su victoria (Cartwright, 2021).

Con lo antedicho, se puede observar que el surgimiento del Teatro de Delfos tiene una estrecha relación con las divinidades, las cuales desde el contexto histórico-cultural, tanto nombrando al espacio desde lo que simboliza, como la historia que se le atribuye y las representaciones de ésta en nombre de las deidades, revela el manifiesto de Diosas/es en el plano de lo que la/el humana/o habita, ligándose a un propósito teatral.


Fig.3 Mapa de la ubicación del Teatro de Delfos en relación a su entorno. Fuente: Elaboración propia adaptado de Garcés, A. (2019) La Ciudad Teatro (Mapa de p. 19)
Fig.4 Dibujo del Teatro de Delfos hacia la orchestra, orientada al Este, Guión 01. Fuente: Elaboración Propia





















La naturaleza como expresión de lo sagrado

Fig. 5 Plano de emplazamiento del Témenos de Apolo. Fuente: Elaboración Propia adaptado de Boccard, E. B. (1936, 1 enero). Recherches sur quelques monuments archaiques et leur décor sculpté.


Se declara entonces, que el Teatro de Delfos es un témenos de Apolo con su origen en Gea (la matriz, el útero); esta condición del espacio se vería reafirmada con el emplazamiento que tenía en el lugar y que, como ya se venía mencionando en el primer subapartado, genera un vínculo con la naturaleza y por consiguiente con las deidades. Como Cristina Aldana sugiere, “la sacralidad de toda la zona se remontaba a épocas antiquísimas, y es dada por su excelente ubicación natural” (Aldana, 1997, p.7), en el monte Parnaso, lejos de la ciudad, que contribuyó a exaltar el significado religioso del lugar al ofrecer a las/os espectadoras/es una vista panorámica de los alrededores, vinculando la lejanía poblada de olivos con el espacio escénico (Martin, 1989).


Ciertamente, el Teatro en Grecia, como forma de representación de lo divino, estuvo comúnmente asociado a lugares sagrados o de restauración del cuerpo o del espíritu, como lo eran las termas y santuarios que se ubicaban lejos de las ciudades. (Garcés, 2019, p.20)

Con esta afirmación, no es de extrañar que las/os helenas/os buscaban lo extraordinario en la disposición del Teatro de Delfos para que, al ser un teatro aberturado, el fondo de escena constituyese uno pleno de sentido, ¿cuál era el sentido de aquel fondo? Lo sacro de la naturaleza, omnipresente y fértil [4] que se abría camino en la quietud de la lejanía para establecerse tras las obras realizadas en la orchestra [5] y que llegase desde la percepción sensorial de quienes espectaban en el Koilon o Cavea [6] como si fuesen sus Diosas/es quienes las/os rodean, desde aquí surge otra interrogante ¿cómo la naturaleza llega a constituirse como la representación de lo sagrado? Esa pregunta está algo respondida desde la concepción observada en el primer subapartado, pero se le añade que la/el humana/o es parte de la naturaleza misma y por ello sí misma/o se traduce como parte del orden de lo sagrado.

Fig. 6 Partes del Teatro de Delfos, Grecia. 1. Koilón o Cavea 2. Parodoi 3. Orchestra 4. Proskenion 5. Skene. Guión 01. Fuente: Elaboración Propia adaptado de Garcés, A. (2019) La Ciudad Teatro (p.38)





Acá es donde aclara Hadot en su ensayo sobre la naturaleza de 1992, vinculado al cuerpo humano observa:

Al respecto, no es gratuito que, según los helenos, el cuerpo humano posea algo de sagrado, puesto que, a través de su belleza, se trasluce la cháris –la gracia–, una especie de divinidad que es valorada como algo opuesto a la dimensión monstruosa y caótica y como un elemento civilizador que define el ideal de sencillez y de elegancia. Pero, a la vez, el cuerpo humano es phýsis porque sigue el ritmo de los días, de las estaciones y de los años y porque está unido al tiempo de la vida que surge, que crece y que desaparece. (Hadot, 1992, p.40)




Con ello se establece una dualidad en la/el humana/o, donde esta/e es parte y representación de la naturaleza y de lo sobrenatural, por lo que construirá en la primera proyectándose en lo segundo para que se logren conexionar y representar entre sí [7]. Por lo tanto, cuando las/os griegas/os fundan el Teatro de Delfos entre los grandes paredones rocosos que bajan hacia un centro abierto hacia el Este [8] no era impensado, sino que sabían que con aquella orientación y en aquel lugar obtendrían un nexo singular, serían acogidos por las montañas (encarnación de sus deidades) refugiadas/os de la vida urbana para estar ante la obra en desarrollo y su fondo, plenos de deidades representadas, personificadas y omnipresentes. La naturaleza, siendo lo humano parte de esta, se establece como una arista más de lo sacro y se observa presente dentro del desarrollo de este Teatro.

La extensión de lo divino, natural y humano

Espacio Teatral de Delfos como un microcosmos comunicacional

La relación que se establecía entre las/os espectadoras/es, las/os actrices/actores, el fondo de escena (lo natural) y las deidades en la antigua Grecia generaba un diálogo implícito sostenido en su civilización y con ello su concepción del mundo; además el teatro de Delfos, siendo el ombligo de este mundo ya mencionado [9], conllevaba ser un espacio comunicacional panorámico a escala ecuménica, debido a ser un centro que congregaba y tenía gran trascendencia.

Como hace mención Andrés Garcés:

Fig. 6 La extensión del Teatro Griego a través de sus componentes. Fuente: Elaboración propia adaptada en base a dibujo de Garcés, A. (2019) La Ciudad Teatro (p. 25)

Para los griegos, el acto de asistir al teatro conformaba y significaba un acto espiritual de completitud entre la idea que tenían de lo divino y la representación que hacían de ello, para lo cual desplegaban toda una organización de actos que conducían a la construcción de una gran fiesta en torno a los dioses. (Garcés, 2019, p.21)

En este punto, Delfos se reconocía como el corazón espiritual de Grecia (Rodríguez,2006), que además de los Juegos Píticos, se le iba a consultar al oráculo [10] teniendo una conformación espacial de múltiples dimensiones dentro del monte que se correspondían entre sí; el templo con el oráculo a ‘los pies’ del teatro, sostenía no sólo los conceptos existenciales griegos sino que también, hablando de una de una manera no figurada, la vista [11] de quienes espectaban desde lo alto. Por ello daba lugar a una espacialidad escénica que congregaba, como se ha dicho, no solo a una escala de Grecia sino que a una global a las/os habitantes, magnificando el sentido de ser griega/o, al ensalzar lo propio de su cultura, ya que no sólo ofrecía una perfecta adaptación para el asentamiento humano esporádico, sino que se daba lugar a experimentar el estar en un cosmos bien definido, por ende, se traducía en mundo concebido para el teatro.




Entonces, el Teatro de Delfos remite más allá de él mismo y pone de manifiesto, tanto en forma como en función de sus elementos, los lazos que existieron entre ellos, engendrados desde la cosmovisión helena. En suma, este espacio escénico recoge lo que su cultura le transmite para en sí mismo retransmitirla con posibilidades de influenciar esta dicha cultura haciéndola cambiar; siendo una entidad con matices de ser [12]. Es por esto, que se le considera un microcosmos comunicacional: es el resultado y a la vez la posibilidad de transmutación de su cultura al dar cuenta de esta.



Las observaciones y esquemas presentados a continuación están dispuestos para enfatizar esta relación del cuerpo, la naturaleza y la extensión a los días de hoy en la ciudad, ligándoselas a los espacios conformados por red de relaciones, como se expresa en el texto

A modo de conclusión

Como se ha desarrollado en este ensayo, el Teatro de Delfos conjugaba toda una organización de componentes esenciales para la cultura helena, armonizando y llevándolos a un todo que da paso a la extensión de tres principales ejes: el divino, el humano y el natural, por aquello, es considerada capaz de dialogar con lo que le rodea.

  1. Se pudo demostrar su origen ligado a lo divino al ser un espacio que surge etimológica y míticamente de la idea sagrada de fecundidad atribuida a la Diosa Madre Tierra, inicial poseedora de este espacio y que desde ella surge la historia que conlleva el templo a lo largo del tiempo.
  2. Asimismo, desde la personificación de la naturaleza por medio de Gea, se abordó la ambivalencia presente en la/el ser humana/o, siendo parte de la naturaleza y con ello siendo un/a ser terrenal y cósmica/o, lo que impulsa a entender la encrucijada del Teatro de Delfos construido entre lo natural y lo divino para finalmente, concluir que es una expresión microcósmica que es nutrida y a su vez nutre culturalmente (por ello dialoga), sobre todo mediante la percepción visual de quienes contemplan aquella plenitud de la obra y lo que se extiende tras ella.


Esto es coherente con la concepción, a modo más general, de Teatro de Aristóteles sobre que es el espejo de las acciones humanas y revela sus consecuencias (Aristóteles, s. III a.C.) y -añadiendo para finalizar- revela la necesidad de trascendencia a través de este y sus vinculaciones comprendidas en este escrito, haciendo eco hasta los días de hoy sobre sus representaciones y extensiones en la encrucijada de Delfos.

Fig. 12 Relaciones concluyentes. Fuentes: Elaboración Propia



Referencias

Aldana, C. (1997). Mito y concepción espacial del Santuario de Apolo en Delfos. Universidad de Valencia, 7(8), 7. https://www.uv.es/dep230/revista/PDF216.pdf

Beauvoir, S. (1949). El segundo sexo (5.a ed.). Éditions Gallimard.

Brutón, A. (2018). El concepto de incomunicación en el teatro como espejo de la sociedad. Universidad Complutense de Madrid, Facultad de Filología. https://eprints.ucm.es/id/eprint/56306/1/T41221.pdf

Cartwright, M. (2021, 5 septiembre). Apolo. Enciclopedia de la Historia del Mundo. https://www.worldhistory.org/trans/es/1-946/apolo/

Delfos. (17 de agosto del 2021). En Wikipedia, la enciclopedia libre. https://es.wikipedia.org/wiki/Delfos

Garcés, A. (2019). La Ciudad Teatro (Revisado ed.). Ediciones e[ad]. https://www.ead.pucv.cl/app/uploads/2020/04/La-ciudad-teatro-2019.pdf

Greece, D. (2021, 9 abril). Explorando las montañas de Grecia. Discover Greece. https://www.discovergreece.com/es/travel-ideas/article/exploring-mountains-greece

Hadot, P., y Miquel, M. C. (1992). EL VELO DE ISIS. Alpha Decay.

Heidegger, M. (1927). Ser y Tiempo. Createspace Independent Publishing Platform.

Herreros, J. (2021, agosto). Guión N.o 01. Wiki Casiopea. https://wiki.ead.pucv.cl/Josefa_Herreros_Cárdenas_-_Guión_1

Herreros, J. (2021, agosto). Guión N.o 02. Wiki Casiopea. https://wiki.ead.pucv.cl/Josefa_Herreros_Cárdenas_-_Guión_2

Herreros, J. (2021, agosto). Guión N.o 05. Wiki Casiopea. https://wiki.ead.pucv.cl/Josefa_Herreros_Cárdenas_-_Guión_5

Martin, R. (1989). Arquitectura Griega. Madrid, Aguila.

P., y Azcona, C. (2021). Descripción de Grecia (edición ed.). Alianza.

Pitón, mitología. (28 de julio del 2021). En Wikipedia, la enciclopedia libre. https://es.wikipedia.org/wiki/Pit%C3%B3n_(mitolog%C3%ADa)

Roche, J. (2017). La arquitectura teatral griega constituye una analogía del cuerpo humano cósmico y político. Revista de Historia de las Ideas Políticas, 20.3 Ediciones Complutense. https://doi.org/10.5209/RPUB.57499

Rodríguez, U. (2006). De la embriaguez que viene de la Tierra: El Oráculo de Delfos (64.a ed., Vol. 13). Benemérita Universidad Autónoma de Puebla.

Notas al pie

  1. Véase Guión 01 y guión 02.
  2. Tanto Esquilo como Pausanias manifiestan en sus escritos que Delfos perteneció a otras/os Diosas/es antes de ser el espacio atribuido a Apolo, pero para la cita solo se encontró la referencia de Pausanias.
  3. Se verá a mayor profundidad en el subapartado 1.3.2
  4. Como se demostró en el primer subapartado, la fertilidad era un símbolo de adoración y divinidad.
  5. Parte del Teatro donde se realizan las obras y actúan las/os actrices/actores, en el caso del Teatro de Delfos, esta medía unos 20 m de diámetro aproximadamente. Véase guión 01.
  6. Parte del Teatro destinada a las/os espectadoras/es, de forma semicircunferencial congregados en modo de gradas hacia un centro (orchestra), en el caso del Teatro de Delfos su Koilon podía albergar hasta 5 000 espectadoras/es. Véase guión 01.
  7. Según Heidegger, con su modelo propio del ser humana/o (‘Dasein’), esta/e es la/el única/o ente que vive fuera de sí, abierto constantemente al ser y sufrir una revelación de ella/él. Por lo que de ello se abstrae que la/el ser humana/o es la/el única/o ser viva/o capaz de representarse a sí mismo. Ver guión 02.
  8. Aquí es importante recalcar la significación del sol para las/os griegas/os, el cual se personificaba mediante el Dios Helios, el cual, a medida que avanzaba el tiempo, fue identificado con el Apolo, el Dios de La Luz, el cual se le confiere este teatro y representaciones, por lo que el vínculo entre el ciclo solar y la manera de erigir el teatro también tiene una significancia para la cultura helena.
  9. Se dice que Zeus liberó dos águilas desde los extremos de la tierra (los griegos reparaban en una tierra plana en forma de disco) para que averiguara dónde se hallaba el centro de la tierra y, según la leyenda, justo se encontraron en el cielo de Delfos.
  10. El oráculo de Delfos fue uno de los principales oráculos de la antigua Grecia, donde tuvo su auge a mediados del siglo VIII a.C. siendo en este período el oráculo con más prestigio y autoridad entre las/os griegas/os.
  11. Las/os griegas/os le otorgaban un papel prioritario en los sentidos a la visión. Véase Roche Cárcel, J. A. (2017, 20 enero). La arquitectura teatral griega constituye una analogía del cuerpo humano cósmico y político, pág. 531, Revista de Historia de las Ideas Políticas, 20.3 (Ediciones Complutense).
  12. Para Heidegger, en su libro Ser y tiempo (referenciado), el ‘ente’ es lo que aparece (un algo con todas sus características) y su ‘ser’ es la modalidad determinada en el darse, así el ser es una manifestación singular del ente.