EAD3212-01. Poética General. Karime Briones. Tarea 2

Título	EAD3212-01. Poética General. Karime Briones. Tarea 2
Asignatura	Poetica General
Del Curso	Poética General 2021 S1
Carreras	Arquitectura
Nº	2
Alumno(s)	Karime Briones

Valparaíso. Habitar la pendiente y el origen de lo americano

Este proyecto de título surge en Valparaíso, más específicamente entre los cerros Concepción y Alegre y responde a un centro cultural a escala barrial, el cual se fragmenta en 3 espacios que se posicionan y despliegan sobre el territorio.

El primer espacio, toma lugar en Gálvez con escalera Fischer y cuenta con un programa destinado a la exposición y reunión. Los otros dos espacios están destinados a la creación artística y presentan un programa en relación a talleres y salas de ensayo que vienen a complementar a este espacio central expositivo. La idea del proyecto nace del dialogo con los vecinos del sector, en donde la contraparte “teatro Valparaíso Profundo” plantea la necesidad de dar lugar a espacios que fomenten el desarrollo de la comunidad, actualmente afectada por la alta gentrificación del lugar, además de promover y apoyar la cultura, las artes y el patrimonio de estos cerros.

Valparaíso, identidad y territorio

“Valparaíso la ciudad que ha olvidado su destino. Gente de los cerros contempla su propia ciudad. La gente de los cerros sube a los cerros, baja de los cerros: un panorama a la subida, otro a la bajada una vez el mar y la línea del horizonte, otra vez el cielo y los cerros, una vez los techos y los follajes otra vez las escaleras y los troncos. Gente que mira, gente que mira con el ojo. Gente que tiene la presencia de lo múltiple en el ojo.”Alberto Cruz (1954). .”

Valparaíso posee una gran virtud que es el habitar en altura, el colgarse del cerro para habitar en el ingenio entre el trazado y la arquitectura. Es el recorrer sus cerros y hacerse parte de ellos en sus bordes y cimas, para quedar completamente expuestos ante un mar y un cielo que nos regala este gran anfiteatro natural que es Valparaíso.

El proyecto toma lugar entre la cota 47 (ascensor Concepción) y la cota 39 (ascensor El Peral). En esta primera altura de la ciudad, los ascensores se presentan como hitos estratégicos de referencia y conexión con el territorio, la calle Urriola aparece como una gran cuenca que unifica a ambos cerros con el plan de Valparaíso.

El lugar aparece en el recorrer del cerro y la pendiente, que nos sitúan y elevan en un lugar privilegiado tanto para el cuerpo como para el ojo, ya que estos cerros cuentan con paseos, miradores, ascensores y escaleras que los conectan en su horizontal sinuosa y su vertical abarrancada, haciendo al cuerpo el protagonista del espacio y dueño de la pendiente.

Lo dinámico de habitar el cerro y la pendiente se ve trazado en sus calles estrechas, en sus largos pasajes de cielos enmarcados y en sus interminables escaleras que conectan los distintos niveles del cerro.

“Este lugar se configura como un primer borde, que regala al habitante una primera altura y el recorrido de la ciudad a través de esta.”

La pendiente y el origen de lo americano

“–Valparaíso se articula en dos partes, como dijimos– la primera época que fue fundada en el plan y después se subieron a los cerros. En los cerros vive gente cuya casa la edifica el maestro. Ellos hacen sus casas y se sienten felices porque ignoran el tiempo actual de las grandes ciudades y una mayor hermosura de la intimidad de la vida. Pero los que viven en el plan, no.” (Alberto Cruz, Improvisación del arquitecto Alberto Cruz, 1959)

Valparaíso nos trae a presencia una forma particular y única de habitar. Una forma no premeditada de construirse a sí mismo a través de sus cerros, esta suerte de improvisación entre la pendiente y el habitar nos hace pensar en algo propio del ser americano.

A flor de labio aparece la ciudad entre cerros, sin planos, sin trazados, solo una intensión, habitar el cerro.

El suelo americano (Valparaíso) moldea esta identidad que le es propia a cada uno de los habitantes, existiendo una relación directa con el territorio, donde su geografía recoge un modo de habitar y de crear distinto al de otros lugares de la tierra.

Es así como Valparaíso se posiciona ante el mundo, destacando por su patrimonio natural, arquitectónico y cultural. El área en donde el proyecto se emplaza, es considerada monumento nacional bajo la categoría de Zona Típica o Pintoresca, es por esto que este sector se caracteriza por ser altamente concurrido y de un gran atractivo turístico.

En un primer momento la intención de estos barrios ubicados en el primer borde de Valparaíso, era el de vivir alejados del plan y en contacto con la naturaleza y el paisaje que les regalaba el horizonte y la altura. Esto se puede apreciar en los pequeños jardines, corredores, galerías y balcones, que acentúan la relación con el entorno próximo, es por esto mismo que el sector cuenta con una gran cantidad de espacios públicos como plazas, paseos miradores, pasajes, escaleras y ascensores. Pero a pesar de su condición de espacio público existe una estrechez que predomina en su configuración.

Lo público y lo privado en muchas ocasiones se ven superpuestos, como sucede en un pasaje o en un mirador, estos tienden a ser una extensión de las viviendas, es por esta condición que muchas de las viviendas del sector han sido remodeladas para un uso turístico, comercial o cultural. Convirtiéndose en hostales, restaurantes, cafeterías, tiendas y talleres de confecciones artísticas y/o manuales, etc.

"Valparaíso se construye en una estrechez ascendente, hacia un cerro que no distingue entre lo público y privado".

“Y que construyan en pendiente si así ellos lo quieren. Valparaíso entero tiene la tradición de la pendiente: las únicas obras realmente arquitectónicas de Valparaíso son en las pendientes de las quebradas que entran entre los cerros: no sólo lo son por sus formas y colores, sino que por la audacia de las proezas constructivas, en verdad, jamás en Venecia una casa que dé a un canal tuvo la madurez espacial que tienen estas casas en pendiente”. Alberto Cruz (1954). .”

El arte como transformador de territorios

El sector de emplazamiento a lo largo de los años y la historia ha experimentado variados cambios, como antes mencionaba esta primera altura de Valparaíso nace de una necesidad de desahogo, lo cual aún permanece en el lugar con un sentido mucho más público, pero debido al gran auge turístico y comercial vivido en este sector, los residentes han emigrado. Hoy el sentido de barrio comienza a desaparecer, absorbido por lo multitudinario y gentrificado del lugar.

Dejamos de construir lo común que permita la interacción y la mixtura entre el habitante y el extranjero, para darle protagonismo a este último en su relación esporádica con el territorio y olvidando a quienes permanecen.

Se entiende el arte y su patrimonio como fuente de experiencia, reflexión y conocimiento, razón por la cual, es necesaria su valoración y transmisión en la sociedad.

El arte y la cultura son parte intrínseca de Valparaíso, de sus cerros y sus habitantes, por ello el sentido artístico y cultural se hace presente como un elemento que articula y pone en valor la relación entre el habitante y su contexto, generando relaciones interpersonales dentro de una comunidad o un barrio. Construir barrio a partir del arte y la cultura.

Conclusión

Heidegger señala en “Construir, habitar, pensar” los dos modos del construir: (1) de abrigar y cuidar y (2) de erigir o levantar un edificio. “Construir como el habitar, es decir, estar en la tierra, para la experiencia cotidiana del ser humano, lo habitual”

A partir del análisis espacial, social y cultural se concluye que la gran virtud de Valparaíso es el habitar en altura, en la pendiente. El sentido del proyecto por tanto debe abocarse al recorrer del cerro, hacerse parte de la pendiente meramente porque Valparaíso así lo quiere, así se configura y así nos invita a habitarlo.

Se deberá cuidar la relación preexistente entre el habitante y el cerro, además de cuidar y potenciar la relación entre los propios habitantes del sector, con su barrio y sus quehaceres, se propone para ello el arte y la cultura como medios para la potenciación del lugar y de sus habitantes.

Se propone entonces un recorrido vinculante que atraviese el cerro en su horizontal elevada, a partir de la fragmentación, debido a la estrechez antes mencionada, de espacios para el esparcimiento social, artístico y cultural.

El proyecto que se presenta como un regalo para la ciudad, recoge el sentido más primitivo del ser americano, del porteño, nos regala la pendiente y un recorrido del cerro.

A flor de labio aparece el territorio americano, Valparaíso aparece entre sus cerros, sin planos, sin trazados, aparece solo a partir una intensión, habitar la pendiente.