Diseñar enmarañando mundos: Conocernos y transformarnos en el sur

De Casiopea







TítuloDiseñar enmarañando mundos: Conocernos y transformarnos en el sur
Año2022
AutorPablo Hermansen, José Guerra Solano
Tipo de PublicaciónCapítulo de Libro, Ponencia, Inédito
RevistaSeminario Internacional Formación y Oficio en Arquitectura y Diseño
CiudadCiudad Abierta
Palabras Claveseminario 70 años
Carreras RelacionadasDiseño
NotaBordes del oficio

En universidades y gremios, artículos y exposiciones, congresos y conversaciones, se suele asumir, sin crítica, a la revolución industrial europea como mito de origen del diseño. Esto tiene varias consecuencias. Al vivir este hito del proyecto civilizatorio occidental como constitutivo de nuestro entorno nativo, banalizamos sus cualidades, evadimos el examen crítico de sus modos de producción. Nos confinamos, como peces en el agua, a sus flujos y mutaciones, naturalizando los nuevos vectores (capital, información, biopolítica, etc.), relaciones de poder, y las cada vez más complejas combinaciones entre sus componentes.

El diseño antropo- y euro-céntrico, hoy hegemónico, es brazo armado del proyecto civilizatorio occidental. Más allá de los cantos de sirena del capitalismo verde, en la práctica este diseñar asume que, más allá de las fronteras de su dominio, hay un paisaje de fondo llamado naturaleza, desde donde obtener recursos orgánicos e inorgánicos. Mitos y territorios, prácticas culturales y materiales, quedan disponibles para ser extraídos como oportunidades de diseño. Nuestra disciplina, inmersa en sus cambiantes aguas, ocurre como diferencia radical de aquello que excede el dominio en que se inscribe (de la Cadena, 2010).

No obstante, en diálogo con Escobar (2016), reconocemos que el diseñar, al enmarañar materia y reflexión, posee la potencia para movilizarse políticamente ensanchando la gama de posibles formas de conocernos y transformarnos (Sánchez y Hermansen, 2020); desde nuestros cuerpos en alianza, aprehendiendo flujos y materialidades, empujar los análisis deconstructivos habituales para diseñar como práctica situada (pro)positiva. Desarrollaremos nuestra propuesta empírica y epistémica de diseño desde el sur desde la palabra maraña, para amalgamarnos –o enmarañarnos– con diversos proyectos y redefinir colectivamente nuestras realidades y figurar formas alternativas de estar y hacer un mundo de muchos mundos (de la Cadena y Blaser, 2018).