Catalina Vergara/ Estudio del pelícano
Título | Estudio del pelícano |
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Palabras Clave | gestoanimal |
Período | 2017-2017 |
Asignatura | Construcción 4º DI 2017, |
Del Curso | Construcción 4º DI 2017, |
Carreras | Diseño, Diseño Industrial"Diseño Industrial" is not in the list (Arquitectura, Diseño, Magíster, Otra) of allowed values for the "Carreras Relacionadas" property. |
Alumno(s) | Catalina PazVergara |
Profesor | Marcelo Araya, Herbert Spencer |
I. El pelícano
El pelícano es un ave acuática de gran tamaño. Es fácil distinguirla del resto por su enorme pico y la gran bolsa que lleva en éste. Aunque, posee otras características que lo distinguen del resto de las aves. Estos animales pertenecen a la familia de los Pelecanidae. Su nombre científico es Pelecanus. Se destaca por su gran capacidad para el vuelo, lo que puede hacer durante largas horas, por el contrario, se le dificulta su movilidad en tierra. Los pelícanos viven en colonias que anidan en las costas de mares y en las orillas de ríos y lagos de regiones cálidas.
Posee una capa fibrosa profunda en los músculos del pecho les permite mantener sus grandes alas rígidamente horizontales para elevarse y planear; aprovechan las térmicas para elevarse a alturas de 3000 m o más, planeando o aleteando en formación en V y pueden volar distancias de hasta 150 km para desplazarse a zonas de alimentación. También pueden volar bajo sobre tramos de agua, utilizando un fenómeno conocido como efecto suelo para reducir la resistencia inducida y aumentar la sustentación; a medida que fluye entre las alas y la superficie del agua el aire se comprime y aumenta la densidad, ejerciendo una mayor fuerza ascendente al ave que está encima, con un importante ahorro energético al volar.
1. Observación y estudio
Al observar al pelícano, su aterrizaje, su vuelo y su comportamiento, se logran apreciar que sus extremidades se proyectan desde un centro, lo que se comprende como el “torso” del ave. Este “torso” corresponde a una serie de huesos fusionados que articulan los movimientos del ave y los que le permiten generar tanto el vuelo como su movimiento.
Por lo tanto, las extremidades del pelícano se llegan a este centro articulador de movimiento, el que a su vez le otorga la capacidad de plegarse y replegarse sobre sí mismo aumentando o reduciendo el volumen que utiliza en el espacio. De esta manera, sus extremidades, vistos como aristas en un plano, convergen en un centro.
Estos planos de movimiento unidos en articulaciones móviles del tipo de una bisagra le permiten al ave reducir el volumen que ocupa en el espacio desde el momento del vuelo hasta el descanso en tierra.
Así, estos planos o extensiones unidas en vértices, dan forma y dirección a los movimientos del ave y de cada uno de sus pliegues y repliegues, con el fin de acomodar sus alas para acoplarlas a su cuerpo de la manera más óptima posible.