B. Escuela Especial ALTAVIDA (Miércoles, 22 de Noviembre)

De Casiopea






Caso de Estudio
NombreEscuela Especial ALTAVIDA (Miércoles, 22 de Noviembre)
RelacionadoAccesibilidad Cognitiva
Estudiado porAntonella Pastén, María Ignacia von Unger

Sala con niños de 5-6 años Se comienza el día con la lectura de la cartelera, que consiste en una pizarra con imágenes que representan las tareas que se llevarán a cabo en el día, en el orden en que éstas se harán. Con esto se anticipa a los niños las actividades que se realizarán durante la jornada. Es importante darles a conocer todo lo que se hará, ya que al ser personas con mayor índice de frustración frente a los cambios, cualquier actividad que altere la rutina les generará conflicto. Es por esto, que constantemente las profesoras mantienen una estructura temporal que divaga entre lo que se hizo (pasado), lo que se está haciendo (presente) y lo que se hará (futuro), generando un modelo cíclico: hago un recuento de lo que ya hice, retomo y continúo.

La cartelera muestra el itinerario a través de láminas que contienen uno o dos pictogramas –que ilustran la actividad– y el nombre de ésta. Cuando se quiere dar cuenta de una actividad que ya se realizó, sobre la lámina se pega un velo traslúcido, que si bien deja entrever el contenido de la lámina, mantiene una diferencia visual con el resto. La idea de esto (lo traslúcido) es no generar un vacío visual en los niños. Que aquello que ya hicieron no desaparezca, sino que se tenga conocimiento de que “ya pasó y ahora estamos haciendo otra cosa nueva”.

[[Archivo:|center|800px]] Carteleras generales

Estos velos actúan como breadcrumbs, permitiendo a los niños recordar aquello que ya hicieron. De esta forma, se trabaja de manera natural la memorización, aspecto poco abordado en las personas con trastorno del espectro autista al momento de comunicarse.

En general, la efectividad de la comunicación en la sala se basa en dos aspectos: el anticiparse, como una manera de organizarse y la intención comunicativa que tengan los niños. Ésta última estará directamente ligada al grado de autismo. La comunicación que se da en este entorno se caracteriza por dar a conocer una necesidad de parte del niño hacia la profesora. Entre pares existe poca comunicación. Independiente de si se trata de la construcción de frases con pictogramas o cualquier otro lenguaje convencional. Entre ellos utilizan otras formas de interactuar más ligadas a lo kinésico.

En cuanto a la distribución de elementos en la sala, se intenta evitar el exceso de información o estímulos innecesarios, la idea es que al menos en la pizarra exista sólo la información que esté relacionada con la tarea que estén desarrollando en el momento. En concreto podrían llegar a ser entre 4 a 5 imágenes o elementos a la vista.

[[Archivo:|center|800px]] Carteleras de tareas específicas

Continuando con la interacción entre el niño y la profesora, el emisor (en este caso el niño) tratará de manera inconsciente bajar la verbalización a algo concreto. De este modo, para las profesoras cualquier tipo de lenguaje o modo que encuentre el niño de realizar esto será válido. Estos “modos” pueden variar desde tirar la ficha, decir una palabra, o construir de manera continua la frase a través del uso de los pictogramas. Lo importante es que en cualquiera de estos casos el niño tuvo la intención de comunicar una idea o necesidad del momento. Como respuesta a esto, el receptor (la profesora) puede responder del mismo modo, conjugando el pictograma con gestos corporales o faciales, incluso con lenguaje de señas, siempre teniendo en cuenta que este tipo de comunicación sólo considera conceptos como verbos o elementos concretos, no ilativos. Pareciera ser que el ilativo se infiere al momento construir la frase, como si fuese un proceso mental automatizado.

Este sistema funciona muy bien en la sala, ya que tanto su entorno (colegio y familia) como los niños tienen conocimiento de éste. Sin embargo, el entorno fuera del círculo más cercano, en general no tiene conocimiento de estas formas de comunicación, por lo tanto es muy difícil que estos niños puedan proyectarse a futuro como personas con total autonomía teniendo esta herramienta comunicativa. Hace falta acercar al entorno para que eduquen esta nueva manera de interactuar.