Santuario Schoenstatt
Calle Villarrica, los Pinos de Reñaca, Viña del Mar.
Concurrencia organizada de la comunidad.
organización semanal
- Misa familiar (2 x semana 18 de cada mes)
- Liturgia de la palabra (lunes a Viernes)
- Rezo del Ángelus
- Rezo al Santisimo
- Rezo del rosario. (miercoles)
- Confesiones (martes)
- Retiro, Bautizo, matrimonios.
Emplazamiento
A un costado del sitio, esquina AV. Gaston Hamel Nieto con Las tencas. La explosión de la ciudad. la distancia con ella se acorta cada vez. Las plantaciones de pinos hacen frente a esta situación urbana. lo abierto se acota. La ciudad en su orden fragmenta el espacio “natural”.
Eje principal y Ermita
Largo hundido que se orienta desde el fondo, no es el altar sino su ubicación concurrente la que deja al cuerpo ante el. El silencio es el sonido que deja en evidencia su irrupción, el espacio se cumple en el silencio como un estadio se cumple en su dinamismo. La relación-interacción del hombre y el lugar se da en lo silente.
Parte trasera de la ermita-eje principal- miro desde el limite. El altar esta en lo culminante del eje que ordena el programa, la ermita cierra el espacio, le da retorno. El suelo a modo de surco orienta no el altar. Esta zanja esta semi-cubierta por una tela triangulada y tensada, tiene como color la mezcla del café y el verde, los colores del bosque. Cubierta fragmentada como respuesta al suelo, juntos construyen el interior de la ermita. La cubierta como el intento de seguir en el bosque.
Acceso
Se accede al sitio y al bosque a la vez, el sitio esta al borde del bosque
Los espacios descubiertos constituyen un tajo en el largo del eje principal. El primer espacio que se abre es estacionamiento, consume el movimiento de la entrada. El porvenir no se desvela, el camino como huella .
la magnitud
La magnitud del bosque se da en el dejar dentro y entre los arboles. Es el terreno que forma parte del bosque y no un bosque dentro del terreno. El zócalo del santuario permite el desarrollo del bosque "sin forma" .
las bancas, el escuchar
Las bancas se disponen de acuerdo a la pendiente, la diversidad del permanecer ante lo mismo, la misma misa no obliga un modo de estar, el escuchar no es uniforme. El asentarse de las bancas es leve, no incide en el terreno, el suelo no sostiene el sentarse orientado al altar, sostiene el escuchar a veces la vista. La cuerda bordea un cambio de altura dejando más distante lo posterior.
Centro
Desde el cual se organiza todo el programa.
Estoy bajo el bosque, veo el,detalle del tronco próximo y su follaje, el cual como unidad me deja en un borde interno frente a un conjunto de pinos de doble horizonte. El cuerpo se desdobla,ingrávido queda retenido en el frente. Una cálida ingravidez, el vacío es también luz y calor.
Patio extiende tu manto
La meseta central donde se cumple la llegada y se distribuye el programa se extiende al costado sur del sitio bordeando el bajo del terreno.
El juego de lo proximo y lo distante lo define el cambio de altura, de esto dan cuenta los arboles. Partes que se suman sin embargo no hacen el total, se completan en el movimiento de la pendiente.
Un claro de luz es un lugar, las sombras constituyen un borde oscuro aparece el sol y la sombra de los pinos toma forma.El permanecer en el bosque está acompañado de un constante movimiento, que lo sostiene la pendiente y los árboles como cubierta.
Estados luminosos
El acontecer del cielo se proyecta renovadamente en el suelo. es normal que en la costa se pase de nublado a soleado y viceversa constantemente, el bosque como filtro luminoso le otorga movilidad al suelo.